Napoleón Bonaparte biografia

Napoleón Bonaparte

Objetivo del trabajo

La investigación sobre el personaje histórico Napoleón Bonaparte tiene como fin conocer a esta persona con gran afluencia histórica la cual debido a sus cualidades y sus acciones tuvo protagonismo en Francia, y no solamente en este país sin en Europa, conocido de muchas maneras tanto malas como buenas, y al ver su vida y la manera que este actúa, sino aprender más de la historia de Francia y como la historia de esta influye en la historia universal.

Así ampliando nuestros conocimientos, capacidad de redacción e investigación tratando de encontrar la mayor cantidad de información posible de este personaje y sintetizándola, viendo los aspectos más trascendentes.

Datos personales

Nacimiento

Napoleón, bautizado como Napoleone di Buonaparte, nació en el seno de una familia noble, en Ajaccio, capital de la actual Córcega el15 de agosto de 1769, solo un año después de que Francia comprase la isla de Córcega a Génova, Italia, haciéndolo gracias a esta compra francés.

Familia

Su familia era parte de la nobleza local de 8 hijos, los varones eran José, Napoleón, Lucien, Luis y Jerónimo, las niñas eran Elisa, Paulina y Carolina. Los padres eran María Leticia Ramolino y Carlos María Bonaparte.

Maria Leticia Ramolino era una mujer de notable personalidad, esta fue la figura fundamental de su niñez. Exigía a sus hijos que se dieran un baño diario, a pesar de que lo común era darse un baño una vez al mes, demostrando loa adelantada a su época que estaba.

Carlos María Bounaparte, era un abogado, fue nombrado en 1778 representante de Córcega en la corte de Luis XVI, lugar donde permaneció durante año.

Este siempre tenía agobios económicos debido a sus inciertos tanteos en la abogacía, logro sobrevivir gracias a su posesión de tierras.

Luego de problemas debido a su posición política, viajo hacia la metrópoli para acreditar su hidalguía llevándose a sus dos hijos mayores José y Napoleón.

Estudios

Su padre había llevado a Napoleón y su  hermano José a la metrópoli debido a que había conseguido que estos entraran en calidad de becarios  en la escuela militar francesa  de Brienne-le-Château  el Colegio de Autun, cuando Napoleón tenía 10 años. Antes de entrará debió de aprender francés, idioma que hablo con un marcado acento italiano. Obtuvo notas destacadas en Matemáticas y Geografía, y en las demás materias la nota suficiente para aprobar. Sus méritos escolares en las matemáticas a las que fue aficionado posteriormente le fueron de gran utilidad para su futura especialidad castrense, la artillería y para su ingreso a la escuela École Royale Militaire de París. Aunque había buscado en un principio una formación naval, terminó estudiando artillería en la École Militaire. Después de su graduación en septiembre de 1785, fue comisionado como teniente segundo de artillería. Tomó sus nuevas obligaciones en enero de 1786, a los 16 años. Fue destinado de guarnición en la ciudad de Valence. En aquellos años, el muchacho presentaba un aspecto semisalvaje y apenas hablaba otra cosa que no fuera el dialecto de su añorada isla. Sus compañeros, hijos de la aristocracia francesa, veían en él a un extranjero raro y mal vestido, al que hacían blanco de toda clase de burlas; no obstante, su carácter indómito y violento imponía respeto tanto a sus camaradas como a sus profesores. Lo que más llamaba la atención era su temperamento y su tenacidad; uno de sus maestros en Brienne diría de él: «Este muchacho está hecho de granito, y además tiene un volcán en su interior».

También sirvió de guarnición en Auxonne, Auxonne hasta el estallido de la Revolución francesa (aunque se tomó casi dos años de licencia en Córcega y París durante este lapso por el fallecimiento de su padre). Poco después de comenzar la revolución, Napoleón se encontraba en Córcega. Apoyó la facción jacobina y obtuvo el rango de comandante segundo de la Guardia Nacional de Voluntarios de la isla. Después de entrar en conflicto con el líder nacionalista Pasquale Paoli (antiguo héroe de Napoleón), Bonaparte y su familia fueron obligados a huir a Francia, donde llegaron en junio de 1793.

Matrimonios

Cuando Napoleón comenzó a trabajar en la sección topografía del Departamento de Operaciones, tuvo un trato más directo con autoridades, en su convivio con personas “importantes” conoció a Josefina de Beauharnais. Josefina Tascher de la Pagerie (tal era su nombre de soltera) era una dama criolla oriunda de la Martinica que tenía dos hijos, Hortensia y Eugenio, y cuyo primer marido, el vizconde y general de Beauharnais, había sido guillotinado por los jacobinos. Esta era 5 años mayor que Napoleón y se convertiría en su gran amor la cual lleno sus vacíos sentimentales.

Antes de participar en la guerra de Italia se casó con Josefina, en ceremonia civil. Pero esta le fue infiel en su ausencia. Celoso y bastante mando a llamarla para que este a su lado en la batalla.

Celebraron su matrimonio en una ceremonia privada después de la pedida del papa al ser coronado Napoleón. Antes de esta coronación a todas las infidelidades de Josefina Napoleón solamente había correspondido con unas cuantas aventuras.

Hasta que un día conoció a la condesa polaca María Walewska en 1806, en el transcurso de una campaña contra los rusos. El intermitente pero largamente mantenido amor con la condesa dio a Bonaparte un hijo, León; el ansia de paternidad y de rematar su obra con una legitimidad dinástica se asoció a sus cálculos políticos para decidirle a divorciarse de Josefina y a solicitar la mano de la hija de Francisco II de Austria, la archiduquesa María Luisa de Austria o de Habsburgo-Lorena, emparentada con uno de los linajes más antiguos del continente.

Decide pedir la mano de la archiduquesa debido a que antes había perdido su alianza con Austria y tras una batalla recupera sus lazos toma esta decisión vinculándose con una de las familias reales más antiguas de Europa.

María Luisa en 1811 da a luz a Napoleón II. (de corta y desvaída existencia, pues murió en 1832), que sería proclamado heredero y sucesor por su padre en sus dos sucesivas abdicaciones (1814 y 1815) y al que otorgó el título de rey de Roma como heredero del Imperio, fuera mejor aceptado por las monarquías reinantes., pero que nunca llegó a reinar. Con el tiempo, María Luisa de Austria proporcionaría al emperador una secreta amargura al no compartir su caída; en 1814 regresó con el pequeño Napoleón II al lado de sus progenitores, los Habsburgo, y en la corte vienesa se hizo amante de un general austriaco, Adam Adalbert von Neipperg, con quien contrajo matrimonio en terceras nupcias a la muerte de Napoleón.

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