"El Principe" de Nicolas Maquiavelo

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EL PRÍNCIPE

ELABORADO POR:

MANUELA GÓMEZ ARIAS

PRESENTADO AL DOCENTE:

CAMILO ANDRÉS GÓMEZ PÉREZ

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA REMINGTON

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS

MEDELLÍN - ANTIOQUIA

2016

CAPITULO I

Cuántos géneros hay de principados y por qué medios se adquieren  

Se nos hace claro énfasis en que todos los estados o soberanías que han existido a lo largo de la historia se clasifican de dos maneras, en REPÚBLICAS o PRINCIPADOS, hay dos maneras para llegar al principado, una es de manera hereditaria y la última es una forma de llegar a este, la cual consiste en vivir bajo el dominio de un rey o en eterna libertad por medio de armas, riqueza o talento.

CAPITULO II

De los principados hereditarios

Para Maquiavelo es mucho más fácil mantener un estado hereditario que un estado nuevo, ya que el primero actúa acorde a las necesidades actuales del pueblo, sigue el mismo orden y legado que dejan sus antecesores, no pudiendo despojarlo así ninguna otra fuerza superior, ya que cuando hay un buen gobierno de por medio este se mantiene en el tiempo y se disminuye el deseo de mudarlo.

CAPITULO III

De los principados mixtos

El gran problema que se nos plantea son los principados nuevos, también conocidos como principados mixtos. Los vasallos cuando cambian de señor por medio de las armas lo hacen con la convicción de que su situación mejorará, si esto no ocurre se verán en la obligación a mudar nuevamente de señor. Cuando un príncipe nuevo ostenta el poder este tendrá de algún modo que someter a sus habitantes por medio de la coerción, ya sea a través de la presencia habitual de su ejército en la zona u otros medios, esta nueva adquisición le acarrea al príncipe nuevas enemistades a las cuales les afecta que este se encuentre en el poder, pero aun así no puede usar la violencia contra su pueblo, ya que necesita de este para mantenerse en el mando. Un país rebelde después de haber sido reconquistado es mucho más difícil su apoderamiento, debido a que el príncipe emplea todos los mecanismos para defender su poderío.

El rey de Francia al haber adquirido un nuevo estado debió tener  en cuenta unas características fundamentales para no perderlo. Al obtener este, y unirlo con los estados antiguos debió considerar el grado de afinidad entre estos, como lo son las costumbres, lenguas, religiones, es decir,  todo lo que caracteriza a un pueblo es fundamental para la conservación de cualquier estado, nunca se deben cambiar sus usos, costumbres, leyes y no aumentar sus contribuciones, de esta manera el pueblo vivirá en armonía y aceptarán su nuevo gobernante, teniendo este como reto la habilidad y la prudencia para su conservación. El príncipe deberá fijar su residencia en el nuevo estado, de este modo podrá conocer las necesidades del pueblo más de cerca y resolverlas, adquiriendo así el cariño de sus súbditos, también podrá estar vigilante de los extranjeros que deseen apoderarse de este nuevo estado. Otro modo de conservar este, es enviar colonias en lugares estratégicos, ya que es mucho menos costosa que mantener a un gran ejército, estas permanecen fieles y la creación de ellas solo afectan a los antiguos propietarios de los campos donde se construyen las colonias, pero como son pocos, pobres y mal organizados no suponen una amenaza para el príncipe, un ejército podría tener más perdidas que ganancias para un nuevo estado, no teniendo este una buena rentabilidad y ganando el príncipe más enemigos , quien debe defender a los príncipes vecinos más débiles y tratar de opacar a los más fuertes  que pongan en peligro el nuevo estado, e intentar que ninguna tierra extranjera tan poderosa como el entre en el territorio.

CAPITULO IV

Por qué el reino de Darío, conquistado por Alejandro, no se levantó contra los sucesores de éste, después de su muerte

Los principados han sido gobernados de dos maneras: por un príncipe absoluto el cual se elige entre sus siervos, los ministros que le ayudarán a gobernar en su reinado, o por un príncipe y los nobles, debido a la antigüedad de su dinastía teniendo estos súbditos y señoríos que reconocen su poderío, consagrándoles devoción personal. La primera manera de gobernar es mucho más beneficiosa para un estado, ya que se reconoce un solo poder, aunque este tenga como delegados los ministros, porque actúan en nombre del príncipe no teniendo así estos efectos particulares. Se nos hace la diferencia entre Turquía y Francia, en este primer estado se dificultaría la conquista, ya que el pueblo es allegado al príncipe, por lo tanto este es difícil de corromper, consiguiendo así poca ayuda, Francia por el contrario es más fácil de conquistar, ya que solo necesitarán la ayuda de algunos nobles.

CAPITULO V

Cómo han de gobernarse las ciudades o principados que antes de ser conquistados, se regían por sus propias leyes

Hay tres maneras de mantener los estados adquiridos que se rigen por leyes propias, las cuales son: destruirlos, fijar su residencia en ellos y  por último dejarles sus leyes, exigirles un tributo y constituir un gobierno. A lo largo de la historia se puede observar que estas formas no han servido en diferentes estados, sin embargo Maquiavelo nos plantea que lo mejor es destruirlas o fijar su residencia, ya que sus habitantes están acostumbrados a la libertad y tarde que temprano querrán recobrarla, debido a que es su esencia y la llevan impregnada en su alma.

CAPITULO VI

De los nuevos estados que un príncipe adquiere por su valor y por sus propias armas.

 Maquiavelo nos ilustra como ejemplo a grandes personajes de las historia, los cuales consiguieron ser príncipes por su valor y por su talento, aprovechando los momentos por los cuales pasaba un conglomerado de personas o un pueblo, estos eran hombres completamente ilustrados, y por lo tanto Maquiavelo señala que los príncipes de su época debían tomarlos como gran ejemplo y tratar de llegar a ser tan grandes como estos. Se nos plantea los grandes retos por los cuales tuvieron que pasar, debido a que modificaban costumbres y leyes que los pueblos llevaban impregnadas, adquiriendo con esto grandes enemigos. Para superar este tipo de dificultades se empleaba la fuerza, ya que a través de ella se puede obligar al pueblo, pudiendo de esta manera mantener las diferentes constituciones.

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