La Democracia

LA DEMOCRACIA EN MEXICO

Uno de los motores que impulsaron a los lideres que en el año de 1810, dieron inicio al movimiento de independencia, sin duda fue el afán de ya no estar sometidos al yugo de la corona Española, y tratar de ser libres, por lo tanto, al triunfar el movimiento independentista y arrebatar el poder al gobernante extranjero, fue necesario darle forma al estado que recién nacía, y se optó por instituir una República, Representativa, Democrática y Federal, de ahí que a partir de la entrada en vigor de la primera constitución que rigió en nuestro país en el año de 1824, el sistema de gobierno adoptado tenia nuevas exigencias, entre ellas la aplicación de la democracia, es decir, que los ciudadanos del naciente Estado pudiesen elegir a sus gobernantes mediante la emisión del voto en las urnas, de ahí que hasta nuestros días se siga practicando, sin embargo, las constantes luchas de ideologías que a lo largo de la historia se han observado en nuestro país, lo sumen en una democracia convenenciera ya que su aplicación depende de los intereses de pequeños grupos de poder.

En ese sentido, el desarrollo de un país depende primordialmente de la buena práctica de la democracia, pues cuando se elige a los gobernantes correctos, existirá desarrollo, puesto que es una de las exigencias de la población, aunque es de destacar que la democracia en nuestro país es una democracia tolerante, una democracia diseñada para ser utilizada por los factores reales de poder, pues se condiciona a la estructura del poder y pone limites en las decisiones de desarrollo económico, tal y como lo cita Pablo González Casanova en su obra “LA DEMOCRACIA EN MÉXICO”, quien realiza un análisis sobre la democracia en nuestro país de los años 1929 a 1962. Es evidente que durante estos años la democracia que existió en nuestro país condicionó y limitó el desarrollo económico, pues en esas épocas se beneficio con el poder a elites, tales como a Generales, quienes enfocaban el desarrollo a determinado sector de la sociedad, salvo Lázaro Cárdenas quien se erigió como el salvador del sector social, hechos que en su momento fortalecieron la democracia ya que se incitó a seguir votando por el “partido del gobierno”, sin embargo, el ejercicio democrático se deja ver de una manera superficial, ya que los partidos políticos de oposición se convierten en grupos de presión y no en verdadera oposición, situación que considera debilitó nuestro sistema democrático, y hasta nuestros días se observan prácticas de ese tipo, es decir, la oposición se deja ver negociadora y conformista por las dadivas que otorga el partido político gobernante.

La democracia en nuestro país se ha caracterizado porque la ha ejercido un partido político, al que se le conoció como partido del gobierno. González Casanova, dentro de su obra “LA DEMOCRACIA EN MÉXICO”, describe datos sumamente importantes, pues esquematiza los porcentajes que el partido del gobierno alcanzaba durante los años de 1929 a 1962; es interesante observar como los porcentajes de las votaciones que eran el reflejo de las urnas, siempre eran favorables para el partido político al que pertenecía el gobierno en turno, destacando que dicho porcentaje era sumamente elevado, oscilaba entre un 90 y un 100%. Si observamos esos porcentajes nos damos cuenta que no se trataba de una democracia pura, pues es evidente que los partidos política participantes en las contiendas de

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