Salvador de la plaza

Presentación.-

Tiempos difíciles vive la revolución bolivariana, momentos en los que la patria y nuestro pueblo están siendo sometidos a condiciones bastante duras para la adquisición de alimentos, medicinas y otras condiciones materiales mínimas de vida. Nuestro país sufre los efectos de una acción despiadada llevada a cabo por parte de los operadores del sistema capitalista en nuestro territorio.  Atravesamos por una grave crisis económica, de carácter estructural, entre otras cosas, por la extrema dependencia hacia la renta petrolera; lo que nos hizo dependientes de las importaciones durante décadas, y,  que el comandante Hugo Chávez intentó revertir a través de diversas acciones, planes, programas y proyectos tendentes a desarrollar un aparato productivo nacional moderno, fuerte, tanto en el sector público, como en el privado. Todo esto con un horizonte bastante claro; la consecución del objetivo estratégico de consolidar un proyecto político, económico y social denominado Socialismo del Siglo XXI; un socialismo adaptado a las condiciones de nuestro territorio; pero siempre con miras de expandirlo hacia toda nuestra américa.

El peso que recae sobre los hombros de esta generación de hombres y mujeres, que formó nuestro comandante eterno Hugo Chávez, no es poca cosa, de nosotros depende la estabilidad, la trascendencia y la irreversibilidad de la revolución bolivariana; llevar este barco a buen puerto no solo depende de la voluntad de un grupo reducido de cuadros revolucionarios (cuya tarea permanente es el crecimiento y expansión); depende en gran medida de la capacidad que estos tengan para superar intereses mezquinos personalistas – que nada tiene que ver con los intereses populares- y de contribuir con su esfuerzo físico y cognitivo al desarrollo de las fuerzas productivas; un desarrollo fundamentado en nuevas relaciones sociales de producción.

Es por lo antes expuesto que se hace necesario planificar acciones conjuntas, coordinar iniciativas  articular esfuerzos y contar con orientaciones estratégicas que nos permitan delinear y sustentar un programa de formación política dirigido a las y los jóvenes militantes revolucionarios; el mismo se plantea con el propósito de contribuir a la elevación del nivel de conciencia en lo individual y colectivo de estos, además de producir teorías que permitan identificar y romper con formas del conocimiento que han sido producidas y apropiadas por la clase social domínate para reproducir la lógica del capital y detentar su dominio como clase social.

Es por ello que nos planteamos lo siguiente:

Objetivo General:

Constituir  una escuela de cuadros orientada a la formación, capacitación e investigación en el área de las ciencias sociales, políticas, económicas y tecnológicas.

Objetivos específicos:

Conformar áreas de estudios y líneas de investigación a ser desarrolladas en las investigaciones que realizará la escuela de formación de cuadros.

Producir teoría orientada a la trasformación estructural de la sociedad venezolana.

Aportar teoría que tienda a la construcción permanente del pensamiento político y económico venezolano.

Estudiar el petróleo y el fenómeno de la renta como elementos fundamentales para comprender las bases de este modelo económico dependiente y su repercusión en la constitución de la sociedad venezolana.

Generar procesos orientados hacia la construcción de mayores niveles de conciencia revolucionaria.

Formar técnica y políticamente a la generación de relevo que asumirá responsabilidades en las distintas instancias de gobierno y de organización popular.

Fomentar la práctica política enmarcada en los principios ideológicos de la revolución socialista  bolivariana.  

Perfil del cuadro-militante egresado de la escuela de formación Salvador de la Plaza

En la escuela de formación Salvador de la Plaza se pretenden desarrollar las cualidades de la juventud, que al calor del pueblo, se haya forjado una idea y una práctica de la política, donde la honestidad y la perspectiva de una sociedad más justa hayan transversalizado su pensamiento y acción.

La discusión en torno al perfil de los camaradas que egresarán de la escuela de cuadros, lejos de ser una discusión sencilla, siempre conlleva elementos de disonancias y discrepancias. Caracterizar las virtudes de alguien que milite a favor de una sociedad más justa e igualitaria, podría resultar en un listado infinito de cualidades que solo los hijos de los dioses del olimpo podrían alcanzar. Pero a riesgo de hacer un listado infinito, planteamos algunas potencialidades básicas que los militantes que pasen por la escuela de formación Salvador de la Plaza habrán de desarrollar.  

Participa activamente en la construcción de una sociedad distinta al modelo de producción capitalista, es decir, enfoca sus esfuerzos, con disciplina y responsabilidad, en la construcción de una sociedad socialista.

Posee criterio, capacidad de análisis y elevada conciencia del deber social para desarrollar políticas con creatividad e iniciativas prácticas que lleven soluciones eficaces a los problemas cotidianos de la población.

Comparte la convicción de disponer y organizar en el seno de la juventud espacios para el estudio, la reflexión, la crítica y la formación.

Posee elevados niveles de participación y protagonismo en lo político, social y cultural.

Posee firmeza al defender sus convicciones y el proyecto  político al que denominamos socialismo bolivariano del siglo XXI.

Posee la capacidad de producir teoría revolucionaria en los diversos campos del conocimiento; teoría encaminada a la transformación radical de sociedad capitalista en la que actualmente se encuentra nuestro país.

Sistema de funcionamiento

La intención de esta escuela de cuadros no es sobreponerse o entorpecer iniciativas formativas existentes a lo largo y ancho del territorio nacional; por el contrario busca complementar y llenar el vacío generado por la ausencia de un núcleo que coordine y articule todos los sistemas de formación política a nivel nacional.

Esta instancia formativa busca contribuir al sistema de Formación Simón Rodríguez del PSUV, en su esfuerzo por generar espacios para la preparación ideológica y técnica de todo militante joven del partido que desee participar en dicha estructura.

Estructura organizativa

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Plan de estudios

El plan de estudios comprende el contenido, los métodos de enseñanza y aprendizaje, las metas y objetivos que se proponen alcanzar, así como la manera en que su efectividad puede ser medida, además de todas las acciones que los militantes deben llevar a cabo  concreta y activamente para culminar de forma exitosa las experiencias que contribuyan al aprendizaje, que se traduzca en militantes capaces de razonar combinando el juicio político y técnico.

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