Latino América En París 1889

Latinoamérica en París 1889

Armand Mattelart en el templo de la industria nos hace una minuciosa descripción acerca de las exposiciones universales, sus comienzos y como fue evolucionando tanto en imaginarios como en sus mismas prácticas, nos describe como la atención de América latina estaba puesta sobre Inglaterra y Francia, de la primera les atraía sus adelantos técnicos y su crecimiento en poderío económico y de Francia atraían sus modos de vida.

1889 fue un año donde ocurrieron grandes acontecimientos en París, se inauguró la Torre Eiffel, siendo esta la principal atracción de la exposición universal, el mundo fue testigo de las maravillas que se exhibieron en los diferentes pabellones. Los descubrimientos científicos, la gastronomía, avances tecnológicos industriales, arte, poetas, escritores y muchos aspectos más se lograban presentar en esta exposición donde también se incluyo fauna representativa de algunos países.

Desde siempre, la historia nos muestra como entre Europa y América Latina han sostenido un conflicto, una relación de dependencia que pocas modificaciones ha tenido, podemos ver un ejemplo en la arquitectura, los pabellones que los países latinoamericanos mostraron en la exposición universal dejaba ver lo que éramos y también lo que aspirábamos ser.

El pabellón Argentino fue obra de dos arquitectos, Ballu y Chancel, con colaboración de 12 artistas y un escultor, se dice que fue el más importante en cuanto a dimensiones y también bien aceptado por el gusto de la exposición, tenía un porte majestuoso, en su interior dos pisos donde se exhibieron los frutos del país, otro edificio que llamo la atención fue el de Brasil que fue construido por M. dauvergne, un arquitecto parisiense, el pabellón más importante para la historia de América Latina fue el de México, sus rasgos prehispánicos llamaron la atención.

Mattelart nos señala en el templo de la industria como la exposición de parís en 1900 va a ser el punto de inflexión, la curca ascendente de las exposiciones universales, volviéndose cosmopolita, es el momento donde el modelo entra en crisis, y se empieza a hablar de la lógica del espectáculo donde estas exposiciones universales se convierten en empresas de placer mostrando una tendencia a la comercialización, una desviación hacia el entretenimiento, Maurice Utrillo denuncia lo siguiente acerca de la exposición:

Si se hiciera un libro con las barbaridades que se sueltan en la Exposición, resultaría en poco

tiempo, un magnífico diccionario de disparates. […] Para evitar que las Exposiciones sean un

mero punto de reunión, y para que la masa pudiera sacar de ellas la mayor dosis de enseñanza,

debería declararse obligatorio para cada expositor, el confeccionar un sencillo prospecto, en el

cual, sin revelar ciertos detalles profesionales, indicara algunos datos útiles para

...