ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Día Del Celador


Enviado por   •  19 de Abril de 2014  •  1.213 Palabras (5 Páginas)  •  367 Visitas

Página 1 de 5

Porteros, celadores, auxiliares, son distintos términos que usamos para referirnos a esas personas tan importantes en la vida de una escuela, que diariamente nos brindan su afecto y colaboración. Ellos son los que caminan día a día la escuela entera, marcando surcos de trabajo y de tesón.

El origen del festejo

Por Resolución Nº 773 A de 1965, firmada por el entonces Director General de Escuelas, Osvaldo Moyano, se estableció el 5 de noviembre como fecha a celebrar el Día del Celador.

Según el documento citado, por iniciativa de la Sra. Eva Antonia Manzi, Directora de la Escuela 232 Martín Güemes de San Martín, solicitó la consideración de una fecha para la celebración del Día del Celador, dada la reciente canonización de Fray Martín de Porres, el santo mulato peruano, caracterizado siempre con una escoba en la mano,símbolo de la humildad. Fue beatificado por Gregorio XVI en 1837 y canonizado por Juan XXIII, el 6 de mayo de 1962.

El santo nació en Lima el 9 de diciembre de 1579 y falleció el 5 de noviembre de 1639. Fecha esta última en que se conmemora el Día del Celador.

Toda la comunidad limeña participó de sus funerales y a partir de allí se multiplicaron los milagros por su intersección. Hijo de un noble español y una india panameña, desde temprano manifestó su devoción eclesiástica, haciendo gala de elevadas virtudes como la humildad y la generosidad, dedicándose a los enfermos y los pobres. Se instruyó como barbero y conoció tempranamente el empleo de las hierbas medicinales, con las que curaba a los enfermos.

Fuente:

“San Martín de Porres llamado también fue el primer santo de piel morena de América y patrono protector de los porteros.

Unas palabras para ellos de Rubén Loetti (Por un alumno)

"Yo, en realidad, no sé, si es por ley o resolución que alguien decretó el día del portero de escuela.

Nunca nada fue más justo que este acto de reconocimiento, hacia aquel ser que desempeñó o desempeña actualmente, esta noble tarea. Porque el portero, es esa figura silenciosa que aparece en nuestra niñez, cuando comenzamos la escuela, y se distingue de todos, solamente por el hecho, que su guardapolvo no es blanco como el de los maestros.

El portero, es el primer testigo de las lágrimas y del beso de despedida, que las mamás dan a sus hijos el primer día de clase. También es el último confidente, del llanto de los padres cuando sus hijos se reciben y van en busca de la Universidad o del trabajo.

Cada obrero, cada profesional o cada ciudadano, cualquiera sea su condición social, cuando revise sus memorias, seguramente encontrará siempre a esa persona casi anónima, de guardapolvo gris, manchado con tiza, que fue testigo de distintas emociones vividas por ellos y sus padres, ya sea en el primer día de clase o en la fiesta de despedida de cada año.

Recordar a un portero, es sentir su rezongo, mientras levanta un papel en un patio recién barrido, o escucharlo quejarse por encontrar las paredes escrita con lápices de colores, o verlo esperar parado bajo la campana, a que se cumplan los minutos, que anuncian el final de un recreo.

Recordar a un portero, es volverlo a ver corriendo con los mapas que solicitaron las maestras; buscando tizas en la dirección, para adornar los pizarrones; defendiéndonos de la Directora por alguna travesura, o dándole una patada a la pelota, escapada del picado que jugábamos en el patio.

Recordar a un portero, es guardarlo para siempre en el corazón de niño que siempre, siempre, llevamos adentro".

__________________________________________________________________________

La amistad, el amor, la felicidad y el servicio a los demás, son realidades muy vinculadas. Nadie puede asegurarnos la felicidad, pero lo que a cada uno corresponde es procurar merecerla. La felicidad es como

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (7 Kb)
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com