Conflicto Social

Conflicto social:

El conflicto social puede definirse como una lucha entre individuos y/o grupos derivándose los mismos por insatisfacciones en sus necesidades, por diferencias en cuanto a cultura (valores) o pretensiones a estatus y a poder en la cual los objetivos de los involucrados no son solo obtener los valores deseados, sino también neutralizar y a veces hasta dañar o eliminar a sus oponentes.

A este respecto es importante resaltar que las distintas sociedades no escapan ni escaparan en experimentar estas situaciones a pesar del grado de desarrollo que puedan alcanzar. Es así como el conflicto es consustancial al ser humano. En este sentido, Guilaine y Zammit (2002), señalan: Los restos arqueológicos muestran la evidencia de conflictos ya desde la Prehistoria, tanto a gran escala (luchas entre distintas partes) como a escala individual indicando que los conflictos han constituido y constituyen un factor muy importante en la evolución de las sociedades humanas.

El concepto de conflicto abre grandes posibilidades de estudio, análisis y diagnóstico por su relación con las necesidades humanas, las percepciones, las emociones, los deseos, etc. Así se tiene que, el conflicto puede ser entendido como una regeneración de las sociedades humanas (Morín, 2005), lo que conduce a que el conflicto no solamente es un factor de distorsión sino que incluye también el germen de la paz. Posee tanto la vertiente de crisis como la de oportunidad de cambio, tanto la idea de enfrentamiento como la de mejorar situaciones y relaciones, que pueden conducir a distintos resultados según sean su desarrollo y la metodología utilizada para gestionarlos.

Teoría del conflicto:

La perspectiva marxista: el conflicto como motor del cambio social

En todo el cuerpo teórico presentado por Marx está presente, de una u otra forma, el tema del conflicto. Aportes Básicos de la teoría de Marx al conflicto:

Conflicto y evolución: Marx considera el conflicto como motor de la evolución histórica.

Los cambios en la evolución social de la humanidad han sido originados en las elaciones, intrínsecamente conflictivas, de las fuerzas que han ido conformando los distintos órdenes sociales.

Toda sociedad es un escenario de enfrentamientos entre diferentes grupos que rivalizan por el control de recursos limitados. La vida social genera inevitablemente división de intereses, metas opuestas y conflictos. Los conflictos son normales y pueden ser benéficos (produciendo reequilibrios de poder). El cambio es inevitable e incluso deseable.

Naturaleza del conflicto: Las relaciones entre una clase dominante (que posee los medios de producción, trata de explotar a la clase trabajadora e imponerle su forma de pensar –ideología dominante- instrumentalizando el Estado para justificar su posición de superioridad) y una clase explotada (que

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