¿Por Qué Los jóvenes Se Unen A Una Tribu Urbana?

Cuando se es joven las personas se encuentran inmersas en una constante búsqueda; la identidad de cada uno se está formando por lo tanto van probando las diversas opciones que la sociedad entrega, últimamente éstas se encuentran divididas de forma muy marcada y se diferencian unas de otras tanto como en vestuario hasta en nivel cultural.

Cuando un joven se une a una tribu urbana es porque ha encontrado características propias reflejadas en éste grupo; hay una evidente afinidad entre los miembros de éste, por lo tanto la aceptación que los otros le entregan le hace sentirse seguro y apoyado; tener gustos en común y realizar actividades en conjunto afianza el vínculo formado entre unos y otros, de modo que le confiere cierta identidad distintiva dependiendo de la tribu a la que se pertenezca. Sentirse integrado y aceptado a ésta edad es muy importante ya que los jóvenes tienden a buscar apoyo en sus amigos, más que en sus padres a familiares; pertenecer a una tribu y reconocer que integra esta implica una serie de compromisos y responsabilidades y te impide o potencia que entres a ciertos círculos sociales.

Ésta identificación surge cuando los jóvenes comienzan a interiorizar la realidad que les rodea podemos pensar por ejemplo que un joven que se reconoce como “flaite” ha estado expuesto toda su vida a un ambiente en el que prima un bajo nivel cultural, lingüístico y que escuchan música popular, en cambio un muchacho “pelolais” ha sido criado con los pensamientos de sus padres y son rodeados de un ambiente distinguido e incluso más privado y son alentados a mantener éstas diferencias que les separan de la “gente común” y les otorga cierto prestigio.

Como sociedad nos encontramos en una cultura cambiante que propicia el surgimiento de estas diversas tribus a encontrarse con mayor libertad para el individuo de expresarse, las tribus urbanas han existido desde hace muchos años y han surgido por los motivos más variados, pero son una respuesta a un llamado hecho por algunos que necesitan éste vínculo de pertenencia con otros y que sólo pestos movimientos han podido satisfacer, si bien las personas se unen y luego abandonan algunas tribus, éstas permanecen presente, renovándose en algunos aspectos, pero manteniendo su esencia.

Una persona que se une a una tribu urbana tiene una deficiencia personal en su desarrollo sicológico y espiritual ya que no opta por la creación de su propia y real identidad sino que adopta otras que pueden considerarse más “cómodas” y es más fácil dejarse llevar por las ideas y conceptos de otros.

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