Ensayo 43 normalistas

Ante el catastrófico hecho sucedido el pasado 26 de septiembre y madrugada del 27 se pone en duda la poca credibilidad que ya se le tenía al gobierno. Se conoce poco sobre las razones que llevaron a los normalistas a intentar atentar contra en ese entonces presidente municipal José Luis Abarca y su esposa María de los Ángeles Pineda, que se encontraban en el segundo informe del DIF, del cual su esposa era la presidenta.

Conociendo que el gobierno tiene total conciencia sobre el tema, me resulta difícil creer que pese la gravedad de el hecho, el gobierno solo considere la desaparición de los 43 normalistas como un secuestro agraviado, y no como desaparición forzada así lo prueban ciertos documentos públicos.

Esta forma que tiene el gobierno para intentar disfrazar los hechos haciendo mención de un agravio menor y de igual forma intentando persuadir a la gente con la hipótesis de que los estudiantes debían ser castigados de manera que no pudieran afectar mas a el gobierno (ya que se tiene conocimiento de que no era la primera ves que sucedía un intento de agravio, realizado por los estudiantes normalistas) el presidente José Luis Abarca decidió tomar cartas en el asunto ya que este atentado pudo llegar a afectar su tan importante evento en el cual se dice que se lanzaría a la candidatura Pineda.

Desde mi perspectiva estas deficiencias en la acusación formal y el argumento que toman para abstenerse de tomar la culpa, solo resulta ser un acto para aludir la responsabilidad evitando todas las consecuencias que en su momento se reflejaran en actos realizados por la población que evidenciaran la ineptitud de su gobierno, al no poder controlar sin violencia la situación.

A pesar de el intento que el actual presidente de México realizo por no hacer evidente su ignorancia sobre lo sucedido en iguala, admitiendo ante todo el pueblo mexicano que este tema no iba quedar impune, la culpa recae sobre él, pues la realidad que México ah demostrado ante el mundo es que simplemente carecemos de un gobierno que realmente se solidarice con su pueblo.

El caso de Iguala sumado ya a muchos otros sucesos, ha dejado claro que no se puede hablar de delincuentes comunes si no de la criminalidad de los representantes del gobierno a nivel local, como estatal y federal que por acción u omisión permitieron que esto ocurriera y jamás se reconoció que se hiciera lo necesario para poder resolver este caso que causo tanta revuelta en los estudiantes de todo el país, de alguna manera esto nos ayudo a nosotros a renunciar a la comodidad que el permanecer callados nos brindaba, pues desde la matanza del 2 de octubre, jamás se había visto tanta inconformidad que se plasmo (no en todos los casos de la mejor manera) mediante la unión y solidaridad de todo el pueblo mexicano, principalmente de los estudiantes, el demostrar la inconformidad que esto presentaba para todos estuvo en manos de quien tuvo

...