Gino Germani investigacion isla maciel.

Investigación sobre los efectos sociales

de la urbanización en un área obrera del Gran Buenos Aires.

Gino Germani

La investigación se realizó en Isla Maciel, un área obrera del Gran Buenos Aires localizada al sur del Riachuelo, entre junio de 1957 y febrero de 1958. Tiene una considerable densidad histórica, por cuanto puso de manifiesto una compleja red de instituciones de diversa índole, nacionales y regionales, al tiempo que involucró el despliegue de un arsenal  conceptual  elaborado  a  partir  de  la  apropiación  de  instrumentos  teóricos y metodológicos diseñados en las tradiciones sociológicas europeas y norteamericana.

Financiado  por  la  UNESCO,  el  estudio  contaba  con  un  conjunto  de interlocutores interesados en sus resultados. Al mencionado organismo se  sumaban la ONU y la CEPAL, que acordaban en asignarle a la disciplina sociológica la capacidad de detectar los obstáculos al desarrollo de los países postergados y delinear estrategias para sortearlos. Constituyó el primer abordaje de la ciudad efectuado con las herramientas analíticas de la “sociología científica”.

La  elección  del  área  de  trabajo respondía a un conjunto de razones:

-En primer lugar, su limitada extensión y elevada densidad  demográfica  configuraban  un  terreno  propicio  para  el  establecimiento  de contactos y, por consiguiente, la determinación de una acción en común.

-En segundo lugar, la zona estaba dividida en dos sectores que, si bien presentaban en su interior un alto grado de homogeneidad social, se encontraban claramente diferenciados, lo que hacía surgir tensiones entre ellos. Denominados “Villa Maciel” e “Isla Maciel”, dichos sectores compartían, sin embargo, ciertas necesidades cuyo tratamiento podía llegar a encolumnar a la población detrás de una misma bandera y favorecer la supresión de las causas que la segregaban.

-En tercer lugar, el funcionamiento de varias  instituciones vecinales dentro del barrio reflejaba la vitalidad del espíritu de cooperación que allí gravitaba. La mayoría de las familias residentes pertenecía a alguno de los cuatro clubes sociales y deportivos, la cooperadora vecinal, la cooperadora escolar o biena una de las dos  comparsas  de  carnaval.  De  modo  que  la  adhesión  de  tales  instituciones  a  la propuesta del Centro facilitaba en muy buena medida la inserción de éste en Maciel.

-Por último, gran parte de sus habitantes llevaba a cabo sus actividades laborales en la propia isla  o  en  sus  inmediaciones.  La  cercanía  resultaba  una  condición  valiosa  para  la consecución de uno de los fines de la Educación Fundamental: el mejoramiento de las condiciones de trabajo. En efecto, posibilitaba la asistencia de cursos preparados con el objeto de proporcionar una capacitación profesional.

También se enfrentaban profundos obstáculos. De ellos, se destacaba las pésimas condiciones de vida en la villa, que dificultaba el desarrollo social no asistencial, la segregación material y psicológica entre tal  sector y el que recibía el nombre de “Isla”, la rivalidad propia de las instituciones vecinales y  la desconfianza ante toda acción exterior, en general, y aquélla que provenía de un organismo oficial, en particular.

La encuesta que estaba llevando a cabo en la zona ubicada  al sur del Riachuelo asumía dos fines. -De índole práctica, uno de ellos consistía en proporcionar al  Centro  de  Desarrollo  Integral  una  información  sobre  el  área  adecuada  para  la concreción de sus proyectos.

-De índole teórica y experimental, el otro  destinaba la investigación a contribuir al conocimiento de los efectos de la industrialización en América Latina. En efecto, la incursión sociológica en Maciel resultaba una muy buena ocasión para que Germani profundizara el análisis de los temas insertos en su agenda científica. En especial, la cuestión de la modernización, sobre la que ya había  escrito por ese entonces una gran cantidad de artículos y un libro, lo que reflejaba que constituía una de sus principales preocupaciones intelectuales y políticas. Entendida como la transición de una sociedad tradicional a una sociedad industrial, la misma incluía  tres niveles: el estructural, el normativo y el psicosocial.

Los objetivos formulados en la “Investigación sobre los  efectos  sociales  de  la  urbanización  en  un  área  obrera  del  Gran  Buenos  Aires” dejaban ver que el objeto de estudio era un grupo de migrantes internos arribados a Isla Maciel poco tiempo antes. Por cierto, el cometido expresado por ellos consistía en describir  sus  características,  conocer  las  motivaciones  y  circunstancias  de  su desplazamiento y observar algunos aspectos del impacto de la vida urbanasobre dicho grupo. Entre tales aspectos, sobresalía el grado de adaptación a la ciudad alcanzado por aquél. De suerte que la “sociología científica” ingresaba a la cuestión urbana mediante la problemática de la inmigración y la transculturación.

De acuerdo con Germani, un trabajo de esta naturaleza requería llevar adelante una comparación que tuviera en cuenta los atributos de la población trasladada y los de aquéllos que permanecían en los lugares de origen. Sin embargo, la falta  de estudios antropológicos y sociológicos acerca de la estructura cultural y social de las regiones del interior del país obligaba a adoptar una estrategia alternativa. La misma imponía realizar una confrontación entre los recientemente llegados y otros dos grupos: el de inmigrantesde mayor antigüedad de residencia en el área y el de nativos. Dicha confrontación se veía facilitada por el hecho de que en Maciel los primeros vivían predominantemente en la zona de villa miseria, mientras que la casi totalidad de lossegundos habitaba la parte denominada “isla”.

A este respecto, una diferencia importante radicaba en las motivaciones de la migración. La  instalación  de  dos  frigoríficos  en  la  zona,  procedentes  de  Zárate  y Campana, constituyó la razón principal de los que habían arribado en la década de1930. Quienes  lo  hicieron  con  posterioridad  consideraban  la  falta  de  trabajo  o  la mala remuneración  del  mismo  en  las  áreas  de  las  que  eran  oriundos  como  los  factores preponderantes.

Así pues, en el primer caso, la industrialización en Maciel condujo a su expansión  demográfica.  En  el  segundo,  determinadas  fuerzas  de  expulsión  de  los lugares de origen provocaron una urbanización sin el correspondiente aumento de la demanda de mano de obra en el sector secundario ni en las labores de mayor estabilidad del terciario, lo que alejaba esta experiencia histórica de la de  los países que habían comenzado  tempranamente  a  transitar  el  camino  de  la  modernización  y  la  volvía esquiva  del  esquema  interpretativo  construido  con  el  fin  de  comprender  semejante proceso. De manera que los últimos en llegar no pudieron más que incorporarse  a las actividades informales pertenecientes a la rama terciaria. Por cierto, tales actividades, cuya realización requería de una baja o nula capacitación, generaban menores ingresos.

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