Liderazgo democrático; herramienta de cambio social o estereotipo de una realidad dolorosa

Corporación Universitaria Minuto de Dios Regional Soacha.

Presentado por: José Fernando Novoa Guevara.

Edad: 27 años.

Ciudad: Bogotá distrito Capital.

Carrera: Licenciatura en Humanidades y Lengua Castellana.

El líder Democrático es aquel que prioriza la participación de la comunidad, permite que el grupo decida por la política a seguir y tomar las diferentes decisiones a partir de lo que el grupo opine.

       María Lara.

Liderazgo democrático; herramienta de cambio social o estereotipo de una realidad dolorosa

En el presente texto expondré en primera instancia algunas de las características básicas de un líder democrático, posteriormente evoco someramente algunas historias de destacados líderes, que como muchos han sido modelos a seguir por sus importantes obras, manejando un paralelo se toma el caso tergiversado de un líder político del estado recordado por graves actos de corrupción dentro del gobierno, mostrando un adulterado perfil de liderazgo basado en la riqueza y la posición que desempeñan elitistas insensibles de la realidad social colombiana; como antesala del cierre de manera documentada se acentúa a la educación como herramienta de cambio social, donde el papel del educador es fundamental para trasformar la historia y brindar una oportunidad diferente a las futuras generaciones, culminando con algunas reflexiones al respecto.

Un buen líder se debe distinguir por  ser una persona que sabe y se hace escuchar, amable, altamente social, positivo, cordial y entusiasta, a  su vez debe ser una persona analítica, sintética y reflexiva de los diferentes contextos sociales, que asume el liderazgo como una acción mas no como una posición, un eficiente proveedor de esperanza, con gran visión en el arte de ver las cosas invisibles, pronosticador de problemáticas y diseñador de soluciones, quien corrige pacíficamente y enaltece vigorosamente. Sí, un prototipo de persona líder no depende de la posición, las ganancias o el título que ocupe, sino que ser líder hoy es, fundamentalmente, un acto de humildad, como lo dice el filósofo y profesor de la Universidad de Vanderbilt Richard L. Daft en su libro La experiencia del liderazgo ( citado por Semana.com 2009). Daft agrega que "anteriormente el líder competía, hoy el líder tiene que crear comunión, trabajo en equipo y colaboración".  El líder democrático debe  estar ceñido dentro de los derechos humanos, demostrando que líder es el que valora y conserva los recursos humanos como lo más importante de la estructura social, mas no el que busca la riqueza individual a causa del esfuerzo inhumano y poco valorado de la sociedad; dentro de muchos casos para ejemplarizar lo anterior podemos hablar del padre Jaime García Cuellar fundador y director del Centro de Capacitación y Promoción Popular Juan Bosco Obrero, ubicado en las laderas de la localidad de Ciudad Bolívar, lugar que donde gracias al esmerado y desinteresado esfuerzo de su mentor y excelente equipo de trabajo, se capacita humana, técnica y empresarialmente a cerca de mil estudiantes en diferentes jornadas, y como si esto fuera poco les ubican laboralmente con una eficaz oficina de empleos con la que cuenta este centro salesiano; todo esto sin costo más que el de vivir en paz y  comunidad, cuidando y aprendiendo, y ante todo llevando el mensaje de que los sueños si pueden ser realidad. Otro grande representante fue el desaparecido sacerdote Rafael García Herreros, fundador del Banquete del millón, la corporación Minuto de Dios, el Barrio Minuto de Dios, entre otros, característico por su notable vocación de servicio que demostró al comenzar su obra recogiendo limosnas los domingos en su misa de potrero, con el fin de construir su iglesia.

Al detallar estos casos puntuales nos atreveríamos a argumentar que ¿podrían los verdaderos líderes democráticos surgir por vocación, o es una habilidad que se desarrolla con el tiempo? no es preciso enfrascarnos en una vocación sacerdotal, que por obvias razones debería ser general por parte de todos los jerarcas de la iglesia en su compromiso sagrado, pero, no tendría sentido polemizar en este campo, lo cierto es que como algunos jerarcas de la iglesia también existen bondadosos líderes sociales dispuestos a ofrecer un servicio sin el ánimo de retribuciones distintas a un gesto amable, o tal vez una cara sonriente o un sencillo gracias; este es el caso de Jaime Jaramillo, más conocido como “papá Jaime”, ingeniero geofísico y de petróleos, que ha ofrecido un gran segmento de su vida a rescatar y rehabilitar a los niños que viven en las calles y las alcantarillas de Colombia, con la creación de la fundación Niños de los Andes. En entrevista a un medio de comunicación dice Jaime Jaramillo lo siguiente:

“¿Qué hecho concreto lo motivó a dedicarse al desarrollo social?

Desde muy pequeño sentía una gran sensibilidad por las cosas que pasaban y por los niños pobres. El arranque grande fue en la navidad del año 1973. Hace más de 30 años iba caminando por la calle, pasó un carro, de este cayó una caja de una muñeca al piso, los niños de la calle salieron corriendo y una niña levanto la caja de la muñeca. Estaba feliz, ella me miraba y por estar mirándome no se dio cuenta que venía un tracto mula, golpeó la niña y ella cayó sobre el pavimento”. (Jaramillo, s.f) p 1.

Los líderes democráticos son personas sensibles a una realidad social,  la cual sienten como propia y toman la decisión de luchar por una causa en busca de la “trasformación de realidades”, ahora bien, después de ver ejemplos de algunos líderes democráticos podemos señalar con claridad  si en el actual gobierno, ¿contamos con líderes democráticos capaces de aportar en cierta medida a las necesidades del pueblo?

Los líderes democráticos que por medio del mecanismo democrático del voto elegimos en busca de representación, respaldo, y en la administración de impuestos y regalías en obras públicas y proyectos sociales que mejoren la calidad de vida de la comunidad,  y aún siendo muy bien remunerada su labor ¿será que hacen correcto uso de estos recursos? Una respuesta que mucho deberíamos reflexionar, para de esta manera contar con una conciencia limpia y un ojo clínico cuando de escoger a nuestros líderes se trata, y para esto recordamos al pasado y célebre ministro de agricultura Andrés Felipe Arias y el proyecto que ilusionó a más de un campesino llamado Agro Ingreso Seguro, un verdadero sarcasmo si hablamos del nombre con que se bautizó este plan de restitución de tierras, ya que resulto ser un engaño como lo describen el Diario el Espectador en el siguiente artículo:

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