EL PROCESO DE SOCIALIZACIÓN

EL PROCESO DE SOCIALIZACIÓN

Muchas veces se dice que los medios masivos de comunicación influyen en la conducta, opinión y transmisión cultural de las personas, hecho que, muchas veces, es cierto. Sin embargo, no se le presta mucha atención a otras estructuras de socialización que también influyen a lo largo de la vida del sujeto en su conducta y transmisión de cultura; como lo es la familia, el vecindario, la escuela, entre otros. Además, las conductas no solo tiene un sustento en estas estructuras, sino también en el ambiente y la herencia genética, de igual manera, en el desarrollo físico y cognoscitivo del sujeto. Entonces, no solo influyen los medios masivos de comunicación, sino que la persona aprende su cultura mientras de desarrolla física, sicológica, cognoscitiva y socialmente.

Estos desarrollos se relacionan entre sí para que formen un proceso de socialización. Conforme una persona va desarrollándose físicamente también lo debería hacer socialmente. Si no se da esto, es muy probable que la persona al momento de asumir un status no pueda cumplir con los roles requeridos, pues no está desarrollado paralelamente.  De esta forma, no habría un buen proceso de socialización, ya que no se está asumiendo el rol que se maneja en la sociedad.

Todos estos desarrollos están ligados al aprendizaje y a las estructuras de socialización. El aprender no solo se relaciona con instituciones académicas o libros, sino también con la experiencia y refuerzos de conducta. Un recién nacido aprende a distinguir entre el olor de su mamá o la persona que lo amamanta y el resto, de manera que cuando está con ella, no llora. Allí se evidencia que el aprendizaje se da por una experiencia del recién nacido con una estructura de socialización que es la familia, en donde está la madre. Y así conforme el niño se desarrolle adquirirá nuevos conocimientos simultáneamente.

Siempre nos relacionamos y con eso se adquiere experiencias de las cuales se generan conclusiones. Estas conclusiones se tienden a generalizar. Se debe ser consciente de que las conclusiones parten de experiencias particulares en un contexto dado. Generalizar es necesario, pero puede ser usado inapropiadamente. El hecho que se haya tenido una experiencia desagradable con una persona fiel a cierta religión, no indica, necesariamente,  que con otra persona de esa religión también se produzca una experiencia similar. Si se generaliza este tipo de conclusiones, se estaría generando prejuicios, estereotipos y, posiblemente, rechazo a cierto grupo social. Esto limitaría, de cierta manera, nuestras relaciones sociales.

Además de la familia, la escuela es una estructura de socialización que, supuestamente, enseña y complementa la transmisión cultural recibida de la familia. Sin embargo, este factor socializador, muchas veces, no es neutral. Las grandes potencias influyen en la educación de países latinoamericanos, se estandariza la educación para lograr una homogeneidad de pensamiento que favorece  a estas potencias. De esta manera, no se produce una socialización en la cual se aprende los valores, normas, status o saberes ancestrales de su cultura; por el contario, hay una transmisión cultural de las grandes potencias formando personas alienadas.

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