Cárceles en Puebla

INTRODUCCIÓN

        A través de los años la inseguridad y la violencia han tenido un aumento exponencial dando como resultado un estado de vulnerabilidad para la ciudadanía en general, por lo que no solo para nuestro país representa una alerta que necesita ser atendida, siendo ya un problema de nivel internacional.

        Desde su creación en 1945, la ONU tiene por objeto mantener la paz, seguridad y protección de los derechos humanos, asentados en la Carta de la Naciones Unidad, la cual fue el primer acuerdo internacional que marco una igualdad de derechos entre hombres y mujeres, siendo un parteaguas para la lucha de la erradicación de todas las formas de violencia y discriminación contra la mujer.

        A pesar de esta gran preocupación a nivel internacional, debemos mencionar que los últimos años se han visto marcados por diversos ilícitos, siendo México uno de los más afectados en temas de delincuencia organizada y feminicidios, generando un ambiente constante de miedo e inseguridad en el que la misma institución tiende a negar un trato humanitario a los delincuentes.

        Debido a estas situaciones, encontramos varias reformas constitucionales que dejan claros los derechos para los imputados, aunado a esto debemos recordar que desde el artículo primero de nuestra Constitución se nos dota de derechos por el simple y sencillo hecho de ser seres humanos.

        Como ejemplo de esta situación, podemos hablar de las mujeres en México, las cuales han tenido mayor presencia en los índices delictivos, siendo los delitos contra la salud, robo, secuestro y extorsión los más cometidos. Ahora bien, se debe tener en cuenta el medio en el que se desenvuelven, muchas de estas mujeres se encuentran en un entorno de pobreza aunado a un círculo de violencia perpetrado por la pareja o algún familiar que las obliga a delinquir.

        Ahora bien, en el artículo 18 constitucional nos habla de la prisión preventiva en su párrafo primero y en el segundo párrafo se estipula la prisión como cumplimiento de la pena con la finalidad de obtener la reinserción social, siendo a través del respeto a los derechos humanos, del trabajo, la capacitación para el mismo, la educación, la salud y el deporte. Así mismo las mujeres compurgarán sus penas en lugares separados de los destinados a los hombres.

http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/1_060320.pdf

DESARROLLO

La situación de los centros de reclusión es propicia para la transgresión de los derechos fundamentales de estas personas debido a una serie de irregularidades en materia de instalaciones, alimentación, atención médica, personal técnico y de seguridad, actividades laborales, educativas y deportivas; condiciones de hacinamiento y sobrepoblación, falta de separación entre hombre y mujeres.

En San Pedro Cholula, Puebla contamos con un CERESO, el cual debería tener una capacidad de para 200 reclusos aproximadamente siendo que esta población es rebasada en un 200%, siendo también mujeres las que se encuentran recluidas.

Aunque cuentan con dormitorios separados la mayoría de las actividades las realizan en los mismos espacios comunes, aquí conviven todos los reclusos sin importar género.

Ahora bien, podemos hablar de esta misma sobre población para las mujeres siendo que en un espacio destinado para 27 mujeres se pueden llegar a encontrar hasta 49, así mismo el hacinamiento en los dormitorios es deplorable.

En la mayoría de los casos de violaciones de derechos humanos hacia las reclusas, fueron hechas por familiares, de forma anónima y a los medios de comunicación por temor a represalias, por lo que tomaremos como base de estudio el Informe ISP-9/2018 del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura sobre Centro de Reinserción Social Distritales y Regional en el Estado de Puebla presentado el 04 de octubre de 2018.

En este Informe, se habla de los derechos humanos mínimos a los que cada persona tiene derecho, empezando por el alimento, siendo así que para la elaboración de los alimentos está a cargo de los reclusos y reclusas, contando con supervisión de elementos de seguridad y custodios, sin embargo, sí se cuenta con un comedor destinado a la población varonil mientras que, la población femenil cuenta con un comedor improvisado en el patio.

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Así mismo, la población femenil rebasa la capacidad establecida, por lo tanto, los dormitorios y número de camas resultan insuficientes, llevándolas a pagar por el uso de una cama o dormir en condiciones deplorables ocasionando que las condiciones de sueño sean mínimas y deficientes. 

Ahora bien, las reclusas consideradas de riesgo o peligrosas son ubicadas en una instancia, la cual cuenta con una litera y taza sanitaria, sin ventilación o iluminación creando así focos de infección latentes.

De acuerdo con el Informe Especial de Mujeres en Reclusión de la Comisión Nacional de Derechos Humanos del 2015, muchas de las reclusas reportan que se les realizaron abortos sin autorización, falta de alimento para los menores que se encuentran ahí, no existe una separación marcada entre hombres y mujeres, puesto que la repartición de alimentos la realizan los hombres, carecen de áreas deportivas propias.

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