Lenguaje Sonoro - Análisis “Riot at the Rite”
Enviado por Jorge Leal • 19 de Mayo de 2016 • Ensayo • 395 Palabras (2 Páginas) • 331 Visitas
Lenguaje Sonoro
Samuel Larson
24 de abril de 2016
Análisis “Riot at the Rite”
Por Jorge Leal.
¿Por qué el público de París se escandalizó con la publicación de Rite of Spring de Igor Stravinsky?
En 1913, una audiencia acostumbrada al tradicional Cisne de Tchaikovsky acude estreno del nuevo ballet de Stravinsky. Diaghilev, el productor de la temporada, se acerca a los bailarines antes de empezar la presentación y les dice, pase lo que pase, no dejen el espectáculo. Las primeras apreciaciones que nos da la película es de los espectadores de clase alta quienes están incómodos por la proximidad entre la muchedumbre y la aristocracia que ofrece el nuevo teatro. Empieza la orquesta, y el público de la clase baja no tarda en revelarse. Se torna todo una atmósfera tensa que los bailarines escuchan antes de que se suba el telón. Vemos el neurótico Stravinsky que nos han querido vender toda la película, al borde de un colapso nervioso, diciéndole desde su mente al director de orquesta que no pare a pesar del abucheo del público. Se abre telón. La historia se centra en la Rusia pagana, en donde una tribu, ofrece un personaje en tributo a los dioses, quien es sentenciado a bailar hasta la muerte. Ya con la temática el público es sacudido, y para sumar la coreografía van a tono con la agresividad que Stravinsky plantea en su composición experimental. El espectador que no está abucheando, está confundido y no entiende la historia. La rabia empieza a esparcirse en la tribuna hasta que un aristócrata grita con desdén a la compañía rusa “¡Regresen a Moscú!”. Un Nijinsky furioso pretende saltar detrás de bambalinas para enfrentar al espectador que gritó eso pero Stravinsky lo detiene diciendo que se van a calmar. El público se unifica al son de burlas, reclamaciones, gritas, abucheos hacia el escenario y hacia el propio Diaghilev. La diferencia de clases se difumina, la mayoría parecen animales protestantes. La opiniones encontradas se revelan. Toda la puesta, tanto coreográfica como musical, llevaron al impulso primitivo a los espectadores, todo ese éxtasis me gusta pensar que fue a raíz del genio que el talento de sus creadores supo empapar a quien estuvo adentro del recinto. No supieron analizar lo que la pieza provocaba en su recepción condenando la puesta original a pocas representaciones, cuatro más en París y tres en Londres.
...