Cápac YupanquI: “El maquiavélico”

CÁPAC YUPANQUI: “EL MAQUIAVÉLICO”

(LÍDER VISIONARIRO QUE FORJO LA GRANDEZA DEL IMPERIO INCA, SU NOMBRE TRADUCIDO ES “SUPREMO CONTADOR”)

Mi fecha de nacimiento no se sabe debido a la escasa información que hay sobre mí, en algunas páginas dicen que nací en una fecha aproximada mientras en otras páginas es diferente.

Soy el V inca y último de la rama Huarin Cuzco. Mi padre, Mayta Cápac, Sinchi de los Ayamarcas, pertenecía al linaje de los quechuas de Paruro, y de Mama Cora; al morir mi padre y en vista de que ninguno de los hijos merecía la jefatura del Inca, los ayllus de Hurin se pusieron de acuerdo para elegir como sucesor a Cápac Yupanqui, por ser miembro de la familia de los Yupanqui; yo percibí un descontento entre mis hermanos, entonces convoqué a una reunión con los ayllus reales, ante la cual elogié discretamente y obtuve la excepcional victoria al ser proclamado INCA tras haber dado un golpe de Estado perpetuado a mi primo Tarco Huamán, quien había estado destinado originalmente al trono Inca.

Durante mi reinado, derroté a algunas pequeñas etnias como los Cuntis, agregando de esta manera unos pocos kilómetros cuadrados a mis dominios. Mi reputación iba creciendo, tanto así que el señorío quechua, de Abancay, me envió dos embajadores a solicitar ayuda para enfrentar juntos al poderoso estado Chanca.

Yo acepté y envié a mi primo Tarco Huamán a capturar 1000 avecillas(lavanderas) de la selva y del altiplano para ser quemadas en rituales militares.

En mi gobierno, mi pueblo seguía siendo pequeño ante los Ayamarcas, y un diminuto en comparación con el poderoso estado Chanca. Los Chancas eran ya temidos por los Ayamarcas (quienes se habían recuperado de las guerras civiles que Lloque Yupanqui generó entre ellos), y se proyectaba a la toma de toda la región cuzqueña, incluyendo a mi pueblo y los ayarmarcas. Por tal situación ambos buscamos una alianza, y se reflejó cuando el rey de Ayamarca me obsequió una esposa llamada Curi Hilpay.

 De mi relación con Curi Hilpay nació mi hijo Quispe Yupanqui, heredero al trono. Otros de mis hijos fueron, en orden de nacimiento, Apo Calla, Humpiri, Apo Saca, Apo Chimachui, Uchunchunascallarando y Apo Urco Guaranga.

Varios historiadores dicen de mí que dejé 80 hijos, entre legítimos e ilegítimos. Y al igual que mis antecesores, su preocupación fundamental fue mantener la posesión del valle del Cuzco, e ir sometiendo a las tribus que en las primeras invasiones habían actuado como aliadas.

Yo, Cápac Yupanqui, nunca me enfrenté al estado Chanca, pues morí antes de que estos llegaran al Cuzco, aparentemente fue envenado por mi concubina Cusi Chimbo, hija del sinchi o “señor” de Ayamarca, que llegó a ser mi segunda esposa.

La circunstancia fue aprovechada por los conspiradores Hanan Cuzco encabezados por Inca Roca, que atacaron el palacio de Inticancha (luego conocida como Coricancha), despusieron a los Hurin e instalaron a los Hanan Monarcas.

Hay otra versión conocida donde mi hermana Cusi Chispo, confabulaba con Inca Roca, la cual me envenenó y así terminaba la dinastía Hurin Cuzco.

Hay varias hipótesis y versiones sobre mi muerte pero esas 2 son las más conocidas que hay.

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