Reportaje Querétaro

“Concheros” Querétaro tradición que vive.[pic 2][pic 3]

Ubicado en la parte central de México y denominado “la perla del Bajío” se encuentra el hermoso Estado de Querétaro una ciudad colonial. Hablar de Querétaro es hacerlo de bellezas naturales, sitios arqueológicos, históricos y tradiciones ancestrales que pocos estados tienen la fortuna de ofrecer.

Entre telas brillantes, colores vivos, penachos de plumas de faisán y conchas de mar en los pies, se encuentra el vestuario de los actores principales de una de las costumbres más relevantes y ancestrales de Querétaro. Los concheros, que bailan sus danzas desde la conquista española absoluta y aún se mantiene vigente después de 500 años de su origen.

1        La palabra “conchero” hace referencia a la concha de armadillo que forma la estructura básica del instrumento musical utilizando en los rituales.

Año tras año se congregan múltiples grupos de danza autóctona y concheros que con gran espiritualidad y fervor danzan en honor a la santa cruz de los milagros. La fiesta que se desarrolla en el cerro de Sangremal. Se caracteriza por el baile de los concheros, quienes danzan durante dos días seguidos. Esta fiesta se lleva a cabo del 13 al 15 de septiembre, los danzantes suben bailando el cerro de Sangremal, hasta llegar al templo de la cruz. En la noche, los continúan bailando hasta el amanecer por más de 10 horas, el día 15 finalizan los bailes y se da paso a la misa de la cruz.

Según los danzantes concheros hispanos la tradición, el nacimiento de la Danza fue un martes 25 de julio de 1531, tras largo tiempo de sangre y destrucción, los chichimecas tras la caída de Tenochtitlán deciden abrirse a la posibilidad de un pacto de paz con los españoles y celebrar después de una simbólica batalla de honor. El día propuesto fue el 25 de julio, fecha significativa para ambas partes. Ese día los chichimecas veían aparecer el “árbol de la vida” cuando la constelación de Sagitario estaba en lo más alto en el horizonte, mientras que los españoles celebraban la fiesta de Santiago Apóstol. Así pues, al amanecer de tal fecha y en el cerro de Sangremal ambos grupos comenzaron una lucha sin armas, cuerpo a cuerpo. Pero los ánimos fueron exaltándose y todo podía suceder, cuando sobre los cielos ocurrió un eclipse de sol y apareció una cruz luminosa acompañada de un personaje que los nativos identificaron como Quetzalcóatl y los españoles como el Apóstol Santiago. Todos cayeron de rodillas a la vez que se oyó una gran voz proclamando “¡Él es Dios!” Los españoles levantaron una cruz de piedra en el lugar (la “Cruz de los Milagros”) y los chichimecas ejecutaron sus danzas sagradas para celebrar el acontecimiento. Desde entonces se ha bailado en tal lugar de manera ininterrumpida y la expresión “¡Él es Dios!” ha quedado como saludo obligado de los concheros.

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