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EL CONTROL SOCIAL EN LA SOCIEDAD ACTUAL


Enviado por   •  15 de Marzo de 2021  •  Ensayo  •  1.673 Palabras (7 Páginas)  •  449 Visitas

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UNIVERSIDAD DE SONORA

División de ciencias biológicas y de la salud

Departamento de ciencias químico biológicas

Documento:

Ensayo final

Licenciatura:

Licenciatura en químico biólogo clínico

Presenta:

Perla jazmín Hernández Ortiz

(220215422)

Grupo:

36

Hermosillo, Sonora                                                                           25 de noviembre 2020

EL CONTROL SOCIAL EN LA SOCIEDAD ACTUAL

Objetivo

En este ensayo se tiene como objetivo el abordar y analizar detalladamente el como  la conducta humana se encuentra sometida ante el control social mediante mecanismos que operan desde la definición hasta la supresión de comportamientos calificados como correctos o incorrectos.

Introducción

Primeramente, podemos definir  al control social como un conjunto de mecanismos y estrategias mediante los cuales la organización social logra mantener a sus miembros en la línea de lo que socialmente se ha definido como lo real, lo normal y lo posible.    Detengámonos un momento en esta breve definición de control social. Podemos observar, en primer lugar, que este concepto hace referencia a dos ideas básicas. Por un lado, se afirma que la organización social se sirve de ciertos mecanismos y estrategias para obtener la conformidad de sus miembros a un determinado orden, es decir a un conjunto de reglas, leyes y estructuras que definen y sitúan al sujeto en el mundo. Y por el otro, se dice que este orden es el resultado de una producción humana. 

Los inicios del control social

Es  importante saber que según Bergalli, Roberto (2005),  el uso original de la expresión control social fue hecho enfocándose principalmente en  los problemas que afectaban la necesidad de organizar desde el enfoque de la integración con y en la sociedad, a las masas de inmigrantes provenientes de ámbitos culturales, étnicos, religiosos y lingüísticos diversos, esto a raíz de la Segunda Guerra Mundial, que obligó a millones de personas a desplazarse y asentarse en otros países que apenas despertaban a la modernidad, el estado, las instituciones desarrollaron y adoptaron este término para estructurar a la sociedad en los juicios valorativos más convenientes para sus fines, con la justificación de establecer estructura sociales que le permitieran regular la coexistencia de diversas culturas dentro un mismo espacio geográfico y un orden político, económico, jurídico y social homogéneo.

El inicio de la sociedad civil fue un detonante de esta sumisión social, se originó con el arrebato de tierras. Antes de este hecho, la tierra no era de nadie y los frutos pertenecían a todos, los hombres construyeron viviendas, surgieron nuevas comodidades. Cada cual comenzó a mirar a los demás y a desear ser mirado. Nació la vanidad y el deseo de poseer rivalmente. Surgieron las ofensas y la necesidad de jueces y sanciones para defender las posesiones. R. Darós (2006). La acumulación de posesiones de uso exclusivo originó la desigualdad entre los hombres: “Desde el instante en que un hombre se dio cuenta de que era útil a uno solo tener provisiones para dos, la igualdad desapareció, la propiedad fue un hecho.” Ibid, pág. 96.

A esta situación se suma también un contrato social que legitima la falta de valor en la parte engañada de la sociedad. Los ricos no pueden competir con el enemigo, por eso concibieron un plan para convertir a sus oponentes en defensores: unir a los débiles, tolerar a los pobres ambiciosos y asegurar sus vidas, mientras los ricos conservan sus propiedades. R. Darós (2006). Con este fin, se han establecido leyes de justicia y paz.  La gente pobre pero libre vende libertad por seguridad: “Unámonos, les dijo el rico. En vez de emplear las fuerzas contra nosotros mismos, unámonoslas en un poder supremo que nos gobierne mediante sabias leyes, que proteja y defienda a todos los asociados, rechace a los enemigos comunes y nos mantenga en eterna concordia.” Ibid, pág. 101. La sociedad y su existencia es el punto de referencia del nuevo pensamiento y para ello los hombres, a pesar de tener distintos intereses, renuncian y sacrifican parte de su libertad para crear un orden social que permita la convivencia en armonía.

El estado sumergido en el control social

Tomando como punto de partida las aportaciones teóricas proporcionadas por M.  Estrada y  J. Wilson (2011), el estado se puede entender ampliamente un conglomerado  social, político y legal que está asentado en un territorio específico y está sujeto al poder que ejercen sus propios órganos, y su soberanía es reconocida por otros Estados. En este sentido, es un componente político específico de dominación  en una sociedad definida territorialmente. La dominación se entiende como la capacidad actual y potencial de imponer la voluntad a los demás.

Sintetizando un poco lo anterior, el concepto de Estado resulta equivalente al plano de lo específicamente político, y éste, a su vez, es un aspecto del fenómeno más amplio de la dominación social. Este tipo de dominación se puede lograr controlando los recursos económicos e informáticos de la sociedad, a través de diferentes medios de control social y coerción física. Por tanto, se puede construir un sistema de control del pensamiento.

Es por eso, que una sociedad se busca el orden y se manifiesta en todo grupo social una cierta forma de control que, por lo demás, es también indispensable para mantener el orden social dentro del grupo en que se manifiesta. Así pues la conducta de los individuos que pertenecen a una sociedad manifiesta su conducta, la exteriorizan a los demás, y sirven para expresar actitudes con los demás así como establecer relaciones como bien lo dice Edgar Bodenheimer: “La conducta exterior de los miembros de la sociedad en sus relaciones mutuas es regulada por la cortesía. Se espera de todo miembro de la sociedad la observancia de ciertas costumbres sociales’’.

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