ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

LA GLOBALIZACIÓN O LA RAZÓN DEL MÁS FUERTE


Enviado por   •  21 de Septiembre de 2020  •  Resumen  •  2.839 Palabras (12 Páginas)  •  234 Visitas

Página 1 de 12

LA GLOBALIZACIÓN O LA RAZÓN DEL MÁS FUERTE

Globalización, también denominada mundialización por quienes prefieren este galicismo al anglicismo original. La expresión globalización en su sentido actual fue utilizada por primera vez en 1985 por Theodore Levitt en su libro “The Globalization of Markets”, para caracterizar los amplios cambios acontecidos en las últimas dos décadas en la economía internacional: la rápida difusión a lo largo y ancho del planeta de la producción, consumo, inversión y comercio de bienes, servicios, capital y tecnología. Este sentido del término convive con otras acepciones, más concretas, como sinónimo de mercados mundiales, o incluso más abstractas, como su uso para designar las tendencias políticosociales dominantes (el poder de las multinacionales, la ideología neoliberal, la cultura norteamericana hegemónica a escala mundial, etc.). Competitividad, globalización, eficiencia, son conceptos que casi siempre se utilizan con este objetivo económico. La  globalización económica hace referencia al proceso de formación de un sistema económico mundial. Una economía definida rápidamente es una estructura de estructuras en la que se combinan agentes económicos sistemas de producción y sistemas de intercambio, los agentes económicos fundamentales son los empresarios y los trabajadores, que al mismo tiempo son consumidores, la estructura de producción son las empresas y las estructuras de distribución son las que derivan de la existencia de un mercado regulado, es decir un mercado en el cual cada cosa tiene un precio y hay un precio para cada cosa, por lo que hace falta una unidad de medida. Las condiciones objetivas para que exista una economía mundial están dadas (mercados, volúmenes de producción, tecnologías de transporte y distribución etc.) prácticamente desde finales de la segunda guerra mundial. Pero para que exista una economía coherente, en un espacio productivo coherente hace falta una moneda, expresión de los valores (mercantiles) y de la soberanía. Y esta no existe. Podemos decir que existe un proceso inacabado o parcial de globalización, pero el punto débil o menos avanzado de la misma es el institucional. La ausencia de moneda mundial se complementa con la inexistencia de una legislación laboral mundial, más allá de la propuesta deliberativa que son los convenios y reglamentos de la OIT.

En última instancia la dinámica de la economía viene determinada por el proceso de acumulación del capital; se pueden distinguir cuatro aspectos o formas de capital: el capital financiero, el capital productivo y el capital humano y lo que se puede denominar el capital social, que sería la acumulación de conocimiento y prácticas productivas. El capital productivo por el contrario todavía está sometido a las leyes nacionales de los estados, una maquina no se traslada tan fácilmente de un lugar a otro, y por tanto las mercancías se mueve en un espacio trans-nacional. Al mismo tiempo, las fracciones más dinámicas del capital productivo, las empresas multinacionales, establecen una lógica de acumulación, diseminando y fragmentando sus actividades de producción en diversos países, por lo que se puede afirmar que la globalización productiva es parte de un proceso contradictorio, en el que actúan fuerzas que aceleran y fuerzas que frenan e incluso revierten el proceso de globalización. El denominado “capital humano” -básicamente, el trabajo asalariado- tiene todavía más barreras para circular en el espacio mundial, pues además de pedir permiso en las fronteras tiene que tener pasaporte, habla distintos idiomas y le cuesta más tiempo trasladarse que a una máquina, por tanto la fuerza de trabajo se mueve en un espacio inter-nacional con diferentes formas de regulación y valorización de la fuerza de trabajo. El hecho de que el capital financiero sea el que se ha globalizado tiene graves consecuencias sobre el funcionamiento general de las economías nacionales, internacionales y trasnacionales.

Tras la II Guerra Mundial se instaura un nuevo orden económico internacional, basado en la hegemonía mundial de los Estados Unidos de América, que supuestamente ha dado lugar al ciclo más largo de prosperidad económica desde que el mundo es capitalista: ese periodo que va desde finales de los años 40 a principios de los 70, se caracterizó por tres aspectos fundamentales: un modelo de crecimiento acelerado de la productividad, basado en la renovación técnica y un elevado consumo de energía barata; la participación de los trabajadores de los países desarrollados en el festín de la producción acelerada, para evitar su deriva hacia el comunismo, sentido como la mayor amenaza al sistema. Este modelo solo se pudo sostener mediante la guerra: guerra fría contra el comunismo, guerra caliente contra el tercer mundo, para sostener el abastecimiento del centro. En los intersticios políticos que deja este sistema en tensión permanente, se colaron algunas fortalezas efímeras de los países del Sur: de la Conferencia de Bandúng que oficializó la “tercera vía” al desarrollo de los países no alineados, a la proclama, ya cuando el sistema daba muestras de agotamiento, de la necesidad de instaurar un “Nuevo Orden Económico Internacional” que permitiese a los países pobres apropiarse de las rentas de sus exportaciones, en manos de las multinacionales. Todo esto se traduce en agudas contradicciones cuando: el coste de la contención militar del tercer mundo se traduce en un debilitamiento de la hegemonía económica de los Estados Unidos; el coste del consenso social en los países centrales se vuelve excesivo; el aumento de los precios del petróleo y otras materias primas a finales de 1973 se suma a lo anterior para provocar una crisis de rentabilidad en las empresas. Quien va a tomar la iniciativa será el capital, en su versión más dinámica, el capital multinacional. Y la iniciativa será tanto política como económica. Respecto al tercer mundo, todo se echa en la cuenta del ascenso del “comunismo”, que es la forma de denominar en la época a todo intento de autonomía nacional, económica o política, por parte de un gobierno de un país pobre.

La globalización financiera es parte de la respuesta a la crisis industrial de los años 70 en los países capitalistas desarrollados. Los componentes de la crisis se van desarrollando sin que los gobiernos ni el capital encuentren las respuestas adecuadas: el aumento de los precios de las materias primas principalmente el petróleo se pudo dar luego que los gobiernos exportadores del tercer mundo nacionalizaran sus recursos naturales; los incrementos salariales logrados por los trabajadores en la mayoría de los países desarrollados elevaron los costes unitarios, reduciendo la tasa de ganancia o rentabilidad del capital; el papel regulador del Estado requería ingresos fiscales cada vez más elevados para subvencionar la tasa de ganancia del capital en un contexto de rentabilidad descendente y para sufragar los gastos de la protección social, cuando el desempleo empezaba a aumentar dramáticamente. Estos procesos contribuyeron a acelerar la caída de la tasa de ganancia, y con ello a desacelerar la inversión y desencadenar la crisis de acumulación. El capital tardó varios años en encontrar la respuesta integral (política y económica, pero también social) para recuperar su hegemonía y recomponer la tasa de ganancia. Los países del tercer mundo exportadores de manufacturas se convirtieron en una nueva fuente de competencia para la producción de los países desarrollados, transformándose en el principal argumento para justificar la caída de la producción en diversas ramas en los países centrales: siderurgia, construcción naval, automóvil y textil, donde los trabajadores veían desaparecer sus puestos de trabajo en un proceso de racionalización del capital que se justificada con las referencias a la competencia de los nuevos países industrializados.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (18 Kb) pdf (118 Kb) docx (15 Kb)
Leer 11 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com