Desorden Gubernamental

ENSAYO SOBRE EL DESORDEN GUBERNAMENTAL EN NUESTRO PAIS

Cada año en Honduras los índices de corrupción continúan aumentando y su imagen internacional se deteriora más por este problema que no se ha podido solucionar.

Él último informe de Transparencia Internacional demostró que no hay verdaderos avances en la lucha contra la corrupción en el país, pues los índices han seguido creciendo aceleradamente. Entre 177 países evaluados, Honduras estaba en el puesto 133 en 2012; pero el estudio revela que en 2013 se agravó la situación, pues el país cayó siete lugares más y quedó ubicado en el lugar 140.

De 100 puntos posibles en nivel de transparencia, el país apenas obtuvo una calificación de 26. Honduras está situada en el tercio más decadente del sistema de evaluación del organismo internacional. La falta de transparencia en el país es tan grave que en Centroamérica es el último lugar de la región en esta área, seguido de lejos por El Salvador que tiene una calificación de 36 y está en la posición 83, o sea 57 puestos mejor ubicado que Honduras.

Honduras en sus últimos años ha sufrido fuertes crisis en el ámbito político, crisis que han afectado a toda la ciudadanía en general, y que han traído divisiones y enfrentamientos entre los diversos grupos políticos y sociales del país.

Es por ello que se esperaba que con las nuevas elecciones de aspirantes a la presidencia y al congreso se mejorara la crisis que enfrentaba el país, pero por los resultados dados esto llevo a un disgusto y conflicto con los grupos que perdieron en las elecciones pasadas, quienes aseguran que sus contrincantes hicieron fraude para conseguir la victoria de las elecciones. Pero aun con todo eso Honduras hoy cuenta por primera vez con un congreso variado de distintos partidos y se podría decir que es una oportunidad para que el poder no solo se centre en manos de los preferidos o del grupo mayoritario, sino que todos en democracia puedan elegir las mejores decisiones en beneficio de todos los hondureños y hondureñas, ya que por eso los eligieron para que sean la voz del pueblo en el Congreso Nacional de la Republica. Lastimosamente la realidad es otra, desde el primer día de labores comenzaron los conflictos y escándalos vergonzosos entre los miembros del Congreso Nacional que representan los diferentes partidos políticos y se pudo observar la corrupción de los mismos políticos de siempre queriendo tomar las decisiones que a ellos les convenga mejor sin importar el bienestar del pueblo. Se pueden observar nuevas caras en el Congreso de personas que ni siquiera saben el sistema parlamentario, y el pueblo hondureño ve esas cosas a través de los medios de comunicación. Lo que esta pasado es vergonzoso y bochornoso, va en contra de la institucionalidad de Honduras.

Los hondureños estábamos esperanzados por un gobierno mejor y democrático, pero ha ganado la tristeza. Es lamentable que inauguremos un nuevo tiempo para Honduras con un espectáculo tan triste, mostrando que los políticos todavía se visten de forma zarrapastrosa y eso no se lo merecen los ciudadanos.

Recordemos que el pueblo de Honduras dio un mandato y ese mandato nadie lo puede usurpar; si algo dijo el pueblo hondureño en elecciones es queremos paz y tranquilidad, no queremos conflictos ni enfrentamientos, porque en eso hemos estado hundidos, lo cual no nos permite salir del subdesarrollo en el que nos encontramos, provocando atrasos, golpeando a los más necesitados.

Todo esto ocasiona fuerte daños en los diferentes sectores y áreas descuidadas por los que están en el poder, por cuidar más sus propios bienes y servicios que los de la ciudadanía que voto por ellos esperanzados a una vida mejor.

No hay duda. Algunos de los conflictos del gobierno con los gremios son producto de la falta de fondos, de ese creciente desfase entre los ingresos y los egresos. Pero la causa principal, no solo de la crisis social existente, sino también de la falta de acción gubernamental en general es producto del desorden en la administración pública.

¿Y cuáles son las causas de ese desorden? Las más visibles parecen ser la poca experiencia de los burócratas, los pleitos internos y las ambiciones políticas. Pero, siendo públicas algunas de las jugarretas de que ha

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