Ensayo sobre maltrato animal

“CON SUERTE ALGÚN DÍA MEREZCAMOS SU AMOR”

[pic 1]

 Grace Yadira Idrogo Apaestegui

Estudiante de la escuela profesional de Psicología

Universidad Señor de Sipán

El abandono animal es el acto cometido por seres humanos, que se refiere a dejar a sus mascotas sin ningún remordimiento, el cual imposibilita al ser animal de poder hacer algo para cambiar su destino. La deshumanización se ha venido masificando de manera inmensurable a nivel mundial. Maltrato se refiere al abuso físico, sexual y mental, e incluye abandonos, situaciones deplorables en las que se desenvuelven (López, 2021). Así que los que creen que no han maltratado a sus animales por no agredirlos físicamente están equivocados. El daño animal es un reflejo del maltrato de la humanidad, carecemos de consideración a otros seres vivos diferentes a nosotros, elogiando nuestra superioridad y permitiendo ese cruel proceder para con ellos. Los animales sienten y son capaces de padecer lo mismo que nosotros y experimentar dolor sin necesidad de la existencia del raciocinio (Ríos, 2015, p. 16). Por consiguiente, nos planteamos la siguiente interrogante ¿En nuestro territorio peruano consideramos a los animales como seres capaces de sentir? Desde mi perspectiva, considero que no se les ha otorgado ese valor, ya que como sociedad hemos denigrado la vida de los animales, y debido a eso las cifras de desprotección de animales van en un aumento constante, el entorno actual poco se preocupa por la implementación de conciencia como principio y esto de cierta manera genera paradigmas, aunque triste pero cierto, todos hemos sido cómplices en algún momento, los casos de ese tipo en vez de reducir aumentan diariamente, por eso la intención de profundizar más en la temática. El propósito principal es generar conciencia con las acciones humanas que se vienen realizando.

A continuación. presentaré los argumentos que respaldan mi postura:

Nuestra formación poco o nada identifica a los animales como seres sintientes. Como sociedad hemos denigrado la vida de los animales a tal punto que muchos creen que es algo habitual ese actuar, que no experimentan dolor, pero es incorrecto ya que ellos tienen la capacidad de experimentar lo mismo que nosotros, aun careciendo de raciocinio eso no les impide sentir con la misma intensidad, ya que como bien sabemos esos pequeños seres nos demuestran su amor, su cariño a diario al momento de llegar de cualquier lugar están ahí para recibirnos con mucha alegría, nos quitan la soledad, con su compañía y entusiasmo ayudan a disminuir el estrés, suficientes razones para tratarlos como se merecen. La formación emocional que identifica a los animales como seres sintientes debería ser parte de nuestra educación (Casasola,2019). Lastimosamente nuestro entorno actual posee muy poca empatía frente a este tipo de problemas constantes ya que como no les afecta a ellos directamente, pues no les genera preocupación, esto se origina por la crianza recibida.

Además, en los medios de comunicación, las cifras de desprotección de animales van en un aumento interminable. Cuentan con poco o nada de apoyo, porque estos seres no tienen como abogar por sus derechos, ni como alzar la voz mediante una protesta y expresar su sentir, se limitan a aceptar su destino; en nuestro territorio peruano contamos con una Ley N° 30407, la cual es objeto de burla, se ejecuta sin embargo en un porcentaje muy bajo. Por eso se dice que la protección y apoyo frente a abandono animal es bastante bajo o nulo. Vilchez (2019) asegura que es una cruel realidad, pero certera de la vida cotidiana y que muchos ignoramos o le prestamos la debida importancia. A pesar de la controversia generada por las acciones en torno a la violencia a un ser animal en nuestro entorno se ha masificado notablemente, a diario tenemos noticias sobre ello, los niveles de justicia son realmente bajos.

Por ello se debe considerar la implementación de conciencia como principio, ya que es fundamental para buscar proteger a seres indefensos de personas abusivas. Nuestro compromiso como personas con prudencia consiste en considerarlos como nuestros iguales, sin ningún tipo de distinción o denigrándolos; como sociedad se necesita trabajar en esta problemática de una vez por todas sin postergar o “hacernos de la vista gorda” como se diría coloquialmente, actuemos de inmediato, si no hacemos algo ahora, nadie más lo hará. Debemos generar consciencia para proteger y cuidar de la mejor manera posible a quiénes no tienen la capacidad de levantar la voz (Castañeda-Hidalgo). La falta de valores es una pandemia que ha creado antivalores como la insensibilidad, la falta de respeto, deshonestidad e injusticia (Huayhuas, 2020).  Parte de los problemas que aquejan a nuestra sociedad son antivalores, entre ellos; la falta de respeto, poca empatía frente a seres distintos a nosotros.

...