La Historia De Ti

El actor Manolo Cardona y su novia, Valeria Santos, se casarán por el rito católico el próximo primero de diciembre en la ciudad de Cartagena. Pero antes, la pareja dio un primer paso en México, donde estrecharon los lazos de amor y respeto en un ritual ancestral de la civilización maya. Esta ceremonia simbólica y romántica, que no tiene la validez legal de un matrimonio religioso o civil en Colombia, se llevó a cabo hace más de un mes en la costera ciudad de Tulum, un vestigio de la cultura maya que hoy está ponderado como destino turístico mundial.

Este refugio, donde se mantienen en pie casi un centenar de pirámides indígenas, tiene un valor espiritual para Cardona, quien dentro de poco rodará una trilogía de películas inspiradas en los libros El testamento maya, del escritor Steve Alten.

Los enamorados se casaron ante un abuelo ancestral, una especie de sacerdote que encabeza este tipo de rituales que datan de hace más de dos mil años. La ceremonia mexicana gira en torno a un círculo de azúcar, dulces de chocolate y flores, que bordea a los novios con el fin de que alcancen la prosperidad material. En un momento del rito, el oferente los invita a prender varias velas en cuatro esquinas del templo, como un símbolo de conexión con la naturaleza y sus cuatro elementos: agua, fuego, aire y tierra. En lugar de anillo, la pareja recibe una pulsera étnica, algo así como una aseguranza que los protegerá cuando se constituyan en una familia.

Manolo y Valeria se casaron lejos de las cámaras fotográficas y sin el asedio de los curiosos y la prensa. A la ceremonia asistieron, entre otros, Felipe Santos, padre de la novia, y Nancy Molano, la mamá del actor.

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