El origen de la familia la propiedad privada y el estado (pp. 64 - 90) .

La gens y el estado de roma. [pic 1][pic 2]

Se empieza hablando de un derecho reciproco entre los gentiles, básicamente  el sistema de orden dentro de la gens, aquí, existía el derecho paterno, y se excluía a la mujer de este campo,  ésta; estaba destinada a obedecer al hombre.

Se nombra la ley de las doce tablas, y se habla sobre el sistema de herencia en la familia, donde los hijos eran los primeros beneficiados, siempre siguiendo una línea masculina. Esta gens, se esmeraba en que los bienes no salieran de la familia en ningún caso, donde gradualmente se fue introduciendo un principio de legalidad para las costumbres de esta gens. Principalmente, esta consistía en un lugar de sepulcro común para los miembros de la gens, y un derecho la solemnidad religiosa. También reglas matrimoniales, como no casarse dentro de la gens, debido a la pérdida de derechos, sin embargo, esto era mas una costumbre que una ley.

Poseían tierras en común, desde tiempos primitivos, y una obligación, implícita de prestarse socorro, y asistencia. Estos debían portar el nombre de la gens, y también podían adoptar a “extraños” y agregarlos a su gens. Cada familia tenía el derecho de elegir o deponer al jefe, este último también era un derecho implícito, ya que se hacían bajo votación o aclamación.

Se habla de que en un momento, la gens romana pudo ser endógama,  en base a unos escritos encontrados que decían que una mujer se podía casar con el miembro de otra gens, sólo si el marido, bajo testamento, lo permitía, sin embargo, nacen inquietudes, ya que el hombre en este caso, hipotéticamente buscaba pareja dentro de su gens, además, el marido no tenía el poder de ordenar a otra gens que aceptaran unirse en matrimonio con una mujer de otra gens. Aun así, más esperable es que la mujer se casase con alguien de otra gens, fuese adoptada, y se despojara de la gens del “ex”.

A modo de organización, diez gens formaban una Fratria, o curia, y tenía atribuciones públicas. Cada Curia tenía sus prácticas particulares, y diez curias, conformaban una tribu, que constaba de un jefe, un general de ejército y un sacerdote. Tres tribus forman un pueblo romano, o populus romanus. Los negocios públicos se ejercían bajo un senado que se componía de los jefes de cada gens, un conjunto de ancianos. También nace la nobleza, familias patricias que pretendían una especie de derecho exclusivo para entrar a los senados, y que de a poco fueron instaurando como natural su privilegio. Para decidir leyes, el pueblo las votaba en las asambleas de curias, pero también hay súbditos que viven fuera de la gens, estos son los esclavos, y la denominada plebe que se excluía de los derechos públicos y de votar en decisiones de curias. Con el paso del tiempo la plebe se hizo igual o más rica que las gens, debido a sus capacidades comerciales e industriales.

La gens entre celtas y germanos.

Tenían un sistema distinto, aunque similar. El cultivo se practicaba en común por las aldeas, dándole territorios a cada gens, para culto personal o actividad productiva. Tenían un sistema de matrimonio sindiásmico que no había sido cambiado del todo por el monógamo. Un matrimonio no se consolidaba si no después de siete años, y solo tres noches antes, podían separarse, la repartición de bienes, la hacia la mujer, y el hombre escogía, y si en caso de que alguien rompiera algo, el hombre debía reponerlo y entregar algo mas, y la mujer, solo recibir algo menos. Otra cosa importante es que si la mujer tras unirse con un nuevo cónyuge, era solicitada por el ex marido, esta debía obedecerle y volver. No se exigía una castidad premarital, mas bien, era un sistema frívolo antes que moralmente burgués. También se ejercía castigo a las mujeres que cometían adulterio, legislado. La mujer podía elegir matrimonio en cualquier momento, por cualquier motivo, también tenían voto en las asambleas de Irlanda, además de los privilegios que se le otorgaban a la mujer tras su divorcio.

En la gens irlandesa también había clanes, sin embargo, la repartición de las tierras se efectuaba cuando moría un jefe de alguna gens. Se practicaba el derecho materno. Básicamente por textos que hablan de la importancia de la mujer, a modo de mártir en batallas o ser sagrado que aportaba la fuerza de luchar. El matrimonio sindiásmico se aproximaba esta vez mas a la monogamia, si había un cuidado por la castidad, y sólo por adulterio se podía pedir el divorcio.

El cultivo individual con reparto anual del suelo, constituye el primer paso hacia la propiedad privada, la agricultura y la apropiación del suelo corresponden a las gens contemporáneas. Los asentamientos germanos consistían en grandes comunidades que mudaban por motivos de agronomía, en un principio, vivían rudimentariamente, en el texto de dice que acababan de pasar el estado medio de barbarie. Sin embargo, poseían avances en la metalurgia e industria.  Desde tiempos de cesar se habían conformado confederaciones de tribus, algunas hasta con reyes que mantenían este sistema monárquico con las mesnadas. Las asambleas de pueblos y consejos de jefes de las gens, habían avanzado, y tras el cambio a un estado superior, el régimen se deteriora, dándole paso al estado.

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