La Adolecensia

Cuando hablamos sobre los jóvenes nos relacionamos con la etapa de la adolescencia. Etapa en que sufrimos de grandes cambios. Periodo de transformaciones y transiciones. Donde la vida nos enseña y nos lleva a experimentar cosas o situaciones nuevas. Con proceso unos más difíciles que otros y días iguales. Enfrentar, descubrir e identificar van unidas a lo que tenemos que vivir a diario. Los padres, amigos, enemigos, amores, desamores, presiones, tristezas, alegrías y estudios son el tema de nuestras conversaciones. Es una etapa donde cada uno de nosotros estamos destinados a pasar para encontrarnos con nuestra propia identidad. Es por esto, que estaré a continuación hablando de este tema ya que me identifico con él.

Jamás pensaría que esta etapa vivida sería uno de tantos cambios. Cambios que suelen ocurrir y ser tan significativos para mí. Muchos padres o personas adultas a veces piensan que a nosotros no nos importa las situaciones que suceden a nuestro alrededor pero la realidad es que cuando nos juntamos solemos hablar sobre todo lo que nos ocurre o le ocurre a los demás, solo que lo hacemos con personas con las que nos identificamos y es aquí que se nos hace fácil hablar de lo que nos pasa. Las experiencias por las que tenemos que vivir son momentos que nos marcan. Esta etapa no es nada fácil pues en cada problema lo vemos de una forma exagerada. Creemos que si algo nos sale mal, todo seguirá estando así. La mayoría de nosotros en ocasiones nos rendimos con facilidad cuando los resultados no son los que esperábamos. Nos hacemos rebelde ante todo el mundo que no comparta nuestras ideas. La realidad es que cada uno de nosotros somos tan débiles, como cualquier cosa. Solemos encerrarnos a llorar por horas hasta quedarnos dormidos solo para que nadie nos escuche. Pues sentir mucho dolor y decepciones sobre cosas y personas nos hace vulnerable a sentir tristeza acompañado de estados de ánimos cambiantes. El amor es el tema que más tocamos a nuestra edad. Se convierte en ese sentimiento lindo y especial que nos hace ver las cosas diferentes. Hablar sobre él y vivirlo es una experiencia única que a la misma vez es algo inolvidable. Por medio de este encontramos a ese ser que queremos pasar nuestros días pero también las decepciones que nos marcan por mucho tiempo. Las presiones son la orden del día. Enfrentarnos a la toma de decisiones nos confunde. Queremos estar bien con nuestros padres y amigos lo que nos hace en ocasiones fallarle a uno de los dos. Los amigos suelen pasar ser más que hermanos con los que disfrutamos grandes momentos. Compartimos alegrías y tristezas que nos une de forma exclusiva. Tenemos grandes amigos que a veces no son los mejores porque presentan conductas no muy buenas pero estos nos enseñan a tomar mejores decisiones porque nos obligan a evaluar y a analizar lo que nos conviene. También pensamos que la mayoría de las veces nadie nos comprende, nuestros padres pasan a ser

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