ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

De qué va la ética


Enviado por   •  31 de Agosto de 2014  •  Tesis  •  5.656 Palabras (23 Páginas)  •  324 Visitas

Página 1 de 23

Capítulo 1: De qué va la ética

Nos habla de que no podemos hacer todo lo que queramos, pero lo que sí podemos es decidir si queremos hacer una cosa o no, y al tener que tomar una decisión, se nos plantean varias posibilidades. Las personas no somos libres de elegir lo que nos pasa, sino de responder de una forma u otra a lo que nos pasa.

El capitulo I nos platica sobre las hormigas blancas, que levantan su hormiguero varios metros de largo y duros como la piedra. El hormiguero les sirve de caparazón contra ciertas hormigas mejor que ellas. Cuando un hormiguero se derrumba las termitas-obrero se ponen a hacer de nuevo el hormiguero, las termitas-soldado defienden a la tribu, y cierran el hormiguero con ellas afuera, dando su vida por la tribu. Los hombres tenemos diferentes formas de pensar y por lo tanto el criterio de lo bueno y lo malo no puede nunca llegar a ser el mismo para todo el mundo

El hombre a diferencia de los animales es un ser racional al que se le da la opción de elegir y por lo tanto de equivocarse. Un animal tiene una vida programada por la naturaleza, y no tiene más remedio que cumplirla .Por esto, podemos optar por lo que nos es favorables a nosotros, pero, como estamos en posesión de estas elecciones e invenciones también nos podemos equivocar.

La palabra fundamental de todo este embrollo: libertad los animales no tienen más remedio que ser tal como son y hacer lo que están programados naturalmente para hacer. Los hombres también estamos programados por la naturaleza. Estamos hechos para beber agua, no lejía, y a pesar de todas nuestras precauciones debemos morir antes o después. Y de modo menos imperioso pero parecido, nuestro programa cultural es determinante: nuestro pensamiento viene condicionado por el lenguaje que le da forma. Somos educados en ciertas tradiciones, hábitos, formas de comportamiento, leyendas...; en una palabra, que se nos inculcan desde la cunita unas fidelidades y no otras. Todo ello pesa mucho y hace que seamos bastante previsibles.

Cierto que no podemos hacer cualquier cosa que queramos, pero también cierto que no estamos obligados a querer hacer una sola cosa. Y aquí conviene señalar dos aclaraciones respecto a la libertad:

Primera: no somos libres de elegir lo que nos pasa, sino libres para responder a lo que nos pasa de tal o cual modo.

Segunda: ser libres para intentar algo no tiene nada que ver con lograrlo indefectiblemente. No es lo mismo la libertad que la omnipotencia. Por ello, cuanta más capacidad de acción tengamos, mejores resultados podremos obtener de nuestra libertad. Hay cosas que dependen de mi voluntad (y eso es ser libres) pero no todo depende de mi voluntad (sería omnipotente), porque en el mundo hay otras voluntades y otras necesidades que no controlo a mi gusto.

Los hombres nacemos libres, tenemos una vida por delante que debemos construir nosotros mismos. También es verdad que el medio en el que nos desarrollamos tiene mucha influencia en nuestra vida y en lo que consideramos bueno y malo Savater nos muestra el ejemplo de las drogas, que si bien pueden aumentar nuestro ánimo y nos causan sensaciones agradables, a la vez su consumo continuo puede ser perjudicial para nuestra salud. Pero para esto es que los humanos poseemos el poder de la libertad, es así como construimos nuestra propia ética

Para intentar evitar en la medida de lo posible estos casos necesitamos fijarnos bien en lo que hacemos y procurar adquirir un cierto saber vivir que nos permita acertar. A este saber vivir, es a lo que llamamos ÉTICA.

Capítulo 2: Órdenes, caprichos y costumbres

Como se nos indicó en el capítulo anterior, las decisiones que tomamos están ligadas a si son buenas o si son malas, para esto usamos nuestra ética, pero esta misma se encuentra subordinada por ciertos motivos.

AL IGUAL QUE EN EL PRIMER CAPÍTULO, RECALCA FERNANDO SAVATER EL TEMA DE LA LIBERTAD. SOMOS LIBRES PARA HACER LO QUE PREFIRAMOS, PERO ESTA LIBERTAD SE VE LIMITADA EN NUMEROSAS OCASIONES. MUCHAS VECES SE NOS PLANTEAN DOS DILEMAS DE LOS CUALES TENDREMOS QUE INCLINARNOS POR UNO, AUNQUE LA VERDADERA PREFERENCIA SERÍA NO TENER QUE ELEGIR. PARA EJEMPLIFICAR ESTA CUESTIÓN, UTILIZA LA HISTORIA DE UN CAPITÁN DE BARCO. SAVATER DICE QUE EN OCASIONES NOS GUIAMOS POR UNOS DETERMINADOS FACTORES, SIN DECIDIR DE VERAS LO QUE NOS ES MÁS O MENOS CONVENIENTE.

Muchas veces se nos plantean situaciones en las que tenemos que elegir, aunque preferiríamos no hacerlo. También hay que reconocer que la mayoría de nuestros actos los hacemos automáticamente sin plantearnos si hacerlos o no, porque estamos acostumbrados. Por ejemplo, al sonar el despertador cada mañana, nos levantamos del tirón sin cuestionarnos si nos levantamos o no para realizar la rutina diaria. Actuamos instintivamente aunque a veces nos preguntemos por qué lo hacemos. Uno de los motivos es porque alguien nos lo manda, entonces estos actos que hacemos se llaman órdenes (las cuales realizamos por el miedo a la represalia que podamos obtener de la persona que nos lo ha mandado o también por la confianza y el afecto a ella, pues sabemos que nos lo manda por nuestro bien).Otros los hacemos por rutina, porque cada día hacemos lo mismo, entonces se llaman costumbres. Estas órdenes y costumbres parece que vienen del exterior,

Cada uno de los motivos que nos guían inclinan nuestra conducta en una dirección u otra y explican más o menos la preferencia a hacer una cosa en vez de otra. Cada motivo, responde a una necesidad diferente. Por otro lado está el capricho que viene del interior de uno, hacer algo solo porque se me apetece. Por esto mismo los tres motivos tienen su propia fuerza al momento de actuar frente a una situación. Como nos dice Savater, por algo decido levantarme cuando suena la alarma del despertador y no quedarme acostada como quiero. Sabemos que la mayoría de nuestras acciones son de forma automática (funcional) pero cuando nos enfrentamos a un problema de importancia debemos elegir de manera racional cuál de los tres motivos es el más adecuado para dicho con contexto.

Capítulo 3: Haz lo que quieras

En este capítulo, se dice bien claro que podemos hacer lo que queramos, pues estamos en nuestro derecho, somos libres, ¿no? Habría que aclarar que Libertad es decidir pero también darse cuenta de lo que se está decidiendo. Antes de tomar una decisión, tenemos que pensar, primero el motivo de la acción, y después pensarlo una segunda vez y replantearnos la pregunta porque puede que cambiemos de opinión. Savater comenta que no todo en esta vida funciona regido por unas costumbres, órdenes o por un determinado capricho. Es aquí donde de nuevo podemos hablar de la libertad. Cuando tomamos una decisión debemos tener en cuenta que la libertad que poseemos implica pensar las cosas dos veces antes de realizarlas,

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (31 Kb)
Leer 22 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com