Ensayo “El coronel no tiene quien le escriba” de Gabriel García Márquez

Zamora Ortiz Bryan

Grupo UB-X-I

Taller de Lectura y Redacción I

Ensayo “El coronel no tiene quien le escriba”

de Gabriel García Márquez

El cuento “El coronel no tiene quien le escriba”  nos narra la historia de un retirado y veterano coronel (del cual nunca se dice su verdadero nombre) que espera cada viernes la llegada de la carta que autorizaría su pensión en agradecimiento a los servicios que presto a su patria, esto nunca sucede y los problemas se agravan debido a su situación económica, la enfermedad de su esposa y la necedad del coronel ante una decisión importante.

        En primera instancia se nos sitúa al coronel una mañana triste, una mañana donde todo el pueblo entero está de luto debido a la muerte por uno de sus habitantes. El coronel prepara café para su esposa, dándose cuenta que es lo último que queda de él. Su mujer sufre de asma, el la atiende con delicadeza y paciencia dándole el poco café que  había, para después mentirle afirmando que el también había tomado café. Es aquí donde nos damos cuenta que el coronel es un hombre noble, humilde y de gran corazón.

        El coronel se prepara con sus mejores ropas, esto debido al entierro del muerto. Se nos narra con delicadeza las deficiencias que tenían las ornamentas en el traje del coronel. A pesar de esto, emprende camino hacia la plaza del pueblo, es entonces cuando empieza a llover. El coronel no le da ni  la más mínima importancia a la lluvia, es capaz de rechazar los consejos de las personas que lo ven y le sugieren que tome un paraguas. Llegando a la casa de la madre del muerto le da el pésame para después hacer el recorrido con el fallecido, mismo recorrido que se ve interrumpido por el alcalde  justificando que no se puede pasar por enfrente del cuartel de policía. Despues de cambiar de ruta para pasar por los barrios bajos del pueblo llegan al cementerio, aquí es cuando el coronel se siente mal y su compadre “Don Sabas” le recomienda ir a ver al doctor. A lo que el coronel se niega y dice que solo es una sensación de tener animales en las tripas. El coronel acompaño a “Don Sabas” hasta su casa, para después irse a la suya.

        A la mañana siguiente (después de una dura noche consecuencia de los respiros de su asmática mujer) el coronel recibe a los amigos de su difunto hijo, mismos que le dicen al coronel que su gallo esta en buena forma.

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