"Perro" Y "Abandono", Ahora Sinónimos

Perro: Mamífero doméstico de la familia de los Cánidos, de tamaño, forma y pelaje muy diversos, según las razas. Tiene olfato muy fino y es inteligente y muy leal al hombre.

Abandono: Dejar, desamparar a alguien o algo.

Aparentemente, y según las dos definiciones extraídas del diccionario de la Real Academia Española, perro y abandono no son sinónimos, pero cada vez, se acercan más a serlo, o eso muestran los datos.

Los perros, por definición, crecen puesto que son animales, mamíferos en este caso; por lo cual: si al principio es juguetón, tiene mucha energía y juega con los niños de la casa, más tarde, crecerá, perderá energía, y dejará de jugar con los niños. Incluso llegará el día en que se muera, porque todo animal se muere, termina su vida, nos guste o no nos guste.

Además, el perro es un animal que se acostumbra a la “buena vida” y que requiere de nuestros cuidados, recompensándonos con su fidelidad, dado que, por definición el perro también es fiel, con sus juegos, con su energía. Pero, hay veces, en que no podemos hacernos cargo de ese animal que nos necesita y decimos: “es un animal, es prescindible, puede valerse solo”. Eso es cierto, pero entonces no le hagas el daño de adoptarlo, que te coja cariño y luego lo sueltes en mitad de un campo y te vayas; supuesto que así estamos haciendo un abandono.

En consecuencia del abandono, dejamos al perro (en una gasolinera, en un descampado cerca de la carretera por la que circulamos para llegar a nuestro destino de vacaciones…) y también desamparamos al perro (no le damos comida, no le damos agua, no tiene sitio donde dormir…).

Aún así, hay otras cosas que hacemos los seres humanos, que no son incompatibles con el animal y que podemos hacer. Podemos regalarlo: se acerca el cumpleaños de un familiar al que le gusten los perros y le regalas el perrito de pelo suave, juguetón, o al contrario, tranquilo, que trata bien a los niños, ya un tanto mayor... Aquí, también, cabe tener en cuenta que la familia lo pueda cuidar.

Podemos también, excepto en Catalunya, ya que las perreras están desbordadas de tanto abandono, entregar el perro a una de estas protectoras de animales dónde lo tratarán bien. Es decir, harán nuestro trabajo por nosotros, siendo claro que no podemos con el perro.

Así es que los perros crecen, piénsalo. Cuando crecen, cambian igual que tú cambias y necesitan cuidados igual que tú los necesitas. ¿Se los puedes dar? ¿Podrás soportar el cambio que va a hacer? Si no es así, no adoptes un perro, cómprate un peluche.

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