Villa San Luis, una historia de segregación, ilegalidades y un futuro incierto

De Población Ministro Carlos Cortés a Villa San Luis

Durante los años  1930 el fundo San Luis, de aproximadamente 150 hectáreas, fue donado a la Beneficencia, institución antecesora al Ministerio de Salud. Posteriormente el paño se mantuvo congelado durante cuarenta años, debido a la impugnación del testamento, por parte de los hijos del donante.  Durante este periodo Las Condes comenzó a poblarse, principalmente por habitantes de la clase alta del centro de Santiago y como también por parte de la fuerte inmigración de miles de obreros y campesinos que llegaron a asentarse en la capital. Desde mediados del siglo XX miles de personas vivían en Santiago en tomas y otros asentamientos ilegales. Las Condes fue una de las comunas más afectadas, con la mayor cantidad de campamentos y tomas registrados en el año 1970, siendo los más emblemáticos el campamento Nueva Patria, Ho Chi Min y El Esfuerzo. Durante el gobierno de Eduardo Frei, en 1967, se crea el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, con el fin de mejorar la calidad de las viviendas, el mejoramiento y organización de la ciudad de Santiago. Una de las dependencias de este ministerio era la Corporación de Mejoramiento Urbano (CORMU), la cual tenía atribuciones de comprar o expropiar terrenos, en ese tiempo dirigida por el arquitecto Miguel Eyquem. [pic 1]

El fundo San Luis, un oasis en medio de una comuna de Las Condes, ya establecida y urbanizada, fue expropiado por la CORMU, quién ideo un nuevo espacio urbano en dicho paño de 150 hectáreas.  La Remodelación Parque San Luis, albergaría 70 mil habitantes de clase media y media alta, con un gran parque y un centro cívico. Un proyecto único a nivel nacional y latinoamericano.

En el año 1970 asume como presidente de Chile Salvador Allende, quien posiciona en la directiva de la CORMU a Miguel Lawner, quien da un giro al proyecto ideado por Eyquem. Debido a la gran cantidad de tomas ilegales y campamentos en la comuna de Las Condes, Lawner dispone parte del terreno, para dar solución el problema de los “sin casa”, destinándolo para viviendas sociales. En medio de una de las comunas más ricas de Santiago la CORMU se propone terminar con la segregación, como es posible apreciar en las palabras de Miguel Lawner:

“Nosotros dijimos que en nuestro Gobierno no iba a haber segregación. Las atribuciones de Cormu permitían terminar con la especulación inmobiliaria y teníamos la convicción de que los sin casa tenían derecho a permanecer en las comunas donde ellos querían. No íbamos a mandar a nadie a la periferia, así es que llamé a Miguel Eyquem, que había hecho las primeras maquetas, y le dije: Esta parte del fundo va a ser para los sin casa de Las Condes. Trabajan acá, entonces ¿por qué no? ¿Por qué los pobres no podían vivir en una comuna acomodada si tenían sus trabajos ahí? ¿Por qué íbamos a mandar a vivir a la gente de los campamentos de La Pintana? Así empezó esta historia”.^[1]

Durante el año 1970 comienza la construcción de los departamentos ubicados al sur de la Avenida Presidente Riesco, un conjunto habitacional que albergaría a 1.038 familias de bajos recursos, provenientes de los campamentos de la comuna. Dichos departamentos fueron entregsados el año 1973, sin contar la recepción final de la comuna de Las Condes.^[2] La Población Ministro Carlos Cortés sería el emblema de la integración urbana socioeconómica.

La participación de los futuros pobladores presentó un experiencia completamente innovadora, haciéndolos partícipes de la construcción y pre asignando las viviendas a las familias. Anteriormente, el Estado construía viviendas sociales sin tener antecedentes de quienes las habitarían, en cambio estas eran construcciones con nombre y apellido. Incluso cada puerta de los departamentos tenían un sobre con los nombres de sus futuros dueños. [pic 2]

El golpe de estado perpetrado por las fuerzas militares en 1973 decidiría el destino de la Población Ministro Carlos Cortés. El ejército comenzó a desalojar a los habitantes de la población, argumentando la ocupación ilegal de los departamentos, para destinarlos a las familias de los suboficiales, quienes en ese entonces vivían alejados de la Escuela Militar. Los dueños originales fueron llevados a comunas periféricas, mientras que un grupo reducido logró mantener sus departamentos, principalmente aquellos del Lote 18. Lote donde se daría origen a la polémica situación actual de la Villa San Luis, renombrada así durante la dictadura. Incluso la deuda de los pobladores se mantuvo vigente, teniendo que pagar dividendos asociados a los nuevos departamentos, pero ahora para obtener la vivienda donde fueron relocalizados. Hasta el final de este periodo los departamentos fueron habitados por los funcionarios del ejército. Es importante aclarar que el Servicio de Vivienda y Urbanismo (SERVIU) para cada región es creado durante el Gobierno Militar, fusionando la CORMU junto a otras tres corporaciones relacionadas con vivienda y urbanismo, por lo que los terrenos de la Villa San Luis pasan a ser propiedad de esta institución.

Durante la transición a la democracia ocurrió un hecho clave en el destino de la Villa, el 12 de diciembre de 1989, al día siguiente del triunfo de Patricio Aylwin en las elecciones presidenciales. El SERVIU Metropolitano, aún bajo el mandato del régimen militar, transfirió al Ministerio de Bienes Nacionales, bajo escritura pública inscrita a fs. 89074 Nº 63.726 del Registro de Propiedad de 1989 del Conservador de Bienes Raíces de Santiago, todos los lotes de la Villa San Luis. Posteriormente en 1991, por el Decreto exento N°38 del 21 de junio, Bienes Nacionales hace entrega de los terrenos al Ministerio de Defensa (MINDEF), quien a su vez se los otorga al Comando de Bienestar del Ejército, con la condición de ser utilizados exclusivamente para fines habitacionales de la institución, con una clausula clave:

“Si el Servicio beneficiario no utilizare los inmuebles en los fines señalados o si los cediere, a cualquier título, se pondrá término de inmediato a la presente destinación, bastando para ello el sólo informe de la Secretaría Regional Ministerial de Bienes Nacionales de la Región Metropolitana de Santiago, que acredite cualquiera de la circunstancias antes señaladas”.^[3] 

Mediante otro Decreto exento, signado 228 el 15 de octubre de 1993, el Ministerio de Bienes Nacionales excluye de la cláusula de uso habitacionales al lote 18, el cual contenía los blocks 16 y 17, habitados por los últimos pobladores de la Villa San Luis.

Finalmente, en 1997, el MINDEF vende la totalidad de la Villa San Luis, a excepción del Lote 18, a una sociedad inmobiliaria, quienes desarrollan un nuevo conjunto habitacional y comercial de vanguardia a nivel nacional llamado Nueva Las Condes. El año 2002 comienza la construcción de este nuevo centro de negocios, proyectado en al sur del Parque Araucano y al poniente del Lote 18 de la Villa San Luis. Por consecuencia el Lote 18 queda completamente aislado y descuidado Más adelante, en el año 2011, el Lote 18 sería comprado al MINDEF por otra sociedad inmobiliaria, que a su vez fue comprando los departamentos de los últimos habitantes del lugar, hasta que, finalmente, en el año 2015 fue vendida la última propiedad de la  Villa San Luis. Luego de la venta del último departamento, el Comité de Defensa de la Villa San Luis comenzó la movilización para que los últimos bocks, ya en propiedad de la inmobiliaria, se declararan Monumento Nacional. El 28 de febrero del año 2017, con ayuda de Lawner , se  realiza dicha solicitud al Consejo de Monumentos Nacionales, logrando que el 28 de junio del mismo año se declarara Monumento Histórico. Lo anterior, a pesar de que la inmobiliaria tuviera el ante proyecto aprobado por la Dirección de Obras Municipales de la Municipalidad de Las Condes.  [pic 3]

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