EN CONTEXTO DE PANDEMIA¿CÓMO FUE EL PROCESO DE ADAPTACION DEL FUTBOL CALLEJERO A LA “NUEVA REALIDAD” EN EL CAMPITO?

<EN CONTEXTO DE PANDEMIA, ¿CÓMO FUE EL PROCESO DE ADAPTACION DEL FUTBOL CALLEJERO A LA “NUEVA REALIDAD” EN EL CAMPITO?

Introducción:

El presente anexo se desarrolla con el objetivo de conocer algunos aspectos relacionadas con, como fue el proceso de adaptación del Futbol Callejero en contexto de Pandemia, analizando los efectos de la pandemia del Covid-19 en la metodología, el rol de las instituciones y sus referentes, las acciones comunitarias y el desafío de las organizaciones e instituciones sociales de “reinventarse” en tiempos de Covid-19, y por último analizar las propuestas a futuro para la práctica del FC en “El Campito”.

ROLES: FuDe, El Campito, Referentes.

En medio de la incertidumbre provocada por la situación sanitaria producida por la pandemia del COVID-19-Coronavirus, las actividades en los barrios y sus respectivas organizaciones sociales se mantuvieron en periodo de readaptación, en sus roles y actividades.

Tanto FuDe como la “Escuela Regional de Mediadores” (ERM), iniciativa que se realiza en el marco del Movimiento de Fútbol Callejero y bajo la coordinación de FuDe, realizaron conversatorios virtuales acerca de la situación de pandemia con el Covid-19 en los distintos distritos participantes y Organizaciones, donde continúan con el proceso de convocatoria y afianzamiento de repensar las prácticas de inclusión social que llevan a cabo; a partir de reflexiones y estrategias colectivas en el interior de las organizaciones que utilizan el Fútbol Callejero como parte de herramientas de “transformación y construcción social”.

En cuanto al “Campito”, a partir de la entrevista realizada al referente y coordinador del equipo de FC, manifiesta que durante el inicio de la pandemia “se cortó toda la actividad, dejamos de entrenar y hasta el día de hoy no volvió la actividad. El grupo se disolvió en tanto lo que es el ESPACIO DE FC”… Se llevaron a cabo tareas de tipo asistencial como, recolección de donaciones, realización de actividades virtuales y preparación de viandas a las familias del Campito. Con respecto a la participación del equipo de los profesores a cargo de la actividad, no se volvió a convocar al grupo, ya que no se produjo un proceso de retroalimentación con los jóvenes para seguir promoviendo la práctica de Fútbol Callejero en el Campito.  

Desafíos en la pandemia: Organizaciones e instituciones sociales y comunitarias

Las organizaciones sociales y comunitarias tienen un gran desafío, que es el de reinventarse en sus prácticas cotidianas y generar diversas estrategias para sostener los espacios, ante el contexto actual.

En contexto de pandemia y confinamiento desde la escuela regional de mediadores (ERM) y FuDe continuaron con el proceso de convocatoria y afianzamiento de la necesidad de repensar prácticas de inclusión social. Como referentes en las distintas comunidades de la región, realizaron conversatorios acerca de la situación de pandemia con el Covid-19 en los distintos distritos participantes y organizaciones (crearte, defensores de chaco, FUDE, entre otras). Llevando a cabo el desafío de generar espacios deportivos en el hogar, de manera digital virtual, donde se reconfiguraron para sostener el VINCULO, para seguir con el ejercicio y la práctica deportiva.

• Fortaleciendo las redes construidas.
• Sosteniendo los valores de la mediación y el fútbol callejero para mejorar las condiciones del aislamiento social.

Cabe destacar que FuDe puso en práctica la iniciativa y avances de la campaña de “Mejores reglas para las organizaciones sociales”. Es promovida por la Sociedad civil en red, proyecto cofinanciado por la Unión Europea y administrado por la Confederación de las OSC. Es la campaña para que los clubes, comedores comunitarios, centros culturales, organizaciones comunitarias y demás entidades sociales puedan contar con un marco legal adecuado.

Por último, a partir de la visualización de las actividades tanto virtuales como presenciales, se realizaron jornadas recreativas del torneo Apertura Rufino Juárez en el marco del programa Liga FOS, Fútbol para la oportunidad Social.  

Con respecto al Campito, el día a día fue un desafío constante, dado que el hacer cotidiano que marcó el camino fue disponer del tiempo, dedicación, responsabilidad y compromiso hacia tanto a las familias como a los niños que asisten al campito. Sobre todo, que las organizaciones sociales se enfrentan al desafío de reinventarse continuamente, como así también los dispositivos que implementan en el abordaje de problemáticas emergentes. Fortalecer lo comunitario es generar canales de diálogo y comunicación, debido a que, es importante seguir generando reflexiones y estrategias colectivas en el seno de las organizaciones que utilizan el fútbol callejero como parte de herramientas de transformación y construcción social.

Durante las aperturas establecidas por las autoridades del estado, frente la mejora de la situación sanitaria, el Campito llevó a cabo la reactivación de las actividades y el retorno a continuar brindando los diferentes servicios como desayuno y almuerzo para los niños, apoyo escolar, talleres recreativos y equipo de orientación (psicóloga y trabajadora social).

En relación con el Campito y FuDe, es importante seguir construyendo colectivamente el FC en contexto de pandemia. Dado que, no se trató de implementar la práctica del FC después del aislamiento estricto. Marcos describió la situación durante la entrevista, donde manifestó que

“el equipo de profes quedamos todos en contacto y pensamos cómo redirigir nuestras horas voluntarias a esto. Pero tanto el FC no, si los pibes están dando vuelta, las hermanas están en contacto con ellos y bueno… no se los volvió a convocar…”

“a todos nos pegó la pandemia en lo personal de determinada forma, yo en lo personal empecé a tapar de laburo, más que nada por qué se complejizo laburo con esta pandemia. Tampoco del otro lado hubo mucha iniciativa como para juntarse…”

“Pero volviendo al espacio del Campito, si fuera un espacio remunerado, era muy posible que se sostuviera de otra manera. Al ser un espacio de voluntarios nos condiciona. A todos nos pasó lo mismos, y a las hermanas igual más que nada por transformar en un espacio de asistencia básica…”

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