Periodismo y libertad en México

Análisis: observaciones preliminares del relator especial de la ONU sobre la libertad de expresión y el relator especial sobre la libertad de expresión de la CIDH después de su visita conjunta en México 27 de noviembre – 4 de diciembre 2017

Resumen

La lectura trata sobre la visita de la CIDH en conjunto con la ONU para hacer una investigación sobre cómo se vulneran los Derechos Humanos de los periodistas que han querido decir la verdad sobre los nexos entre narcotráfico y gobierno.

A lo largo de la investigación quedan al descubierto las pocas garantías individuales que se les brinda a comunicadores, investigadores pero sobretodo periodistas a las que están sometidos todos aquéllos que buscan decir la verdad, aunque ello les cueste en muchos casos, la vida.

No obstante, se habla también de un avance entre la primera visita en 2010 y ésta segunda donde las leyes sufrieron varias reformas en pro de la protección de periodistas y sus familias.

A pesar de que la ONU, junto con la Corte Interamericana de Derechos Humanos emiten y seguirán emitiendo recomendaciones en materia de garantías a la libertad de expresión queda demostrado que en México, aún queda mucho por hacer.

Tan sólo en un año, 2016, más de 300 periodistas sufrieron abusos por parte de las autoridades y el crimen organizado para tratar de callar una realidad que vivimos a diario los mexicanos: la delincuencia.

Y aunque estas organizaciones no tienen la facultad de sancionar a los Estados o a las naciones por dichos atropellos, estar enterados como sociedad debería movernos hacia la exigencia del cumplimiento de sus garantías como seres humanos y de las nuestras como acreedores a cuentas claras e información precisa.

Opinión

Es indignante como en México y en los países latinoamericanos en general, la violación de los derechos humanos son una constante y lo vemos a diario en las cárceles mexicanas que están llenas de inocentes, donde los verdaderos culpables son “peces gordos” que no han tocado ni pisarán jamás una de esas.

Sin embargo, más increíble es que como sociedad no tengamos la cultura de la rendición de cuentas, tenemos los índices más altos de violencia y los más bajos en educación pudiendo ser una sociedad activa en estos temas y enfrentando de cara los problemas que nos han traído los pésimos gobiernos que sólo ocultan información y tratan de acallar a quienes traten de sacar a la luz “sus trapitos al sol”.

Es tristísimo ver que de acuerdo al artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos “todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión” y nadie la haga valer o cuando menos no parece importarnos hacerlo... las cifras no mienten, México es un país que lejos de estar a favor de lo mejor, trata de hundirse más y no sólo de los gobiernos para abajo, entre la sociedad misma parece no importarnos el sufrimiento humano y la pérdida de estas vidas inocentes en manos de quienes deberían pagar.

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