ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Los Caidos Del 2 De Octubre


Enviado por   •  2 de Septiembre de 2012  •  1.432 Palabras (6 Páginas)  •  376 Visitas

Página 1 de 6

“Los caídos del 2 de octubre”

Por: Juan Ramírez Orduña.

Me presento como un estudiante del Bachillerato a Distancia, muy interesado por lo ocurrido el 2 de octubre de 1968; un capitulo negro en la historia de nuestro país, que después de 43 años de lo ocurrido, a un sigue haciendo eco en nuestra sociedad.

La tarde de ese día fatídico, ocurrió un echo deleznable que nadie pudo vaticinar, solamente el gobierno de Gustavo Días Ordaz con su mente retorcida, enfermos de poder con la determinación de someter a todo aquel que estuviera en su contra, utilizando todos los medios posibles para lograr su cometido sin medir sus consecuencias.

Los estudiantes de aquella época, luchaban por una igualdad social donde todos los alumnos tuvieran acceso a los beneficios que otorgaba el gobierno, beneficios que solo eran otorgados a la clase alta de la sociedad; pero eso no es ajeno para nosotros, inclusive hoy en nuestros días eso sigue pasando. Pero hay una diferencia los años 60, eran tiempos de cambio, algunos muy radicales y los movimientos estudiantiles se volvían cada bes más fuertes; y el gobierno era poco tolerante e infiltro grupos radicales en las manifestaciones llamados porros, con el objetivo de causar diferencias entre sus simpatizantes. Qué tiempos aquellos donde estudiantes peleaban con sus similares, pero esperen creo que eso todavía sigue sucediendo.

Fue entonces que las manifestaciones comenzaron a tornarse violentas, y el gobierno que como siempre no tiene la capacidad de negociar, como en otras ocasiones utilizo la fuerza bruta, pero esta bes de forma más violenta, causando muertos y varios heridos, aprendiendo a estudiantes y dirigentes del movimiento. El gobierno pensó que con esas acciones terminarían las manifestaciones; pero por el contrario muchos más se unieron a su causa y se logró la unificación de barias universidades formando así el Comité Nacional de Huelga; demandando la liberación de los presos políticos y la destitución de los mandos policiacos.

El 2 de octubre de 1968, unos días previos a la inauguración de los Juegos Olímpicos, que tenían como cede la Ciudad de México. Se convocó por parte del Comité Nacional de Huelga a una asamblea en la plaza de las tres culturas en Tlatelolco, ese día desde temprano ya se había instalado ahí un fuerte operativo policiaco, acompañado del ejército y un agrupamiento especial llamado Batallón Olimpia que fue formado para garantizar la seguridad de los Juegos Olímpicos. El operativo fue desplegado alrededor de la plaza de Tlatelolco y en lo alto de los edificios que rodean la misma; para los manifestantes esto no era nada nuevo ya que en diversas ocasiones habían hecho lo mismo y los estudiantes ya estaban acostumbrados a ver tanques y convoyes de granaderos.

Por la tarde la convención inicio sin incidentes, con la mirada indiferente de las fuerzas armadas; pero fue entonces que unas bengalas de color verde surcaron el cielo de la Plaza de las tres culturas, iniciándose así la masacre. Comenzaron los disparos y la gente ahí congregada corrió en forma despavorida; los jóvenes eran flanqueados de diversas direcciones, muchos de ellos se refugiaron en los edificios aledaños. Todo fue caos y confusión, los muertos ya se contaban por decenas, pero los opresores no se detendrían ahí; entraron a los edificios para buscar a los disidentes que se encontraban escondidos. En toda la noche no dejaron de oírse los disparos, los buscaron hasta en las coladeras.

Al día siguiente, la versión oficial del gobierno fue que los manifestantes provocaron todo, que solo hubo algunos muertos, que fueron 16, no que fueron 43, bueno que fueron un poco más; en fin nunca se pusieron de acuerdo, aunque muchos testigos pudieron observar que por la mañana llegaron varios camiones del Departamento del Distrito Federal, a levantar los cuerpos por ciento; también asistieron camiones de bomberos para borrar a chorros de agua, las manchas de sangre que dejaron los caídos del 2 de octubre. Ya pasaron muchos años pero esas manchas son difíciles de borrar, inclusive si se da uno el tiempo de acudir a la Plaza de Tlatelolco, aun se percibe el olor a muerte y el sentimiento de injusticia por los actos crueles de ese día infortunado.

El movimiento fue disuelto, los pocos líderes que lograron escapar, ahora eran buscados como a criminales. Los Juegos Olímpicos fueron inaugurados por Gustavo Días Ordaz, irónicamente en el estadio de Ciudad Universitaria sin ningún contratiempo; el gobierno pensó que había ganado y que salió impune de sus actos.

237 68/ 10/ 02 17 HS. “Desde las 16 hs. Aproximadamente del día de hoy comenzaron a llegar grupos de

estudiantes de las escuelas preparatorias

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (9 Kb)
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com