Futuro de la Adminsitración pública
Enviado por RCalvillo • 19 de Abril de 2020 • Ensayo • 2.014 Palabras (9 Páginas) • 159 Visitas
Universidad del Valle de México
Trabajo escrito
Sobre:
Futuro de la Administración Pública
Teoría de la Administración Pública
Profesor: Dr. Eduardo Trujillo Sánchez
Maestría en Administración Pública
Alumno: Diego Alfonso Rubí Calvillo
19 de octubre de 2018
Futuro de la Administración Pública
- Introducción
Es indudable que con la victoria electoral de Andrés Manuel López Obrador y su partido Morena el pasado 1 de julio, se votó en el país por un cambio que diera nuevas esperanzas a la mayoría de las personas que están sumidas en la guerra contra el narcotráfico y la pobreza. La situación actual de México sin duda alguna meritaba una revisión de las políticas públicas y su implementación, pero el cambio propuesto por el ganador en la contiendo va más allá de una simple mejora al sistema actual.
Con el próximo ascenso al poder de un grupo (presidente electo y gabinete) que ha criticado a los gobiernos desde los años 80, se vislumbra un cambio en todo sentido: en las personas que ostentarán los principales cargos públicos y en las políticas públicas que implementarán para mejorar en el combate a la desigualdad e inseguridad, situación que sin duda afectará la Administración de la nación y las personas que participan en ella.
Por ello me parece prudente mediante este ensayo revisar el presente de la Administración Pública mexicana, revisando su historia, la teoría en que está basada su implementación y los intelectuales que están al frente de ella para posteriormente, plasmar mis impresiones de las posibles problemáticas que con el cambio de régimen se susciten.
La defensa de los resultados mediocres que ha traído (principalmente en seguridad, corrupción y pobreza) no es necesaria, debido a que como se mencionó con anterioridad, es indudable que se necesitaba una revisión profunda para mejorar la calidad de vida en nuestro país; sin embargo, es imperioso que se rescate la labor de los intelectuales, funcionarios y servidores públicos que en las administraciones pasadas han intentado con su trabajo aportar para la consecución de una nación más justa y mejor. Sólo con la defensa de su trabajo será posible argumentar que no todo en la vida pública va por mal camino y así poder rescatar las buenas prácticas para intentar replicarlas.
Es siempre más fácil para un gobierno entrante utilizar las plataformas administrativas que deja el saliente, pues el impacto del cambio administrativo es mínimo, así que, rescatando a los buenos servidores públicos y las buenas prácticas actuales, el próximo presidente podrá implementar más rápidamente las políticas públicas que crea necesarias para mejorar en el corto, mediano y largo plazo a México.
Con base en esta afirmación, será, por lo tanto, necesario conocer las bases en que se cimienta el presente administrativo nacional para mejorarlo a futuro en aras del beneficio de todos nosotros como mexicanos, y defender algunas de sus posturas ideológicas de acuerdo a mi visión particular.
- Historia
La Administración Pública se ha ido formando como ciencia independiente a través de los años, sobre todo gracias a la influencia de pensadores de los siglos XVIII, XIX y XX alemanes y franceses en un primer momento y estadounidenses posteriormente. Pasó de ser un objeto de estudio de diversas ciencias como del Derecho para convertirse en la época contemporánea en una disciplina con su propia teoría y mecanismos de trabajo.
Fue particularmente en Francia donde se convirtió en una rama del conocimiento particular, así lo aseguran algunos expertos de la actualidad en la materia quienes consideran a Charles-Jean Bonnin como su padre. Con respecto al anterior, el Dr. Carlos Gómez Díaz de León cita su definición de Administración Pública como:
“… la autoridad común que, dentro de cada departamento, ejecuta las leyes de interés general que se estatuyen sobre las relaciones necesarias de cada administrado con la sociedad, y de la sociedad con cada uno de ellos; así como sobre las personas, los bienes y las acciones, como interesantes al orden público”.[1]
De acuerdo con Bonnin estudia las leyes administrativas que son puestas en ejecución como a los funcionarios que son los encargados de ejecutarlas en la cotidianidad.[2] Por tanto, la Administración Pública es el enlace entre el Gobierno y la Sociedad, es el agente gubernamental quien aplica las políticas públicas que se crean en busca del beneficio de todos los ciudadanos de un país.
Además de Bonnin quien definió su campo de acción, cita el mismo Dr. Gómez Díaz de León a Henri Fayol (autor clásico) como un autor que buscó englobar el campo de la Administración Pública y la Administración Privada como una sola; buscando el interés general, argumenta que las empresas particulares contribuyen al bien común y es necesario que los gobiernos apliquen procedimientos de gestión (operación que dirige y administra) similares para volverse más eficientes en su accionar.[3]
Es decir, si el brazo de ejecución del Gobierno (la Administración Pública) busca la eficiencia mediante la previsión, la organización, la dirección, la coordinación y el control a imitación del sector privado de sus políticas públicas, éstas se gestionarán de mejor manera por parte de los organismos públicos y resultarán en un mayor beneficio para la Sociedad que las recibe.
La gestión eficiente de las políticas públicas se volvió fundamental para los gobiernos gracias a Fayol en el siglo XX, con ella muchos de los intelectuales contemporáneos en la materia buscaron incorporarla a la acción gubernamental principalmente en los Estados Unidos y el Reino Unido para posteriormente replicarse en México y el resto del mundo.
- Actualidad
Gracias a los postulados de Fayol se buscó descentralizar la acción gubernamental para volverla más eficiente, autores como Peter Drucker defendieron esta teoría e instaron a diversos Estados para aplicarla en la segunda mitad de la centuria pasada. Para ellos (autores neoclásicos) los gobiernos debían ser pragmáticos en su accionar buscando reducir su volumen de tareas y abrir, al sector privado, los servicios que eran anteriormente brindados exclusivamente por el sector público, abonaba en este menester.
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