La postura de la mujer en el Martín Fierro
Enviado por ayelen santillan • 14 de Agosto de 2018 • Tarea • 1.939 Palabras (8 Páginas) • 1.008 Visitas
La postura de la mujer en el Martín Fierro[pic 1]
[pic 2]
la mujer en la “era” del Martín Fierro
La mujer ha tenido que pasar por varias situaciones para llegar a donde se encuentra hoy en día y en todas las épocas ha protagonizado un papel diferente en la sociedad. En el siguiente trabajo, veremos la postura de ésta ante una de las obras más importantes de la Literatura Argentina cómo lo es El Martín Fierro:
La visión del Martín Fierro:
Este gaucho es un personaje aguerrido y duro que desafía un sinnúmero de adversidades pero que se revierte al mencionar a la mujer. Evidencia hacia ella una profunda admiración y ternura porque ante todo es madre, es soporte de la familia y luego es la gran compañera en la vida.
Fierro canta:
“Tuve en mi pago en un tiempo
Hijos, hacienda y mujer
Pero empecé a padecer
Me hecharon a la frontera
¡y qué iba hallar al volver!
Tan sólo hallé la tapera” cap. 1 (canto 40)
Aunque es interesante ver cómo éste ubica a la mujer en último término: primero aparecen los hijos, luego la hacienda y despúes la mujer; es importante mencionar que “mujer” rima con “padecer” y “volver”, y tal vez sea simplemente un juego de palabras.
Martín Fierro comprende y justifica a su china, no la juzga ni la condena. Por el contrario, pide protección a Dios.
Sin embargo, habla de la mujer como una posesión, como algo debil; algo que el gaucho debe cuidar y defender.
Respecto de una mujer negra: aparece una pareja de negros durante un baile en una pulpería:
“Al ver llegar la morena,
que no hacía caso de naides,
le dije con la mamúa:
va–ca–yendo gente al baile
La negra entendió la cosa
y no tardó en contestarme,
mirándome como a perro:
más vaca será su madre.
Y dentró al baile muy tiesa
con más cola que una zorra,
haciendo blanquiar los dientes
lo mesmo que mazamorra.
¡Negra linda!– Dije yo.
Me gusta– pa la carona;
y me puse a champurriar
esta coplita fregona” cap. 7 (cantos 195-198)
La mujer se muestra indiferente, sin embargo Fierro la compara en su descripción con una mula, una perra, una loba, una zorra o una vaca. Cabe destacar que Fierro tiene esta actitud producto de su ebriedad, ya que en cierta ocasión, menosprecia a los hombres que ejercen violencia contra el género femenino sometiéndolas por la rudeza de su condición varonil más fuerte:
“Todo el que entiende la vida
Busca a su lao los placeres;
Justo es que las considere
El hombre de corazón;
Sólo los cobardes son
Valientes con sus mujeres.” Cap. 5 (canto 15)
La visión de Cruz:[pic 3]
Al principio, este personaje, tiene una opinion bastante similar a la de Fierro, pero luego cambia de opinion rotundamente.
Cruz canta:
“Yo también tuve una pilcha
Que me enllenó el corazón
Y si en aquella ocasión
Alguien me hubiera buscao
Siguro que me había hallao
Más prendido que un botón” cap.10 (canto 300)
Para Cruz existen dos tipos de mujeres: “la calavera” y “la mejor compañera”. Al hablar de su “prenda”, recuerda con alegría los momentos vividos. La mujer adquiere una grandeza incomparable:
“Era el águila que a un árbol
Dende las nubes bajó
Era más linda que el alba
Cuando vá rayando el sol
Era la flor deliciosa
Que entre el trevolar nació” cap.10 (canto 305)
En este canto, el paralelismo se une a dos metáforas (Era el águila/Era la flor) y una comparación (Era más linda que el alba); es una mujer única. Sin embargo, todo este sentimiento se desvanece cuando Cruz se entera que su china recibía halagos por parte del “Comendante” Desde ese momento, cambia radicalmente la selección de términos lexicales para referirse a ella. Podríamos decir que Cruz tiene un antes o un despúes; hay dos discursos opuestos. Aquí va un claro ejemplo de esto:
“No me gusta que otro gallo
Le cacarée a mi gallina
Yo andaba ya con la espina
Hasta que en una ocasión
Lo sorprendí junto al jogón
Abrazándome a la china” cap.10 (canto 311)
Y como consecuencia de este hecho, Cruz pierde confianza hacía todas las mujeres.
Podríamos decir que cada hombre representa a su mujer dediferentes maneras: ante la situación de perdida, Fierro la comprende y la perdona; mientras que Cruz la condena y, en ella, condena a todas las mujeres. En ambos casos, el tono de representación es de lamento por el bien perdido y la forma del discurso es la nostalgia.
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