Palabras Alusivas 2 De Abril

Por defender nuestro territorio y nuestra historia, hombres y mujeres han entregado su vida con pasión y amor inquebrantables. Uno de esos sacrificios recordamos hoy, en un intento de mantener vivo el reconocimiento que merecen quienes, el 2 de abril de 1982, desembarcaron de manera sorpresiva en las Islas Malvinas y durante casi tres meses fueron protagonistas de uno de los capítulos más penosos de nuestra historia reciente, defendiendo con lealtad y patriotismo la tierra Argentina que nos fuera usurpada por el Imperio Británico.

Las Islas Malvinas quedan en el Océano Atlántico y forman parte de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas Atlántico Sur. Son dos: Gran Malvina y Soledad separadas por el estrecho de San Carlos y muchas islas menores. Argentina tomó posesión de ellas en 1820 y el 10 de junio de 1829 instituyó en ellas a su primer gobernador. En 1833 el Reino Unido las invadió y actualmente continúan ocupándolas, aunque no tengan derecho a hacerlo.

Uno podría preguntarse: ¿Por qué ese intento, en 1982, de recuperar las Islas Malvinas tantos años después de la ocupación británica (más precisamente 149 años después)? ¿Por qué empezar esta guerra? Y la explicación tiene que ver con lo que pasaba en el país en ese momento. En la Argentina había un gobierno militar desde 1976 y allá por 1982 ya tenía problemas para mantenerse en el poder. La gente estaba descontenta, la economía no funcionaba y cada vez había más manifestaciones en las calles (la última había sido el 30 de marzo). Entonces, a la Junta Militar que gobernaba —a cargo del general Leopoldo Fortunato Galtieri— se le ocurrió que recuperar las islas iba a volver al pueblo en su favor. Al principio, le salió bastante bien: como suele pasar con las guerras, la gente se volvió más “patriota”, sacó banderas a la calle y alentó a la Argentina. Para muchos, en pocos días, el enemigo ya no era el Gobierno, era el Reino Unido. Pero a medida que pasaban los días –aunque ni diarios, ni radios, ni televisión decían lo que pasaba por orden de la Junta Militar – la gente supo que las cosas no iban bien. Que los soldados argentinos, que en su mayoría tenían unos 20 años, no tenían ropa abrigada, ni armas, ni entrenamiento y estaban combatiendo a uno de los principales y más antiguos ejércitos del mundo. Y perdieron.

Durante la guerra, Argentina descubrió la hermandad latinoamericana. Perú, Colombia, Bolivia, Venezuela y Ecuador, entre otras naciones, desde su pobreza, ofrecían su solidaridad, diplomática y real.

Los combates y bombardeos finalizaron el 14 de junio de 1982, día en que los ingleses entraron a Puerto Argentino, capital de las Islas Malvinas, logrando finalmente la rendición de las tropas argentinas.

La vuelta de las tropas argentinas al continente no tuvo nada que ver con la partida: a los jóvenes combatientes los esperaba en tierra firme el silencio, el olvido

...