Opinión plebiscito en Colombia.

¿Quién dijo guerra?

Sí, ya muchos sabemos lo que está pasando con el plebiscito y sus posibles secuelas sobre el proceso de paz que, para desgracia de muchos, duró nada menos que cuatro años y del cual hubo reelección de presidente para que siguiera con la jodita. Resulta que ahora se quiere la paz “pero no así” ¿entonces cómo?

Ni ellos saben: “¡Que paguen cárcel!”, “Sin ideología de género”, sin “rituales satánicos” ¡¿CÓMO?! Esas son las consecuencias de una campaña  opositora fraudulenta, hecha para engañar de la peor manera a los votantes (bastante flojos en su mayoría que no se dedicaron ni 10 minutos a echarle una ojeadita a los acuerdos) más bien, se dedicaron a profanar el proceso. Hace poco vi un video de La Pulla que titulaba “El plebiscito sacó la peor porquería  de Colombia” y con toda razón.

Para mí, uno de los grandes problemas que tiene el país es la falta de memoria; llevamos siglos en una polarización tacita, criollos vs conquistadores, liberales vs conservadores, guerrilleros vs paramilitares, y la gente cree que es joda. Ni siquiera, desde la independencia, alguien se ha tomado la voz para decir “no más” y reunificar nuestra “amada patria”. Aquí todo el mundo cree tener la razón, no se escucha, no se recuerda.  Es la primera vez que un proceso de paz con las FARC se logra (véase procesos llevados a cabo por Belisario Betancour, Samper, Pastrana e incluso Uribe) tan “exitosamente”. Desde su creación las Farc y el Gobierno no daban pie con bola y cuando por fin lo logran somos nosotros, los afectados por la guerra, los que no lo aceptamos.

Comprendo que había personas cuyos puntos para diferir de los diálogos era válido, respetable. Sin embargo otros sectores de la sociedad se dejaron llevar por creencias y engaños que afectaron bastante las votaciones. Por ejemplo, un concejal bogotano llamado Marco Fidel Ramírez se la pasó hablando sobre la ideología de género que supuestamente se encontraba dentro de los acuerdos, se manifestó negativamente incitando a votar en contra para “proteger la familia”. Es indignante que un sueño de paz haya sido rebatado por mentiras. Y lo peor es que esa consulta popular ni siquiera era una obligación; perfectamente se pudo haber ejecutado cada uno de los puntos sin preguntar al pueblo, que se jodan! Pero no, se sometió a votación y perdió y no, no precisamente porque la mayoría haya votado No sino porque simplemente no quisieron siquiera votar.

Eso es mucho decir, nunca se había visto desde La Violencia, de forma tan evidente la división en Colombia; sea cual sea el motivo ¿de verdad valía la pena darle la espalda a lo que probablemente es uno de los momentos  más importantes de Colombia? Yo no lo creo, tanto así que incluso somos los jóvenes quienes más exigimos nuestro derecho a la paz.

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