Manuel Belgrano – Escritos económicos

Manuel Belgrano – Escritos económicos

En estos años, en lo militar España se halla amenazada por Inglaterra, que buscaba establecer comercio con las colonias poniendo en peligro el monopolio que seguían pregonando los españoles que además querían formar en el territorio un ejército propio.

En lo económico, España tenía la necesidad de sañar las finanzas del Rey, establece una nueva articulación con sus colonias, que habían sido descuidadas y establecido cierta independencia económica. Hacia 1778 se origina el Reglamento de libre comercio, el cual busca reforzar el proceso de centralización y comercializar desde las colonias directamente con España y sus barcos.

Las mercancías de Europa no se comercializaban de manera directa con los del Río de la Plata. Había impuestos de por medio. El Monopolio seguía establecido. Cabe decir que las invasiones inglesas ponen en juego esa idea de establecer una comercialización directa y España tuvo que ceder.

En todo este marco, Belgrano que volvía de estudiar abogacía en la Universidad de Salamanca, pasa a ocupar el cargo de secretario del consulado de comercio. Hay que decir que, en estos años, el hecho de ser blanco, con estudios y de ascendencia española jugaban a favor a la hora de ocupar cargos jerárquicos.

El español peninsular podía comprar todo lo de los barcos, agregaba valor para la ganancia que quería obtener y ese precio se posicionaba en el mercado donde no hay nadie que regule y hay pocos competidores. Los de acá no podían comprar en el comercio mayorista. ¿Qué es el monopolio español? Plan económico de las Reformas Borbónicas (pregunta parcial). Debe entenderse de acuerdo a todo lo esbozado que es el manejo exclusivo de los precios que manejaban los españoles peninsulares lo que provoca pocos ricos, que son justamente ellos. Dentro de las Reformas Borbónicas impuestas por España también se encuentra el carácter ideológico, “iluminista”. La ilustración que llega a España no es la francesa, sino la católica, una ilustración de carácter religioso, que no deslegitima la corona, sino que obraba a favor del poder monarca y desde el poder tampoco se contradecía a la corona.

En todo este contexto, en España revuela la idea de la fisiocracia, que representa el gobierno de la naturaleza. Es una doctrina económica que ve a la agricultura como la madre de todas las riquezas. La riqueza se puede producir. El gobierno de la naturaleza tiene sus propias leyes y puede ser estudiado como una realidad autónoma. Tiene funcionamiento espontaneo sin que intervenga la mano del hombre, sí la de aquellos agricultores.

En todo este marco, Belgrano va a decir que: “Fomentar la agricultura, animar y proteger el comercio, son los tres importantes objetos que deben ocupar la atención y cuidado de VV. SS”. Habla de ellas como las tres fuentes universales de la riqueza que debieran tener los países. La agricultura

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