Precarización del ingreso y disminución de la deserción escolar en Andalucía tras la crisis financiera de 2008
Enviado por Belen Cabello • 16 de Agosto de 2020 • Ensayo • 2.579 Palabras (11 Páginas) • 119 Visitas
Precarización del ingreso y disminución de la deserción escolar en Andalucía tras la crisis financiera de 2008
Como es de dominio general, la crisis financiera que estalló en 2008 se originó en Estados Unidos. Tal crisis tuvo causas diversas, entre las más importantes, la desregulación financiera y de la banca, y las acciones en política monetaria de las cuales Estados Unidos fue protagonista. La consecuencia más grave de esto fue la burbuja inmobiliaria que detonó en 2008, causando una grave recesión económica en todo el mundo. Europa no fue la excepción, y dentro de esta, uno de los países que resultó más afectado fue España.
El caso de España es muy particular. La economía de este país había estado utilizando la industria de la construcción como catapulta al crecimiento económico, a tal punto que la economía española dependía a un nivel altamente riesgoso de este rubro. Con el desplome de los precios de los bienes inmuebles, empezó el grave problema del desempleo y la precarización del ingreso, y, por otro lado, el aumento en el nivel de precios. Como era de esperarse, todo esto vino acompañado de un recorte en el gasto público.
Una de las regiones a las que más duramente golpeó esta crisis es Andalucía. Esta comunidad autónoma ha sido una de las más rezagadas económicamente, debido al débil desarrollo de la industria y a que su economía se sustenta principalmente en sectores como el turismo y la agricultura. Ha sido un amplio tejido de factores los que han provocado que esta región haya resentido la crisis con mayor recelo.
Debido a una escasa capacidad productiva, Andalucía se ha hecho de alguna manera altamente dependiente de la economía nacional, y por ende, de la economía europea. Subsiste altamente acogida por las políticas de cohesión económica, adjunta de subsidios e inversiones externas. Además, sostiene un sistema financiero débil y poco dinámico, pon lo cual, el crédito no ha podido ayudar a contrarrestar los efectos de la crisis.
Otro factor clave en este problema, es el grado de capacitación de la mano de andaluza. Hablamos de una sociedad con un nivel de formación inferior al del resto de la Unión Europea, razón por la cual, la calidad de empleo y el nivel del ingreso son menores también. Por último, como factor de índole social, se tiene un nivel de desigualdad superior al de otras regiones.
A partir de lo anterior, es notable la complejidad del problema que atraviesa la comunidad andaluza. Hablamos de factores económicos, financieros, sociales e incluso culturales que se han traducido en uno solo, la disminución de la deserción escolar de la población juvenil. Es interesante poder analizar un caso tan particular, el efecto que esto pueda tener en la economía de esta comunidad.
El origen y las consecuencias de la crisis financiera mundial de 2008
Hemos visto como la crisis financiera de 2008 se convirtió en una crisis económica de gran magnitud, la peor desde la Gran Depresión, y la manera en que se contagió rápidamente a la mayoría de los sectores de la economía en todo el mundo. La intensidad de sus efectos ha dependido del país o región y de su relación con la economía estadounidense, entre muchos otros factores.
Lo más común ha sido vincular esta crisis con la burbuja inmobiliaria que se produjo durante la primera década del presente siglo, y que detonó en 2008. Sin embargo, la verdadera raíz fue el conjunto de decisiones en política monetaria tomadas por la Reserva Federal, Banco Central estadounidense.
Tras la crisis de las puntocom, y los ataques terroristas en 2001, fue necesario tomar medidas para incentivar el crecimiento económico. La FED decidió bajar las tasas de interés a niveles nunca vistos. Lo anterior se tradujo en un gran desincentivo al ahorro, al mismo tiempo que la inversión comenzó a repuntar, no solo por parte de agentes americanos, si no que agentes extranjeros iban e inyectaban grandes sumas de capital en la economía estadounidense. El contexto parecía muy prometedor.
Los estadounidenses dejaron de ahorrar, y poco a poco, el nivel de endeudamiento en la economía se fue incrementando. A la vez, que los bancos e instituciones crediticias vieron la oportunidad de negocio, al otorgar créditos de manera desmedida y sumamente desregulada. Gran parte de estos créditos fueron destinados al sector hipotecario.
Además de los créditos tradicionales, surgieron otro tipo de instrumentos financieros, con lo cual se involucraron terceros. Poco a poco, los precios de los bienes inmuebles se inflaron tanto que la situación ya no se pudo sostener, dando comienzo a una de las crisis financieras y económicas más graves de la historia.
Crisis en España
Fue durante el tercer trimestre del año 2008 cuando España cayó en recesión. España tuvo un gobierno de centro izquierda durante los años anteriores a la crisis, y en parte se culpa a sus políticas económicas expansivas y a la lenta reacción que se tuvo en el inicio de la crisis para enfrentarla con medidas eficaces. Aunque se había logrado tener un crecimiento económico estable, este se dio a costa del endeudamiento. Según datos de Eurostat, en 2007 España tenía una deuda púbica del 35.6%, como porcentaje del PIB, que para 2016 se elevó hasta un 99%. Paralelamente, España sufría constantemente la pérdida de competitividad respecto al resto de los países europeos.
Uno de los grandes problemas de España, es que, al pertenecer a la zona euro, no tiene autonomía para tomar decisiones en política monetaria, ni para financiarse a partir de deuda gubernamental. Por consiguiente, la única manera en que puede hacerlo es mediante los mercados, y justamente, los mercados perdieron la confianza en su capacidad de cumplimiento. Tras el inicio de la crisis, la perdida de liquidez fue casi inmediata.
Además, gran parte del crecimiento español estaba sustentado en la industria de la construcción, blanco de gran porcentaje de la inversión extranjera. En 2007, el peso de esta industria sobre el PIB era de 10.1%, según datos de Statista. Tras la crisis, la baja demanda de viviendas afectó gravemente al negocio y provocó problemas de incumplimiento en créditos hipotecarios.
Otra grave consecuencia, ha sido el desempleo estructural. España ha sido víctima de este fenómeno en varias ocasiones durante las últimas décadas, e incluso en épocas de bonanza, ha tenido tasas de desempleo comparables con las tasas de otros países desarrollados en periodos de recesión. Tras el comienzo de la crisis, la tasa de paro llegó hasta el 26.2% en 2013, y aunque se ha reducido, actualmente asciende al 16.1%[1], 9 puntos porcentuales por encima del promedio de la Unión. De los países que conforman la OCDE, España es el segundo con la mayor tasa de desempleo. El sector de la población más afectado son los jóvenes.
...