Guerra tecnológica entre potencias

Guerra tecnológica entre potencias

Es sabido por todos que los avances tecnológicos en el siglo XXI son cada vez más acelerados e impresionantes, logrando ocupar parte fundamental en las economías de muchos países, dos de las potencias más grandes del mundo Estados Unidos y China encabezan la lista de los países que controlan este mercado, las empresas tecnológicas estadounidenses dominan el universo tecnológico internacional, sin embargo el país asiático China es uno de sus mayores competidores, con todo esto se ha creado una batalla entre estas dos potencias, pero, es esta batalla meramente tecnológica? ¿O hay otros intereses de tipo ideológico? Incluso surge otra pregunta. ¿Tiene la moral Estados Unidos para señalar a China por espionaje? A continuación trataremos de abordar estas preguntas.

Para comenzar hay que decir que la problemática entre estos dos países no es nueva, no obstante, es en mayo de 2019 que los problemas se agudizaron entre estas dos potencias, cuando el presidente de Estados Unidos Donald Trump veto a varias empresas de telecomunicaciones incluyendo a la empresa china Huawei, acusándola de espionaje, según Trump, China utiliza a Huawei para espiar a Estados Unidos y utilizar esa información para sus beneficios. “La compañía china esta desde hace tiempo en la mira del presidente estadounidense. Washington sospecha que espía para Pekín y que eso la ha ayudado en su espectacular expansión internacional” (La Prensa, 2019) a partir de las decisiones tomadas por el presidente estadounidense, China amenazo a Estados Unidos con tomar el control del desarrollo de las tecnologías 5G, por otra parte, Estados Unidos dio tres meses para la entrada en vigencia de esta ley. La aplicación de estas sanciones afectaría en gran medida al mayor fabricante chino de móviles Huawei.

A pesar de que Estados Unidos niega estar en una “Guerra Fría” o guerra ideológica con China,  hay que recordar que los intereses de la primera potencia mundial es mantenerse como tal, por lo que no le conviene que mercados asiáticos como el de China le siga pisando los talones, mucho menos que China influya ideológicamente en el resto de países, porque como es sabido es Estados unidos quien tiene el poder económico e ideológico sobre muchos países del mundo, lo que lo mantiene como un país influyente y como la primer potencia mundial.  

Por otro lado, la práctica del espionaje ha sido utilizada por Estados Unidos desde hace muchos años, por lo que es cuestionable su postura al acusar y castigar a China por hacer lo mismo que ellos han venido haciendo a través del tiempo.  El temor de la primera potencia mundial es que lo chinos logren a través de la tecnología influenciar con sus ideologías al resto de países considerando que China también es una potencia económica para el mundo, así lo aseguro Skinner citado en la Prensa (2019) “China es un competidor económico y un competidor ideológico, que realmente busca un tipo de influencia global que muchos de nosotros no esperábamos hace algunas décadas” Como lo dice la cita anterior China es un gran competidor para EE.UU, pero además es un gran aliado para las empresas tecnológicas Estadounidenses, ya que la muchos de los productos que estas utilizan, son elaboradas o ensambladas en China, por lo cual y bajo las presiones de los chinos Trump se vio obligado a suspender el veto que había presentado contra Huawei.  

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