La escuela del mañana en épocas de pandemia: HOY

La escuela del mañana en épocas de pandemia: HOY

Hernán Mendoza

Introducción:

En este ensayo inspirado en el capítulo 5 (¿Cómo pensar en una escuela mejor?), del libro Educación de ayer, hoy y mañana: el ABC de la pedagogía (2007) de Silivina Gvirtz, Silvia Grinberg, Victoria Abregu, intentaremos buscar un paralelismo sobre la educación en tiempos de esta pandemia en argentina y que nos espera más a futuro.

Estamos en 2021, ya hace más de un año en que la pandemia de Covid-19 llego a Argentina, después de cierre de frontera, suspensión de actividades, un nuevo cuadro sociopolítico nos invade en nuestros hogares, pero nos vamos a centrar en las escuela y su educación en bajo este marco, como siguiere la autora la escuela ha cambiado a lo largo de su existencia y siempre a pertenecido a la lógicas de la vida social, la pregunta más importante deja de ser ¿qué tipo de educación necesita esta sociedad ? para ser ¿qué tipo de sociedad queremos? Es decir que tipo de educación debemos implementar. Para ser que mientras más hemos evolucionado más nos hemos contaminado de distintos tipos de posturas y culturas, sumado a las nuevas tecnologías que hemos refinado, las escuelas por lo tanto también han mutado, entendiendo que la realidad no es estática y está dispuesta al cambio que es un proceso constante.

“Cuando el presente está en crisis y las incertidumbres rigen las formas en que se vislumbran el futuro, la institución y su propia misión entran en crisis […]” Gvirtz ilustra en esta frase de manera casi Nostradamus lo que pasaría en el futuro, nuestra presente, hoy en día las escuelas entraron en esta crisis ya que entendemos que solamente más de 20% de los estudiantes en Argentina presentan todos los requisitos necesarios para “una correcta educación” en estado de pandemia es decir, una computadora, conexión constante a internet, el resto ese menor del 80% deben adaptarse o rebuscar una solución para ser educados entonces, vemos una vez más en el campo pedagógico moderno la disputa entre la teoría y la practica (proponer hacer y hacer) es entonces la academia la que propone pero es la escuela quien la hace.

¿Esto quiere decir que es inútil enseñar en estos días lo que veíamos antes de la pandemia ? Para nada, para Tedesco (2005) es necesario educar bajo dos ejes:

• Aprender a aprender: la escuela debe trasmitir información y contenidos, pero sobre todo que los estudiantes aprendan conceptos y modos de compresión de la realidad.

• Aprender a vivir juntos: formar ciudadanos que vivan en democracia, que sientan empatía y con responsabilidad social.

Si lo llevamos a la actualidad ambos son de vital enseñanza, lo primero porque pensemos en los estudiantes de medicina que deben aprender sobre este virus, los policías que deben aprender sobre el tratado a civiles en este tiempo, las escuelas de cocina incluso sobre seguridad e higiene, es más los mismo economistas deben aprender y actualizar su modo de aprender entendiendo que algunas empresas cayeron por ciertas políticas ligadas a la pandemia. Y lo segundo entender y ser empáticos con personas que no están en nuestra misma realidad, si bien estamos en el mismo mar no estamos en el mismo barco.

En el libro publicado en 2007 sostiene una pregunta que es ¿hasta qué punto es posible pensar en la pedagogía como teoría del que se puede derivar las líneas de acción que deben seguir? En este caso entramos en el pensamiento de Brunner (2003) donde nos habla que vivimos en la revolución educacional: las trasformaciones del entorno son de tal magnitud que deben hacer prever una revolución de alcance similar a las que originaron a escolarización de la función educativa. La idea de Brunner es entonces que las escuelas están transformándose de manera drástica y raídamente por fuerzas materiales e intelectuales que se hallan fuera de la comunidad educativa, pero cuyos efectos serán inevitables. Esto lo podemos relacionar a los nuevos institutos online que han nacidos en esta pandemia.

Pero Brunner nos tiene más cambios: el conocimiento deja de ser lento y escaso, la escuela deja de ser el único canal mediante las nuevas generaciones entran en conocimiento, las tecnologías tradicionales del proceso educativo dejan de ser las únicas disponibles para enseñar y aprender, entre otros que rescate.

Hablando de este último punto que rescate, podemos entonces hablar de las nuevas tecnologías en el ámbito escolar, volver a la vieja discusión de “nuevas tecnologías si vs nuevas tecnologías no” queda bajo mi punto de vista ya óbstelo, en el libro nos habla de la década de los 90´s en Latinoamérica y como las políticas educativas

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