VALOR Y SIGNIFICADO DE LA LEY HOY

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VALOR Y SIGNIFICADO DE LA LEY HOY

El valor de las leyes hoy en día es muy importante para no vivir en la anarquía, si no hubiera leyes, normas, reglamentaciones cada uno haría lo que quisiera. Tomando como ejemplo el tránsito de una Importante avenida donde se podría circular de cualquier manera, en todos los sentidos y de todas las formas posibles, independientemente de poder estacionar donde quisieras y como sé te ocurriera, esta no duraría nada, no se podría poder pasar o cruzar una de sus calles. Si con leyes y ordenanzas a veces el tránsito se hace más que pesado, que sería sin ellas hoy en día. Ahora; comparándolo con una sociedad totalmente desorganizada, no contaríamos con alimentos, atención médica, medidas de seguridad, trabajo etc. sería imposible, teniendo en cuenta que aún con, leyes, reglamentaciones, etc. Muchas veces la vida es difícil.

La Ley es el medio para establecer derechos, pero también obligaciones, debe procurar siempre el bien de los habitantes de un país no de unos pocos, ni pobres ni ricos, sino de la mayoría, es decir, la mitad más uno o de quienes se expresen en determinado sentido, ya que el Derecho solo regula conductas externas de las personas, si yo no expreso mi opinión, ese pensamiento no tendrá consecuencias jurídicas.

La ley es el medio para que todas las personas podamos convivir y resolver de la manera más civilizada nuestra diferencias y desacuerdos, para evitar recurrir a los golpes, la violencia u otras formas, que aún "ciudadanas y pacíficas" afectan los derechos de otras personas. Si no estamos de acuerdo con la aplicación o la interpretación que se haga de la ley podemos recurrir a los tribunales, quienes con base en pruebas reales y concretas decidirán quién tiene la razón o el mejor derecho, pero aquí es importante acreditar el porqué de nuestra posición, un tribunal nunca podrá resolver por simples presunciones o dichos de las personas, quien afirma tiene la carga de la prueba.

LA DEVALUACIÓN DE LA LEY EN LA ACTUALIDAD

La ley en la actualidad ha perdido el valor y el prestigio que tuviera en otros tiempos, han surgido diversas áreas de conocimiento en el ámbito jurídico, derecho comunitario europeo, nuevas tecnologías, bioética, biojurídica, etc. Que han afectado este valor que tenía la ley. Algunos factores que han influido son los diferentes sectores que en otros tiempos no existían y que ahora es necesario regular, la ley en la actualidad influye en diferentes intereses de tipo ideológicos, económicos, políticos o electoralistas. Donde la ley se ha desviado de su verdadero objetivo, al pasar de los años la ley a sufrido cambios que la han hecho perder valor, donde se enfoca mas en otros factores y se mezcla con política donde no importa que la ley dañe la honestidad de todo un país y sus leyes sean para el bien común de los más poderosos.

El valor de la ley se pierde cuando en ocasiones las leyes son impuestas por la fuerza. Cuando ocurre esto, estamos ante un caso claro de injusticia. Si viviéramos en una sociedad donde las leyes perdieran todo su valor y no existieran, seria un caos. Prevalecería el más fuerte y con ello hablo del aspecto físico, sino más bien del económico, políticos, entre otros. Así mismo, la sociedad crearía normas no escritas, las cuales, si bien servirían para crear cierto orden, este podría ser roto con mucha facilidad.

Así mismo son aprobadas leyes que no son muy bien vistas por la sociedad y que la divide en grupos sociales, al momento de ser aprobadas el Estado pierde valor y las leyes divinas como no mataras y la unión de hombre y mujer se violentan.

Existen casos de corrupción, muerte, violación de los derechos humanos, la ley en muchas ocasiones se modifica y las personas que cometen dichos actos salen impunes, no hay justicia y la ley de los tiempos antiguos donde le temían y no se violentaba está desapareciendo.

LEY Y DERECHO

Una ley es y debe ser el reflejo de la realidad social en el momento de ser promulgada. Es una norma para esa realidad. El derecho debe ser un ordenamiento jurídico para una época determinada. Al envejecer la ley, pierde consistencia porque su lógica es directamente proporcional a su tiempo. Una ley que se quiera aplicar cien años después de promulgada, seguirá siendo ley, pero posiblemente ya no sea derecho.

El derecho es un ordenamiento normativo, conjunto de disposiciones consecuencia del poder legítimo, que reglamenta las relaciones de convivencia de la sociedad y que permite el concierto, el hacer las cosas bien para lograr la paz. Por eso el derecho en cuanto puede ser aplicado naturalmente al responder a la necesidad de un tiempo determinado.

El derecho es la espiritualidad de la ley, su alma, el ideal que en esa ley dejó impreso el legislador y ambas van de la mano. El derecho es ley escrita promulgada; pero entendiendo que, al perder la ley su propia realidad, deja de ser derecho. Una ley, fuera de su propio tiempo, no puede garantizar la necesaria sobrevivencia de la sociedad. Por lo tanto, no podrá ordenar las cosas bien ni asegurar la paz.

En el estado moderno, el derecho se identifica con la ley, pero, con el transcurso de los años, no siempre la ley se identifica con el derecho.

El gran error de algunos jueces está en que, al interpretar la ley solamente la aplican dejando fuera el derecho. Solo el derecho garantiza la justicia; la ley, en ocasiones, nada más la señala.

El Estado es producto de la ley y la ley consecuencia del Estado. Un ordenamiento jurídico que sirve de estructura a un Estado, pero que ha dejado atrás al derecho, es Estado, pero ya no es de derecho, aun cuando el orden jurídico se mantenga vigente.

En algunos países el derecho lo viene definiendo la jurisprudencia, por lo que el derecho es la decisión del juez y no el resultado de la norma. El derecho está en la sentencia y no en la ley.

Pero en países como el nuestro, el derecho siempre ha de ser producto de la ley y no de la sentencia del juez. El juez aplica, pero no crea. Cuando no existía derecho escrito, el juez interpretaba la costumbre y creaba el derecho, como en tiempos antiguos donde el derecho se basaba a la costumbre. En el Estado moderno, la ley es la fuente del derecho y lo resguarda por un tiempo determinado, pero luego se le escapa en busca de una nueva ley.

La ley, oportuna en su tiempo, ampara el derecho y garantiza el equilibrio y la coherencia. Cuando la ley queda fuera de época, produce el desorden y la violencia porque en ella el derecho ha desaparecido.

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