¿Qué está pasando con las aguas subterráneas y su administración?

¿Qué está pasando con las aguas subterráneas y su administración?

Los recursos naturales son fundamentales para nuestra existencia y aun no hay una conciencia plena de ello, el Dagma realizó un estudio donde analiza la problemática que viene presentando uno de dichos recursos; el agua subterránea ofrece una reserva hídrica ignorada y apartada de lo que se considera como funcional o elemental. Representa un gran porcentaje de recursos que utilizan diversas empresas, establecimientos y demás asentamientos poblacionales.

Por lo tanto, se inició un proceso investigativo, para esclarecer lo que se viene presentando y los resultados que se describirán a lo largo del texto no fueron lo esperado, arrojando altos índices de riesgo, corrupción, falta de control y desperdicio del mismo.

Como se puede observar ésta sociedad se encuentra en una expansión acelerada y feroz, comprometiendo gran parte de los recursos ambientales y en ocasiones los organismos de control carecen de la capacidad regulativa que se debe tener para estas expansiones aceleradas que cada día se generan, por lo tanto, el uso indebido de recursos y falta de control ha generado un deterioro significativo en las aguas subterráneas, debido a que son extraídas en gran volumen por sectores particulares, entre ellos resalta:

• Lavado de vehículos
• Servicio de industria
• Riego
• Aseo
• Domestico

Estos representan los mayores índices de consumo, uno de los principales problemas se encuentra en la falta de control y medición que se gasta del recurso, los diversos sectores han tomado partido libre sobre el agua y han manejado el recurso a su placer, se supone que hay una acreditación para el uso de ello pero no hay una medida efectiva que controle en realidad el consumo que se le da y esto se debe a que los organismos de control no rigen la norma sobre las empresas y permiten que estas omitan las reglas y continúen haciendo uso desmedido del recurso, ocasionando el siguiente problema traducido en el tratamiento y nivel de contaminación que posee el agua una vez utilizada.

En consecuencia se observa un panorama de contaminación y a su vez de recursos públicos y monetarios que no es compensado, porque estos costos que deberían ser asumidos por las empresas que utilizan el recurso se vuelven una caja solidaria donde los ciudadanos del común deben de pagar para acceder a un recurso fiable y un sistema efectivo de aguas residuales, además de eso la contaminación de dicho recursos una vez empleado, debería ser tratada por lo sectores que lo emplean, pero toda esta contaminación se traslada a las principales fuentes hídricas provocando un impacto fuerte sobre las redes de agua potable y recursos hídricos que son empleadas para el consumo humano.

Se puede observar una evasión total por parte de los sectores que emplean el recurso fomentando un desinterés por parte de ellos y los organismos de control por la conservación del mismo.

Con esta información se puede pasar a resolver el interrogante inicial donde la incógnita es la siguiente, ¿Qué está pasando con las aguas subterráneas y su administración? Se genera un problema a gran escala que compromete el recurso de forma directa, hay un uso desmedido, contaminación, gasto y demanda creciente que genera una problemática inmensa de no ser tratada a largo plazo, traducida en el agotamiento del recurso o la contaminación severa del mismo, volviéndolo algo incapaz de ser utilizado.

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