Las lenguas indígenas en México discurso

“Ayer soñé con mariposas, que mi lengua era la lengua de todos y que la lengua de todos era la mía, la tierra y el agua eran libres de nuevo, eran nuestros…”

Buenos días honorables miembros del jurado, autoridades educativas, maestros que hoy nos honran con su presencia, compañeros alumnos, público en general. Mi nombre es Oliver Jafet Alvarado Callejas del sexto grado grupo A de la escuela primaria Miguel Hidalgo y Costilla de la comunidad de Palmarcillo, Atzalan. El día de hoy me es un placer formar parte de este magno evento de oratoria  y me enorgullece  disertar el tema ¿Qué propongo para conservar y promover las lenguas indígenas?

Según el lingüista David Crystal, “una lengua muere no cuando el último de sus hablantes muere, sino cuando esa lengua ha dejado de ser un medio de comunicación entre seres humanos”.

En el país se hablan al menos 68 lenguas originarias, de las cuales el 60% está en peligro de desaparecer según el Informe sobre Desarrollo Humano de los Pueblos Indígenas en México, en el 2018.

Con este antecedente, La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 2019 como el año internacional de las Lenguas Indígenas, con el fin de sensibilizar a la sociedad en general para que reconozcan y valoren la importante contribución que los idiomas originarios hacen a la diversidad cultural y lingüística mundial.

Pero, ¿qué hacemos como sociedad, en este país pluricultural?, ¿qué hacemos cuando vemos a un hermano indígena al pregonar por las calles de nuestra ciudad impartiendo su danza y su música por unas cuántas monedas? Se nos olvida que somos hijos de la misma tierra, del pueblo mexicano y nos reímos o lanzamos un comentario excluyente que margina y coarta el aprecio hacia su lengua…su cultura.  No nos damos cuenta del grave daño que les hacemos…nos convertimos en opresores al ser los principales en avergonzarnos de nuestras raíces.

Uno de los motivos por los cuales ha disminuido el fomento de las lenguas indígenas, son los prejuicios y la discriminación que han reprimido su uso, pese a que en nuestra Constitución Política se enmarca en el artículo primero “queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico, entre otras que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular los derechos y libertades de las personas”.

Es doloroso ver que en el extranjero se enaltece la cultura cosmogónica de los pueblos indígenas y que en nuestro país no la valoramos, por el contrario nosotros mismos provocamos desprecio, deberíamos avergonzarnos de  promover su aislamiento, ya que se ven envueltos en una realidad que les demanda dejar a un lado su idioma debido a las actitudes discriminatorias y prejuicios que señalan a las lenguas indígenas como factor de atraso en el sentido de hacerlas parecer inferiores etiquetadas como “dialectos” en sentido peyorativo. A las nuevas generaciones no se les enseña la lengua materna de sus padres.

Debido a que el español se impuso como lengua de prestigio desde la época colonial y aquella que ofrece oportunidades y beneficios en una sociedad moderna y globalizada, el oropel del ascenso social y económico pues deben salir a comercializar sus productos del campo o la apropiación de otro idioma como el inglés debido a la necesidad de migrar al extranjero, principalmente Estados Unidos, en busca de una mejor calidad de vida.

Y qué decir de la educación al hermano indígena, si existe una gran injusticia en la impartición ya que  nuestro país no cuenta con suficientes maestros bilingües.  Aún menos en los niveles superiores para que los jóvenes de nuestros pueblos puedan seguirse preparando. ¿Es eso lo que queremos?, ¿que las lenguas vayan desapareciendo por el contacto escolar?

        En la escuela cada día mi maestra nos dice “Como tú trates a las personas, te van a tratar a ti” y a través de esto nos enseña que debemos tener consideración hacia ellas. Entonces les pregunto a ustedes  de qué forma practicamos el respeto que todos exigimos día con día y que no sabemos dar.

No es posible implementar programas de revitalización sino se cambian las ideas con las que se concibe al pueblo indígena, desde el marco jurídico hasta la ciudadanía.

No basta con un discurso político, ya que sabemos que el gobierno mexicano se queda en eso en un discurso.  En el plano legislativo, aunque en la actualidad se haya creado la ley del instituto nacional de los pueblos indígenas, poco se ha hecho. No basta con eso que vamos hacer como sociedad lejos del paradigma gubernamental de esa utopía  que gobierno tras gobierno han querido mostrar y nunca pasa nada.

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