RESUMEN DE LA PELICULA EL CASTILLO DE LA PUREZA

Película “El Castillo de la Pureza”, de Arturo Ripstein.

Esta historia se desarrolla en la vieja casona de estilo europeo que estaba prácticamente en el abandono, convencido de que el mundo exterior es dañino para su familia, Gabriel Lima ha mantenido encerrados a su esposa y a sus hijos durante dieciocho años. Su primera hija nació, no quiso ponerle “el nombre de alguna santa” y la llamó Utopía, tuvieron a Porvenir, Voluntad; Gabriel Lima había montado una pequeña industria casera, consistente en una fábrica de venenos para ratas e insecticidas, cuando tuvieron la edad suficiente, sus hijos elaboraban los insecticidas y el veneno para rata que el padre vendía en las tiendas del centro de la Ciudad de México. los días pasan, la familia se entretiene trabajando con la elaboración del veneno y el sale a vender en las tiendas del barrio. El frágil equilibrio emocional de la familia Lima se rompe el día en que se da cuenta de que sus hijos están despertando a la adolescencia; Además, para alejar a sus hijos de cualquier tentación, decidió que jamás irían a la escuela, el mismo les impartía las clases y era autoritario, a cualquier ruido o mala contestación los castigaba, tampoco serían tratados por médico alguno, tenían que vivir en estado natural, alejados del supuesto progreso del siglo XX. Inspirado en la lectura de obras filosóficas de distintos periodos y diferentes corrientes, se asumió como “librepensador”, aunque ello no lo despojaba de sufrir celos enfermizos ante la belleza de su joven esposa, la golpeaba, violaba y la humillaba diciéndoles que cuantos hombres había estado, renegaba de cualquier tipo de religión. Tenía una enorme habitación donde experimentaba, gozaba al atrapar roedores y atormentarlos, administrándoles diferentes cantidades de venenos, disfrutaba su sufrimiento. Se comportaba con su familia como un tirano, ególatra, despiadado, rencoroso y frustrado con todo lo que sucedía alrededor de su casa. El padre exigía respeto y devoción, se consideraba dueño de sus hijos, era estricto y los obligaba a trabajar largas jornadas. Los alimentaba todos los días con agua, avena y frijoles, una alimentación modesta que favorecería a la espiritualidad. Los horarios para la comida eran rigurosos y, cuando la familia estaba reunida, el padre hablaba de sus ideas ante los niños que comían silenciosos sin entender lo que les decía, no tenían derecho hablar en la comida porque era sagrada, no comían carne estaba prohibida. Después de trabajar, reunía a su familia en un cuarto y les leía obras de filosofía, les hablaba del mundo exterior, de todo lo que transcurría afuera de la casa donde vivían permanentemente encerrados, lo describía como un sitio lleno de horrores, de maldad e inmundicia. También los obligaba aprender frases de Hegel de memoria, escuchar música clásica y aprenderse todo lo concerniente a cada una de las piezas, bajo amenaza de reprenderlos si cometían errores, no tenían derecho a equivocarse, bostezar, mantenerse derechos, el ruido le molestaba, era una disciplina estricta en todos los sentidos. Por ello decía que entre más habitantes existieran en el mundo se incrementarían

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