HISTORIA DE NESTLÉ EN EL PERÚ

HISTORIA DE NESTLÉ EN EL PERÚ

A nivel mundial, Nestlé empieza en 1866, cuando Henri Nestlé crea un revolucionario alimento infantil, denominado "farine lactée" ("harina lacteada"), creada para que la consumieran bebés que no podían tomar del pecho de sus madres. Y en 1905, la empresa que había fundado se fusiona con la Anglo-Swiss Condensed Milk Company, los cuales eran un grupo creado por estadounidenses que eran conocidos por inventar la leche condensada. Estos formaron lo que en la actualidad se le conoce como Grupo Nestlé.

En 1919 los productos de Nestlé llegan al Perú a través de una oficina de importaciones que comercializaba leche evaporada, harina lacteada, chocolates y otros productos Nestlé. Sin embargo, no es sino hasta el 20 de setiembre de 1940, cuando Nestlé se hace oficialmente presente en el país con la fundación de la Compañía Peruana de Alimentos Lácteos S.A. (PERULAC)    

En 1949, PERULAC instala su primera fábrica en Chiclayo, la cual empezó procesando productos como Milo y Nescafé. En 1946, eligió a Cajamarca como la región ideal para impulsar la creación de un distrito lechero, para lo cual instaló una nueva planta que denominó “Incalac”, la cual empezó procesando 1 000 litros diarios de leche fresca, actualmente Nestlé supera los 300 000 litros diarios de leche fresca. Y en 1968 se inaugura la reconocida Fábrica Lima para producir caldos deshidratados, productos a base de tomate, mostaza y otras presentaciones de las marcas Maggi y Libby’s.

Gracias a la expansión de Nestlé en el país hizo que se consolidara como una de las principales empresas de alimentos del Perú.    

En 1997, Nestlé compra y adquiere D´Onofrio, una reconocida firma nacional con más de 100 años de presencia en el mercado, y que gracias Nestlé logra el salto a su internacionalización, siendo reconocida en otros países.

En la actualidad, Nestlé es una empresa líder en nutrición, salud y bienestar;  en 2015, según el estudio anual hecho por RepTrak Pulse Perú, Nestlé fue considerada como la empresa que cuenta con la mejor reputación en Perú, superando a marcas como Gloria y Coca Cola, por ello es apreciada y percibida como una de las mejores empresas en el Perú y como una de las más socialmente responsables.

HISTORIA DEL CHOCOLATE SUBLIME  

El chocolate Sublime surgió en el año de 1926 con la empresa D´Onofrio, la cual lleva el nombre de su fundador Antonio D´Onofrio, hombre que extendió la original marca de helados hacia la producción de chocolates, panetones y golosinas con Sublime y otros.

Sublime a lo largo de su historia ha ido variando de forma, tamaño y color, pero manteniendo su sabor que tanto lo caracteriza.

En sus inicios, el empaque de sublime era de una especie de papel manteca, y su mercado iba dirigido a niños de clase A, y comenzó con el slogan de “Lo clásico nunca pasa de moda”. Con el pasar del tiempo Sublime alcanzo una madurez en el mercado peruano, posicionándose entre los mejores chocolates junto con el chocolate “Motta”.    

Sublime quiso implementar nuevos productos (innovadores), para poder mantenerse en el mercado, así mismo en 1973 se implementa el chocolate blanco Sublime con una campaña denominada “La nueva expresión en sabor”, fue el primer chocolate blanco en el Perú, siendo un éxito en ventas. Posterior a ello se modifica el público objetivo de Sublime, ahora enfocándose no solo en niños sino también en jóvenes de 18 a 25 años de clase A y B.

En 1997, Nestlé compra D´Onofrio, lo que genera un cambio en el logo de Sublime, añadiéndole el logo de Nestlé.  

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