EL MEDIOEVO COLOMBIANO

EL MEDIOEVO COLOMBIANO

Con la llegada de grupos de conquistadores españoles, acorazados y envenenados por el espejismo del oro nacional, también desembarco toda una influencia cultural que influyo drásticamente en la consolidación de un modelo rural del Medioevo en el que el poder lo proveía el dominio de las grandes extensiones de tierra y en las cuales se desarrollaba la cría de animales bovinos también traídos a este nuevo mundo por los hombres ibéricos.

La Colombia de hoy, en su aparato productivo más elemental, aun conserva bastos trazos de lo que fue esa concepción nefasta del poder basado en la tierra y de la que se desprende todo un conflicto interno al que se le he aquecido con elementos perversos como lo son el narcotráfico y la lucha política aunada a la corrupción. Todo esto, imposibilitando que nuestra nación vaya hacia adelante con la construcción y consolidación de un modelo rural que aproveche las riquezas, ventajas y condiciones que solo el espíritu santo puede proveer.

No vamos nunca a ser líderes en tecnología ni en aviación. Nuestro país esta llamado en cambio, con las suficientes pruebas del caso, a ser una gran potencia y despensa en la producción de alimentos, que permita proveer de comida y materias primas agrícolas no solo al territorio nacional sino también suplir en parte el voraz apetito mundial, que esta llevando q los precios de los alimentos hoy presenten un crecimiento exponencial

Con la llegada de grupos de conquistadores españoles, acorazados y envenenados por el espejismo del oro nacional, también desembarco toda una influencia cultural que influyo drásticamente en la consolidación de un modelo rural del Medioevo en el que el poder lo proveía el dominio de las grandes extensiones de tierra y en las cuales se desarrollaba la cría de animales bovinos también traídos a este nuevo mundo por los hombres ibéricos.

La Colombia de hoy, en su aparato productivo más elemental, aun conserva bastos trazos de lo que fue esa concepción nefasta del poder basado en la tierra y de la que se desprende todo un conflicto interno al que se le he aquecido con elementos perversos como lo son el narcotráfico y la lucha política aunada a la corrupción. Todo esto, imposibilitando que nuestra nación vaya hacia adelante con la construcción y consolidación de un modelo rural que aproveche las riquezas, ventajas y condiciones que solo el espíritu santo puede proveer.

No vamos nunca a ser líderes en tecnología ni en aviación. Nuestro país esta llamado en cambio, con las suficientes pruebas del caso, a ser una gran potencia y despensa en la producción de alimentos, que permita proveer de comida y materias primas agrícolas no solo al territorio nacional sino también suplir en parte el voraz apetito mundial, que esta llevando q los precios de los alimentos hoy presenten un crecimiento exponencial

Con la llegada de grupos de conquistadores españoles, acorazados y envenenados por el espejismo del oro nacional, también desembarco toda una influencia cultural que influyo drásticamente en la consolidación de un modelo rural del Medioevo en el que el poder lo proveía el dominio de las grandes extensiones de tierra y en las cuales se desarrollaba la cría de animales bovinos también traídos a este nuevo mundo por los hombres ibéricos.

La Colombia de hoy, en su aparato productivo más elemental, aun conserva bastos trazos de lo que fue esa concepción nefasta del poder basado en la tierra y de la que se desprende todo un conflicto interno al que se le he aquecido con elementos perversos como lo son el narcotráfico y la lucha política aunada a la corrupción. Todo esto, imposibilitando que nuestra nación vaya hacia adelante con la construcción y consolidación de un modelo rural que aproveche las riquezas, ventajas y condiciones que solo el espíritu santo puede proveer.

No vamos nunca a ser líderes en tecnología ni en aviación. Nuestro país esta llamado en cambio, con las suficientes pruebas del caso, a ser una gran potencia y despensa en la producción de alimentos, que permita proveer de comida y materias primas agrícolas no solo al territorio nacional sino también suplir en parte el voraz apetito mundial, que esta llevando q los precios de los alimentos hoy presenten un crecimiento exponencial

Con la llegada de grupos de conquistadores españoles, acorazados y envenenados por el espejismo del oro nacional, también desembarco toda una influencia cultural que influyo drásticamente en la consolidación de un modelo rural del Medioevo en el que el poder lo proveía el dominio de las grandes extensiones de tierra y en las cuales se desarrollaba la cría de animales bovinos también traídos a este nuevo mundo por los hombres ibéricos.

La Colombia de hoy, en su aparato productivo más elemental, aun conserva bastos trazos de lo que fue esa concepción nefasta del poder basado en la tierra y de la que se desprende todo un conflicto interno al que se le he aquecido con elementos perversos como lo son el narcotráfico y la lucha política aunada a la corrupción. Todo esto, imposibilitando que nuestra nación vaya hacia adelante con la construcción y consolidación de un modelo rural que aproveche las riquezas, ventajas y condiciones que solo el espíritu santo puede proveer.

No vamos nunca a ser líderes en tecnología ni en aviación. Nuestro país esta llamado en cambio, con las suficientes pruebas del caso, a ser una gran potencia y despensa en la producción de alimentos, que permita proveer de comida y materias primas agrícolas no solo al territorio nacional sino también suplir en parte el voraz apetito mundial, que esta llevando q los precios de los alimentos hoy presenten un crecimiento exponencial

Con la llegada de grupos de conquistadores españoles, acorazados y envenenados por el espejismo del oro nacional, también desembarco toda una influencia cultural que influyo drásticamente en la consolidación de un modelo rural del Medioevo en el que el poder lo proveía el dominio de las grandes extensiones de tierra y en las cuales se desarrollaba la cría de animales bovinos también traídos a este nuevo mundo por los hombres ibéricos.

La Colombia de hoy, en su aparato productivo más elemental, aun conserva bastos trazos de lo que fue esa concepción nefasta del poder basado en la tierra y de la que se desprende todo un conflicto interno al que se le he aquecido con elementos perversos como lo son el narcotráfico y la lucha política aunada a la corrupción. Todo esto, imposibilitando que nuestra nación vaya hacia adelante con la construcción y consolidación de un modelo rural que aproveche las riquezas, ventajas y condiciones que solo el espíritu santo puede proveer.

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