EN QUE MEDIDA PARTICIPAMOS Y COMO SOMOS RESPONABLES, VIOLENCIA DE GENERO

EN QUE MEDIDA PARTICIPAMOS Y COMO SOMOS RESPONABLES, VIOLENCIA DE GENERO

La violencia de género es un tipo de violencia física, psicológica, simbólica e institucional, ejercida contra cualquier persona o grupo de personas sobre la base de su orientación sexual e identidad de género, que impacta de manera negativa en su identidad y bienestar social, físico, psicológico y económico. De acuerdo con el libro de Raquel Castillejo Manzanares, la autora menciona que este fenómeno es amplio y causa una alarma social, y que, a pesar de los innegables esfuerzos sociales y económicos, no parece que por ahora disminuya en intensidad. Algunos datos aportados por la Amnistía Internacional resultan suficientemente expresivos. Una de cada tres mujeres ha sufrido abusos; la violencia en la intimidad de la familia es la principal causa de muerte entre las mujeres; el 70% de las mujeres asesinadas lo fueron por sus parejas o exparejas. ¿Qué quieres decir esto?, pues la autora comenta que la violencia de género es el abuso que sufren las mujeres por causa del varón por el hecho de ser mujeres, esto es erróneo, ya que ese concepto es acerca del machismo y yendo a un punto más extremo el feminicidio. La violencia de género es un concepto más amplio en la cual también se ve abuso de la mujer hacia el varón (pero de eso no se habla mucho). Un blog del Instituto Mexicano de la Juventud publico datos de la INEGI en los cuales se registró 18,293 homicidios provocados de la mujer hacia el varón, La INEGI registro 25% de denuncias de hombres maltratados por su pareja, del total 5,632 personas denunciadas por violencia doméstica, el 76.2% fue de hombres y el 23.8% de mujeres. Entre los principales motivos por los cuales los hombres no denuncian ser víctimas de violencia domestica se pueden destacar los siguientes: Sentirse avergonzado, dificultad para ser creído por las autoridades y Negación del problema. ¿Cómo comienza todo este mal?, la respuesta a este problema son varios factores, algunos de ellos son: “El control y el poder”, aquí se enfatiza sobre el poder y la manipulación que tanto el hombre y la mujer pueden ejercer entre ellos o en otras personas, es decir, demostrar quién manda, ya sea en el ámbito laboral, domestico o sexual; El siguiente y último punto son los famosos “Celos”, uno de los problemas más universales de las relaciones amorosas son sin duda los celos. La literatura nos ofrece un abanico amplio de formas y expresiones de todo tipo al respecto. Los celos están tan intrínsecos en la naturaleza humana que hemos llegado a asumirlos como normales y como una realidad fática. Incluso en el conocimiento vulgar, los celos son contemplados como una expresión de la relación amorosa. Curiosamente aquello que es antagónico del amor se torna en expresión de este. De aquí la justificación de conductas violentas propiciadas por los celos. Puede establecerse diferencias entre celos “normales” y celos “patológicos”. Los primeros son comunes, no provocan desajustes graves y tienen una función a la vez defensiva y adaptativa; los segundos conllevan perturbaciones graves. Los celos son una experiencia universal y aunque sus expresiones varían culturalmente, no hay sociedad libre de celos. Los celos surgen en cualquier momento de la relación amorosa y evidencian un supuesto derecho de posesión sobre la persona amada y el rechazo ante la posibilidad de compartirla o perderla. El artículo 1 de la LO 1/2004 de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Genero define por primera vez en nuestro ordenamiento jurídico el concepto de violencia de género, novedad que merece ser destacada. “A los efectos del presente Estatuto, se entenderá por ´crimen de lesa humanidad´ cualquiera de los actos siguientes cuando se cometa como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimientos de dicho ataque: h) Persecución  de un grupo de colectividad con identidad propia fundada en motivos políticos, racionales, nacionales, étnicos, culturales, religiosos, de genero definido en el párrafo 3, u otros motivos universalmente reconocidos como inaceptables con arreglo al derecho internacional, en conexión con cualquier acto mencionado en el presente párrafo o con cualquier crimen de la competencia de la Corte”. Y el párrafo 3 establecía: “A los efectos del presente Estatuto se entenderá que el término “genero” se refiere a los dos sexos, masculino y femenino, en el contexto de la sociedad. El término “genero” no tendrá más acepción que la que antecede”. Así que ambos géneros no tienen excusa. La violencia de género es algo que se ve todos los días y quizá no siempre con la misma frecuencia, por ende todo maltrato de esta índole debe ser denunciado con las autoridades correspondientes independientemente de tu género, tu voz debe ser escuchada y mereces respeto, vivimos en un mundo que cada día se va pudriendo más y nosotros lo estamos destruyendo de muchas formas así como nos destruimos a nosotros mismos por medio de estos actos, sin embargo también está en nosotros hacer la diferencia, si nosotros provocamos esto, así mismo nosotros podemos resolverlo, debemos ser empáticos y solidarios con todas las personas que nos rodean, esto no quiere decir que tenemos que soportar abusos, solamente tenemos que analizarnos y pensar por un momento si estamos haciendo las cosas mal, la violencia de género es un problema más enfocado a lo ético, por ende si nosotros estamos mal, entonces todo está mal.

...