Dia Del Maestro

Acto del Día del Maestro.

Estamos aquí reunidos porque el 11 de Septiembre se cumple otro aniversario de la muerte de Domingo Faustino Sarmiento, quién fue un incansable defensor de la educación.

Para comenzar con este pequeño homenaje demos la bienvenida con un aplauso a la Bandera de ceremonia y sus abanderados.

Bandera Nacional

Abanderado/a:…………………………………………………………..

1ª escolta:……………………………………………………………….

2º escolta:………………………………………………………………

Invitamos a todos los presentes a entonar las estrofas de nuestro Himno Nacional Argentino.

Más allá de sus múltiples facetas y ocupaciones, indudablemente nombrar a Sarmiento es decir educación. Fue un hombre de ideas y de acción. Capaz de desarrollar sus proyectos y contagiar a otros para que lo secunden en sus empresas.

A pesar de que sus ideas lo condenaron a su exilio, siempre fue el mismo espontáneo y genial hombre de vastísimo pensamiento fecundo, dueño de un poder de iniciativa inigualable.

En ciertos aspectos no inspiraba cariño, más bien rechazo, pero a todos imponía admiración y respeto por su tenacidad y energía inagotables.

Logró crear una educación para todos. Sabiendo lo necesaria que era la formación de los docentes, trajo al país docentes extranjeros de gran formación, que formaron maestros.

Buscó engrandecer nuestra nación desde la educación del pueblo.

Hoy los docentes argentinos, hacemos nuestras sus ideales y como él buscamos, convencidos de que es la única salida, educar al soberano para engrandecer la patria.

Para conocer un poco más de la vida de Sarmiento la profesora Sandra Munoz nos leerá unas palabras alusivas

Palabras alusivas

Indudablemente, Domingo Faustino Sarmiento fue y seguirá siendo un ejemplo de vida, trabajo, sacrificio y patriotismo para todos.

Desde pequeño demostró sus inigualables condiciones.

Uno de sus tíos, el clérigo José Sarmiento, [***]le enseño a leer a la corta edad de cuatro años.

Por aquellos días, se inauguró una escuelita sanjuanina, a donde sus padres decidieron enviarlo a los cinco años de edad.

Por diferentes razones, entre ellas el traslado a Córdoba o Buenos Aires, no pudo ingresar a la escuela secundaria. A estas alturas Sarmiento contaba con nueve años y como él creía que no podía perder mas el tiempo, concurrió tres años seguidos al último año de la escuela primaria.

Fue un autodidacta, puesto que se preparó en varias disciplinas, mientras trabajaba para ayudar a su familia.

En su vida adulta, trabajo como maestro, minero, comerciante, escritor, periodista, diplomático, sociólogo, gobernador y presidente.

Por otro lado, él creía que al hacer de la docencia

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