Caso Chevron-Texaco en ecuador “el pueblo ecuatoriano grita justicia”

Caso Chevron-Texaco en ecuador “el pueblo ecuatoriano grita justicia”

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Al escribir sobre este tema en mi cabeza comenzaron a surgir inquietudes y sobre todo mucha  impotencia al saber que las selvas ecuatorianas y nuestros compatriotas gritan justicia y reparación al daño causado por una de las empresas más ricas del mundo, y es entonces que me pregunto ¿Dónde están las  organizaciones y leyes que amparan  los derechos humanos y la protección de medio ambientes?, ¿Sera que solo son organizaciones vacías o papeles en blanco?  

Hace 28 años el Ecuador busca Justicia, En la Selva amazónica desde 1964 la empresa transnacional Texaco, comprada por Chevron en el 2001 comenzó la extracción de petróleo en las provincias de Sucumbíos y Orellana, ubicadas en la zona norte de la Amazonía ecuatoriana produciendo  un gran daño ambiental en las selvas ecuatorianas y a los habitantes de esa zona.

Por ese motivo el 3 de noviembre de 1993  15 personas iniciaron una demanda contra la empresa petrolera, entre colonos e indígenas Cofanes, Secoyas y Kichwas de Orellana y Sucumbíos demandaron a la petrolera  en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, acusándola de haber contaminado el ambiente y afectado a la salud de la gente debido al uso de tecnología barata y obsoleta durante la explotación petrolera en la Amazonía ecuatoriana, después  30.000 ecuatorianos amazónicos se unieron a la demanda contra esta empresa.

Comenzó el juicio en tierras estadounidenses en el año de 1993 y por presión de la petrolera, el 16 de agosto de 2002 la Corte de Apelaciones de Nueva York, resolvió enviar el caso al Ecuador y el 7 de mayo de 2003 se presentó la demanda en la Corte Superior de Nueva Loja, por fin el 3 de enero de 2012, el pleno de la Corte Provincial de Sucumbíos, ratifica la sentencia en segunda instancia y el 23 de julio de 2012 liquida el monto total a cancelar por parte de la petrolera y que asciende a 19.021.552.000 de dólares.

 Chevron fue juzgada en dos ocasiones obteniendo la respuesta de ser la culpable de las muertes de nuestros compatriotas por la contaminación  a las tierras donde muchos pueblos no pidieron el daño ni la muerte de sus seres más queridos, el dinero no devolverá, ni quitara el dolor de muchas familias, pero ayudara a la reparación ambiental para la selva ecuatoriana, que bien es cierto no será lo mismo seguirán estragos y las muertes de gente inocente todavía se sentirán.

Esta búsqueda de justicia no es una persecución contra las multinacionales, solo se quiere que la empresa Chevron, la cual no cumplió con la responsabilidad social que le correspondía, contamino la tierra, el agua y el aire; provocó el daño de los territorios ancestrales y la pérdida de la diversidad de la zona; provocó la muerte de muchos ciudadanos ecuatorianos y el desplazamiento de colectivos ancestrales pague y de se cuenta que ha causado daño contra un pueblo y un territorio.

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