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El Mercado: ¿Un ente libre? Evolución Histórico Cultural de las Organizaciones


Enviado por   •  10 de Junio de 2016  •  Ensayo  •  2.344 Palabras (10 Páginas)  •  324 Visitas

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El Mercado:                    ¿Un ente libre?

Evolución Histórico Cultural de las Organizaciones

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Índice

Introducción        

El mercado ¿Un ente Libre – Mecánico - Natural?        

Limitaciones y posibilidades de una Teoría Administrativa        

Limitaciones        

Posibilidades        

Conclusión        

Bibliografía        


        Introducción

            A continuación mostraremos a través de éste trabajo, las ideas distorsionadas que tiene la Teoría Económica sobre el Mercado y como esto afecta directamente a nuestro país. Nuestro objetivo es argumentar y dar a entender que los economistas han definido mal el concepto de Mercado desde hace años, y su más grave consecuencia: hoy este concepto sigue vigente. Presentamos ideas principales a tratar:

  • El Mercado no es mecánico ni natural.
  • Según Adam Smith, el modelo de oferta y demanda funciona con fuerza gravitacional.
  • La Teoría Económica no es una ciencia, sino una doctrina de fábula.
  • El pseudo premio nobel, Stigler, en su libro “El Economista como predicador”  habla de la fuerza del interés propio como factor de eficiencia de mercado.
  • Los economistas están contra el Bien Común en la economía, lo que los lleva a crear la idea de Economía Positiva igualando a esta doctrina a la Física y a la Química en el sentido de que se basa en hechos (cuando en verdad la economía se basa en supuestos).
  • No existe la libertad económica
  • El modelo de la oferta y demanda es un daño a la ética.
  • La teoría económica tiene como axioma central el interés propio.
  • El Mercado no es libre. El único ser libre es el ser humano.
  • Existen varios ejemplos en la realidad que muestran que el estado interviene en el mercado.

           El mercado ¿Un ente Libre – Mecánico - Natural?

Los economistas argumentan que el mercado es libre, mecánico y natural. Estas concepciones son contradictorias con la realidad y con los propios argumentos de los mismos economistas. A continuación demostramos porqué estas tres características del mercado son falsas: El mercado no es mecánico porque requiere de la acción humana para funcionar. Esto también da a entender que el mercado no es ni libre ni natural, porque el único ente realmente libre en el universo es el ser humano, pues el homo sapiens es el único ser vivo capaz de crear e imaginar realidades que nos permiten ser libres al menos en nuestras mentes.

Adam Smith, basado en el puritanismo, argumenta que el hombre debe solo centrarse en su bien propio. Siendo esto falso, porque la economía es supuestamente una ciencia social.

El desarrollo intelectual del ser humano, junto con su realización libre, lo que calza con su accionar a través de la ley sobre el mercado, no puede ser perjudicial para la sociedad ni causa de todas las ineficiencias comerciales, tal como lo dice la Teoría Económica, pues el ser humano no es un simple portador de egoísmo, porque el desarrollo del ser humano no puede intervenir en contra de él mismo ni de su entorno, el ser humano no puede atentar contra  él ni  su supervivencia, sino que al ser un ser libre, capaz de modificar su realidad a través de sus capacidades, es capaz de desarrollarse y de mejorar su contexto , interviniendo en el mercado para el bien común. Además la teoría Económica me indica que “no debo” intervenir, pero al decir eso se pierde el sentido de libertad del ser humano, lo cual es inconsistente por la misma condición del hombre. Por lo tanto, al no existir libertad para actuar, no se necesitaría el accionar del individuo para los fenómenos económicos y es sabido que el Mercado no puede existir de esa forma, lo cual resulta contradictorio.

El modelo de oferta y demanda, según la Teoría Económica, son distorsionadas por la ética y la inteligencia social, por tanto aquí se aplica el egoísmo expuesto por Smith donde explica que la mano invisible actúa por sobre todos los individuos. El Dios calvinista puritano predestina la vida humana entre las personas que son exitosas y ricas y las que son pobres y perdedoras. Según los calvinistas, los hombres que piensan saber lo que es bueno y lo que es malo, pecan de soberbia, pues ese conocimiento es solo de dios. Por tanto, la mano invisible coordina todo, hasta las funciones de la oferta y la demanda.

Para Smith “natural” es como hablar del comportamiento de las piedras, y no precisamente por su configuración química. La comparación del mercado con las piedras es porque él habla que el mercado se mueve por fuerzas gravitacionales, y las piedras solo se mueven con esta fuerza. Los  mercados si fuesen tan elementales, incluso habrían mercado entre las piedras.

Reanudando el tema del modelo de la oferta y la demanda, Stigler en su postulado se puede observar que el mercado libre, resalta el “interés propio” (egoísmo individualista) y como se cree que la fuerza que guía el mercado es tan natural como la fuerza gravitacional, podemos decir que la oferta y la demanda ha existido desde antes que el hombre existiera, pero ¿Cómo puede funcionar el mercado si no hay interacción entre dos seres humanos?, no puede funcionar por simple fuerza del universo, se necesita de dos o más hombres con un interés en intercambiar bienes y servicios para obtener un beneficio mutuo. Si el ser humano según la teoría económica debe ser individualista, nunca habría ésta interacción entre productor y consumidor, la cual nace el mercado.  

Los expertos aseveran que la Teoría Económica se basa en fundamentos científicos, no obstante, las ciencias se verifican al repetir el mismo experimento y obtener el mismo resultado varias veces, esto no pasa con la economía, pues se basa en supuestos y pruebas que varían siempre de persona a persona y de sociedad a sociedad. Los economistas además, usan algoritmos y ecuaciones matemáticas forzadas para explicar el comportamiento del mercado, sin embargo, estas acepciones matemáticas no se condicen con la realidad dejando a la economía como una simple fantasía y doctrina de fábula.

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