Discurso para la marcha estudiantil del 21 de noviembre del 2014 en Tacámbaro

Discurso

Compañeros mi nombre es Nahúm y soy estudiante, un estudiante que al igual que muchos está inconforme con cómo se están las cosas en este país, este movimiento es un despertar de conciencia, no podemos dar marcha atrás, esta lucha se ha expandido por todo el país llegando al corazón de todos, tal vez somos de religiones, de razas y de clases sociales distintas pero juntos somos una sola voz, una voz que demanda justicia, igualdad y paz. Personas como Hidalgo, Morelos, Venustiano Carranza, Emiliano Zapata hicieron su parte con el  país, pero en estos tiempos nos toca a los jóvenes la lucha por la libertad en el país, la historia nos ha llevado al borde del caos, podemos elegir: podemos arrojarnos al fondo del abismo o con valor y fe saltar al otro lado; estoy feliz de unirme a ustedes hoy en lo que quedará en la historia como la mayor demostración por la libertad en la historia de nuestra nación.

Hace años cuando los arquitectos de nuestra república escribieron las magníficas palabras de la Constitución y la Declaratoria de la Independencia, firmaban una promisoria nota de la que todo ciudadano mexicano sería el heredero. Esto era una promesa de que todos los hombres tendrían goce de libertad, soberanía e igualdad.

Es obvio hoy que el gobierno de México ha fallado en su promesa en lo que respecta a sus ciudadanos. En vez de honrar su obligación sagrada, el gobierno dio a sus ciudadanos un pagaré lleno de sangre, de intolerancia, de corrupción y de mentiras; pero nos rehusamos a creer que el banco de la justicia está quebrado. Nos rehusamos a creer que no hay fondos en los grandes depósitos de oportunidad en esta nación. También vinimos a este punto para recordarle al pueblo de México de la feroz urgencia del ahora. Este no es tiempo para entrar en el lujo del enfriamiento o para tomar la droga tranquilizadora del conformismo.

Pero  gracias a este movimiento podemos ver que tenemos una sola voz, una voz que va en la causa de poder tener un lugar de igualdad en la lucha y en la sociedad, es tiempo de caminar juntos y luchar por un país que no use la fuerza de la represión sino la fuerza de la educación, la democracia y en donde todos: trabajadores, maestros, estudiantes construyamos de forma consciente nuestra propia historia, lo que digamos aquí será olvidado pero lo que hagamos prevalecerá en la historia de México porque finalmente lo peor que podemos hacer, lo peor que podemos hacer, es no hacer nada.

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