El Llano En Llamas

El cuento “No oyes ladrar los perros” de “El llano en llamas” es para mí una obra que relata en sus líneas la historia de un padre que lleva cargando en sus hombros el peso de su hijo para ayudarlo en no dejarlo morir, ya que mientras llevaba al hijo arriba, “los pies se le encajaban en los ijares como espuelas1 , mientras él seguía caminando a tropezones”2 con tal de llevarlo con un médico debido a que este híba mal herido en consecuencia de todo el mal que había hecho a muchas personas.

Este es un relato que cuenta como el padre soporta ese peso que siente que lo derrumba físicamente debido al cansancio que este le ocasiona, y como, el cuerpo del hijo mal herido va venciéndose debido a las heridas; pero no solo el peso del cuerpo es el que carga sino también el peso de haber tenido un hijo que lo defraudó como tal debido a que como él lo dijo “andaba trajinando por los caminos, viviendo del robo y matando gente”3 sin importarle lo que sus padres le habían enseñado. El padre, según dice, no lo ayuda por ser su hijo, sino por la memoria de la madre que respeta ya que esta en vida lo amaba bastante4, sin embargo, para él se convirtió en vergüenza y en una persona que jamás lo ayudó ni siquiera para encontrar el pueblo que buscaban.

Este es un reflejo de cómo en algunos seres humanos el respetar una memoria es más significativo que los lazos que los unen, ya que ésta fue la que no hizo desfallecer al padre en su propósito con el hijo y como los hechos de los seres humanos afectan los lazos que tengan entre ellos.

...